el origen de los guardianes II: quien soy en realidad?

Parte 14 recuerdos 2

6 meses después de la victoria contra Pitch.

- ese poseidón es muy... Atrevido. - decía gisel caminando en la torre iffel aprovechando que estaba sola. Había querido venir desde siempre.

Caminaba en el barandal siendo sostenida de Jack, quien flotaba a su lado sin problema, ya que volar no era algo que aun donimara la chica, y no quería arriesgarse.

- ¿atrevido? - dijo Jack sintiendoq ue no lo ofendió lo suficiente. - un abusivo mujeriego diría yo ... Y estoy siendo amable. - le aseguró.

- por favor, solo coqueteó un poco. - le dijo gisel.

- los dioses griegos coquetean a todo lo que les guste. - dijo dejando en claro que no le caía bien esa forma de ser de los dioses. Jugar con las inmortales era algo muy bajo, y jugar con gisel era lo peor para Jack. - por suerte para las inmortales, como guardian tengo prohibido aquello que me aleje de mi deber. -

- ¿osea que eres un galán? - dijo gisel sin creer una sola palabra de lo que decía, ya que era obvio que Jack se divertía más jugando que con otra cosa. -¿quien diría que jack frost es un cazanova - dijo entre risas siguiéndole el juego a Jack

- ¿quién diría que me encontraría una chica tan linda en compañía de este remedo helado? -

jack y gisel se voltearon y este señaló con su cayado a quien habló, no necesitó mantener la guardia, ya que se trataba de un hombre que aparentaba los 23 años. Usaba una ropa de la época medieval, que era elegante, pero anticuada ante la época que ahora se estaba viviendo.

- ¿qué haces aquí cazanova? - preguntó jack sosteniendo su cayado con firmeza y mirando a el espíriru con mal sembalnte, ya que no le agradaba y nunca lo haría.

- es la ciudad del amor. - dijo extendiendo sus manos el joven mientras hechaba a volar el anticuado sombrero que tenía, dejando ver un rubio cabello con una pequella cola de caballo - ¿donde más estaría? - gisel se bajó del varandal. Y el joven rubio no tardó en acercarse y tomar su mano para besarla. - un placer... No he oido hablar de ti. Soy el famoso cazanova - gisel recogió su mano mientras hechaba un paso atrás. - ¿y tú eres? - preguntó el joven recuperando la cercanía entre ellos.

- nadie que a ti te incumba. - dijo jack empujándolo con su cayado obligándolo a retroceder y darle espacio a gisel. Dejó de flotar y se pocisionó junto a gisel.

El rubio sobó su pecho y con un semblante imperturbable dijo. - tranquilo Frost. Si es tuya no intervendría. - aseguró colocando sus manos arriba en señal de paz.

- zopenco, es mi hermana. - le aseguró con desprecio intentando qje no pensara que eran otra cosa mientras se cruzaba de manos con esa mirada que decía que no le agradaba.

- entonces no respondo por mis acciones. - dijo sonriente, como si hubiera encontrado algo divertido que hacer, con eso se ganó un rayo helado de Jack, pero el rubio lo esquivó desapareciendo en la oscuridad.

- cómo lo odio. - aseguró Jack.

- pues, algo me dice que yo tambien lo odiaré en poco tiempo. - dijo gisel mirando el paisaje tratando de ver al espíritu, pero así como llegó, así se fue. Sin dejar rastro de su prescencia.

Jack

Gisel bostezó profundamente y estiró sus brazos al cielo intentando relajar sus músculos.

- ¿en serio vas a dormir? - le pregunté con fastidio ante el hecho que no aguantara más de 3 días viajando. Se agotaba demasiado rápido.