Su inocencia exagerada y bondad fueron dos atractivos suficientes para que en el mundo exterior, alguien quisiera dañarlo, pensarán en hacerle la vida imposible.
Lo tratarán como quieran, lo dañarán cuanto quieran.
Pero no contarán con que ese pequ...
Wook fue a la universidad para recoger sus trabajos de la semana, esta vez fue solo porque sus padres salieron a comer juntos, dijeron que tenían "Algo importante" que discutir y no podían acompañarlo.
Casi al llegar a las instalaciones les envió un mensaje, odiaba esos días en lo que hasta caminar hacía que le doliera todo el cuerpo. Sus hijas eran pesadas y al parecer cada día más, empezaba a entrar a la semana 22 lo que significaba que pronto cumpliría los 6 meses, su vientre era enorme y ni siquiera había notado cuando fue que creció tanto.
Wook: "Appa debes venir a recogerme...me duele la espalda"
Siwon: "No puedo hacerlo ahora cariño...por favor pidele a un taxi que te lleve...tu madre me tiene casi amarrado...es lindo, deberías verlo"
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Hizo un puchero mirando a la foto, sí, era bastante lindo y pensó en hacer una rabieta pero debía dejar que pasaran tiempo solos así que caminó hasta la dirección, los estudiantes lo miraban raro porque no podía llevar ropa normal, Min le había prestado un par de camisones para su vida diaria, tenía mucha suerte y es que no había tenido que comprar nada a parte de sus cosas personales y la ropa que le arruinaron. No podía acostumbrarse porque ahora todo ese dinero que había estado ahorrando lo usaría para sus hijas y aun así necesitaria encontrar un buen trabajo para poder darles una buena vida.
Por bromear con su madre terminó mandando un vídeo de audición a una compañía que lo representaba en su juventud, decía que tenía a sus 'contactos', era sólo un juego de todos modos, no iba a aceptar un trabajo así con tantas responsabilidades en puerta con su situación. Además ¿Quién querría un idol embarazado?
En la dirección platico un poco su tía, era una mujer que había logrado zafarse de todo ese desastre en su pequeña comunidad, vivió con familia en el extranjero y estudio como los chicos normales lo hacían. Y así mismo logró todo lo que tenía ahora, una buena posición social y un buen puesto de trabajo. Aun no estaba casada pero estaba en busca de encontrar el verdadero amor. Le aconsejó algunas cosas y también le ofreció su ayuda con sus hijas. Después le contó anécdotas de algunos familiares que tuvieron la misma suerte que él y dieron a luz gemelos, al parecer era algo hereditario ese asunto. Le gustaba saber acerca de su familia, sus padres no le habían hablado sobre ella porque eran 'diferentes'.
Ahora pertenecía a algo verdadero.
—Ese chico problemático, ¿Sabe que tendrás a dos?...
—No...pienso que debo decirle pronto...Yesung quiere estar conmigo...sé que se mete en mucho problemas pero él me ayuda mucho también...—alzó los hombros.
—Lo siento Wook...de haber sabido que iba a embarazarte no habría dejado que te cuidara...me siento culpable...
—Pero está bien...me enamoré inevitablemente —alzó los hombros—aun si no me hubiera cuidado me habría enamorado...el primer día que llegué al campus me choqué con él en el pasillo y supe que me gustaba...
—Valla...—la mujer rio—yo a veces te vigilaba, ya sabes eres mi sobrino y eso...tu padre me dio severas instrucciones de no acercarme o hablarte siquiera...sabía que andabas con Yesung y sabía que el te cuidaba bien así que dejé de verte...después ya me enteré que estabas embarazado y que ya no eran nada, fue difícil procesarlo...
—Fue demasiado rápido...—sonrió avergonzado—tengo que irme...—miró el reloj y se levantó con cuidado, después tomó su mochila—voy a visitar a mi mejor amigo...hace mucho que no lo veo.
—Bien...cuídate...—lo despidió en la puerta y Wook caminó lento por los pasillos sintiendose un poquito intimidado por las miradas, lo miraban como si fuera algo repugnante. Sí, estaba gordo como una vaca pero no era para tanto.
Yesung dio vuelta al pasillo y lo encontró intentando agacharse para sacar una soda de la máquina, rió suavemente y se acercó a dársela.
—Muchas gracias...—Wook le sonrió y abrió su lata para beberla.
—¿Cómo estás?...—le tomó la mochila para cargarla, entonces juntos empezaron a caminar.
—Cansado...pesan...—susurró sin pensar—y me duelen los pies...y la cintura...y todo...
—¿Pesan?...—Yesung frunció el ceño.
—Este sí...mis cosas pesan...—rió nervioso tratando de guardar lo que pensaba.
—Ya veo...bueno...no deben pesarte ahora, yo las llevo...—le acarició suavemente el vientre.
—¿Haz visto a Hae?...quiero hacerle una visita rápida antes de ir a casa...hoy debo ir en taxi, mis padres fueron a comer juntos...
—Seguro está en su dormitorio, ha paso ahí todo el día desde ayer...—hizo una ligera mueca—no voy a dejar que vallas solo...yo voy a llevarte hasta donde sea que vallas, es mi deber cuidarte...
El rostro del menor se puso muy rojo, causando que sonriera por lo bajo, era algo que lo hacía sentir tímido.
Caminaron en silencio, las hojas de los arboles empezaban a caerse. El invierno estaba cerca aunque no se sintiera nada de frío se sabía por las épocas y porque en todas las tiendas ya empezaban a venderse articulos navideños.
Donghae estaba bajo un árbol tomando la sombra y estudiando, pero lo que le llamó la atención a Wook era que llevaba una cangurera enfrente, sabía que era porque su madre le había comprado una. Y en ella iba un bebé que jugaba con un peluche de pez, reía con fuerzas y chupaba feliz de su chupón.
—¿Eso es lo que creo que es?...—sonrió intentando caminar un poco más rápido, Yesung le tomó la cintura para ayudarlo a sostenerse mejor, Wook no dijo nada sólo se apoyó y empezó a caminar—¡Hae!...
—¡Wookie!—el menor sonrió tan feliz de verlo, Yesung lo ayudó a sentarse a su lado—¿Ya se llevan mejor?...
—Él me ayuda a caminar...es difícil porque ahora pesa más mi vientre y me duele todo...¿Ella es tu hija?...
—Sí...es mi HaeHyun...—le revolvió el cabello a su pequeña—iba a ir a visitarte esta tarde para presentartela...
—Es una niña hermosa Hae...sea como sea es hermoso que ya esté contigo...—tomó la manita de la bebé y le dio un beso—hola~...soy el tío Wook~
—Y Hola~...—el castaño le acarició el vientre a su amigo—soy el tío Donghae~...
—Serán buenos amigos...—intervino Yesung acariciando el vientre de Wook, estaba tan feliz de que le dieran esa oportunidad, el menor se repegó un poco a su pecho y se recargo para descansar la espalda, estaba tendiendo muchas confianzas cada vez más rápido y no podía culparse, lo amaba demasiado y tenerlo cerca de nuevo lo hacía sentirse seguro.
—Voy a llevarte con mi madre esta tarde...—susurró cerrando los ojos, Hae abrió la boca de golpe y Yesung se sonrojó, quisieron apelar pero era demasiado tarde, otra vez se había dormido.
