Obediencia absoluta • AU KLANCE VOLTRON|| RESUBIDO

Lo que nos une. - XXII

Lo que nos une.

XXII

Romelle permaneció en silencio escuchando a Allura. Intento entender sus razones. No pudo. Nada de lo que a hecho Allura tiene sentido, al menos ante sus ojos el comportamiento de ella es irracional. Dejándose llevar por sus sentimientos incluso sabiendo que Lance y ese chico se aman el uno al otro. Frunció el ceño.

Allura le contó todo entre lágrimas. Lágrimas que secaba con una servilleta solo para que otras surgieron casi a borbotones. Le contó sobre Lotor y cómo las cosas terminaron incluso aunque de algún modo también lo quería, sobre Lance que pese a aconsejar y ayudarlo lo traicionó al pedirle a Keith que se alejara de él. El daño está hecho. No le queda más que lamentarse.

—El va a odiarme— sollozo. Se agitó con solo pensar en cuál sería la reacción de Lance al enterarse de todo, sobre todo conociéndolo, él no se va a dar por vencido tan fácil.

—Estas siendo egoísta— le recrimino — ¿Por qué hiciste eso si sabes que ellos se quieren? No debiste entrometerte.

Allura dio un respingo. Las lágrimas se desbordaron de sus ojos junto con la culpa. Lo sabía, lo que hizo estuvo mal. Sus acciones egoístas terminaron por herir a alguien inocente. Keith, la persona a la que Lance ama, quien en solo unos meses logró lo que ella no pudo en todos esos años. Ni con todo el esfuerzo.

—Lo intente...— lloro —...y el solo habla de él, Keith esto, Keith lo otro, nunca me miró, incluso lo ayude a llevarle flores, estaba tan feliz de poder ayudarlo y pasar tiempo con él, pero ya no pude soportarlo— volvió a llorar.

Keith

— ¿Qué debo hacer? — dijo entre sollozos esperando que Romelle le diera las respuestas. Romelle no las tiene.

El amor es algo que no puedes exigir. Es consciente de ello. Será o nos será. Si no es para ti no será ni aunque supliques por ello.

— ¿No querías a Lotor? — la chica rubia la atacó con otra pregunta — ¿O solo lo usaste para olvidar a Lance?

—Yo...— gimoteo secando sus lágrimas —...creí que era lo correcto— se excusó.

—Te seré honesta— la joven rubia se reclinó sobre la silla meditando sus palabras, es consciente de que serán crueles. La verdad es dura y no veía otra opción más que decirla — ¿Qué te hace creer que si en todos estos años Lance no te correspondió lo hará ahora?

Allura se petrifico al oír las palabras de Romelle.

Todos estos años...

¿Qué te hace creer eso?

—Quizá si me esfuerzo...

— ¿Si te esfuerzas? — arrugó el entrecejo ante la respuesta de Allura se cruzó de brazos.

—Tu...— bajó la mirada.

— ¿Yo que?

— ¡No vas a entenderlo! — grito.

Romelle se sorprendió por la acción repentina de la chica.

— ¿Allura?

—Mis sentimientos...— herida por la verdad se levantó con brusquedad enojada por la verdad que se negaba a aceptar. Abandonó el restaurante dolida.

— ¡Allura! — grito tratando de alcanzar a la joven morena — ¡No hagas una locura! — corrió tras ella con la intención de tomarla del brazo. La más alta se escabullo dando largos pasos apresurados, la gente la miró como si la juzgara, como si supieran de sus acciones egoístas. Es consciente de sus propios actos y del daño que estos provocaron. Romelle la seguía llamándola por su nombre. Salió del restaurante y subió a su auto, vio a Romelle salir del lugar.