•Lilium• ✿YeWook✿⁝⁞⁝⁞TERMINADA⁝⁞⁝⁝

♡44♡

—Leeteuk...—Yesung saludaba a sus padres con indiferencia—Kangin...

—Por favor...somos tus padres...—su madre era alguien que gustaba de estar bien a la moda y de dar una buena impresión a cada paso que daba.

—No...no son mis padres...ustedes sólo se encargaron de traerme al mundo y después me abandonaron en esa mansión con no sé cuantas nanas...—bufó tomando su taza de café—¿Qué es lo que vienen a buscar?...

—Supimos que estudiabas en este lugar de mala muerte...—Kangin miró la cafeteria a su alrededor.

—Es una de las mejores universidades en Corea del  Sur, no un lugar de mala muerte...

—Para la gente...'inferior' lo es...queremos que entres a un instituto privado y que estudies ahí...no puedes seguir en este lugar, rodeado de esta gente...escuchamos que hay alguien embarazado, que vergüenza y que otro estudiante tiene a un bebé aquí, están desprestigiando al lugar...debes salir de inmediato...además se conectaron recientemente con la asociación de madres solteras, eso significa que planeando seguir ayudando a ese tipo de personas...

—Sí, aquí hay todo eso y yo estoy de acuerdo Leeteuk...esas personas merecen una oportunidad para seguir estudiando y así darles un futuro a sus hijos...y ese estudiante que te da vergüenza es mi prometido...¡Felicidades!, serán abuelos de un par de gemelas...

—¡Kim Jongwoon de ninguna manera!—su madre se levantó golpeando la mesa—no puedes tomar una responsabilidad así...son dos niñas...¿Sabes lo que cuesta mantenerlas?...

—Yo sé que voy a poder con los gastos...ustedes no tienen porque meterse en mi vida ahora si nunca les importé...

—Si no te alejas vamos a quitar tu nombre del testamento y perderás toda conexión con esta familia, no tendrán ni un solo centavo más...¿Aun así podrás mantenerlas?...

—Quizás sea un poco más difícil pero sin duda lo haré...—se levantó dispuesto a irse—amo a mi prometido y amo a mis hijas...con nada me harán cambiar de opinión, ¿Entendieron?

—Vas a hacernos caso Yesung...de una u otra manera...pero lo harás...—aquella advertencia estuvo impregnada con una voz ligera pero que te hacía temblar. Yesung rió suavemente siguiendo su camino, no podía perder más tiempo con esas personas, aun debía llegar a esconder las vitaminas de su menor en cualquier postresillo.

Compró helado de menta, era el favorito de su menor así que no le sería difícil...solamente tuvo que ingeniarsela para mezclar las cápsulas. Eran casi las 6 así que debería estar ya en su dormitorio, seguro veía una película, le emocionaba pensar en lo que esa pequeña bola de ternura estuviera haciendo.

Entró con su llave y lo primero que vio fue a su menor tirado en el suelo, había un plato roto y un sándwich a medio comer, se asusto demasiado.

—¡Wook!...¡Wookie despierta!...mi amor por favor...—empezó a moverlo empapado en lágrimas, una cosa así no podía estar pasando.

Poco a poco lo vio removerse y despertar, entonces el pequeño castaño soltó un bufido enojado.

—¿Porqué me despiertas?...—se removió quedando boca arriba—no podía dormir en la cama y solo aquí me acomodé...—como pudo se levantó poco a poco y se recargó en la cama—¿Porqué estás llorando?...

—Dios mío Ryeowook me asusté de verte ahí tirado...—cubrió su rostro empezando a limpiarse las lágrimas —¿Porqué esta roto ese plato con el sándwich?

—Porque se me cayó pero dije que lo recogería después...tenía sueño...—vio el helado y rápidamente lo tomó para comerlo—si no era para mi ni modo porque ya me lo voy a comer...

—Disfrutalo...—decidió calmarse un poco para no hacer una escena, comprendía que Wook no se acomodara debido a su enorme vientre así que sólo se levantó y empezó a recoger el plato junto con el sándwich.

Estaba feliz por saber que estaba bien y por ver que se comía tan bien las vitaminas.

—¿Las niñas han estado activas hoy?...

—Demasiado...mira esto...—levantó su playera y le dejó ver algunos pequeños moretones en su piel—hoy no me puse crema, se cayó bajo el ropero y no puedo sacarla...me arde tanto...

—Me hubieras llamado...—le dio una poca de cosa que tuviera tantas marcas y que estuviera roja su piel. Fue a sacar la crema de debajo del ropero y se puso una poca en las manos para frotarla por todo su vientre—se siente dura...¿Te sientes bien?...

—Sí...estoy bien...—sonrió quedándose quieto de pronto, sentía que se movían y presionaban muy abajo—han estado pateando demasiado...es por ratos pero duele...

—Bien...me avisas si sientes cualquier cosa irregular...—se levantó recibiendo un mensaje de texto.

"Hijo, baja al estacionamiento, necesito hablar contigo. He pensado sobre lo que hablamos y creo que debemos dejarte ser feliz...pero quiero verte, por favor...dejame hacer las cosas bien"

Era de su madre y al principio rodó los ojos pero decidió ir a donde estaban.

—Wookie...mis padres vinieron —se hincó frente a él para besarle la frente y después besar su vientre—necesito ir a verlos, no voy a tardar mucho, no olvides que te amo y las amo a ellas...me llamas por cualquier cosa...

—De acuerdo...—sonrió sintiendo esas extrañas patadas de nuevo pero aprovecho que su mayor salió para aferrarse a las sábanas—tranquilas...papá volverá pronto...

Se levantó y se sentó en la cama como pudo. Encendió el televisor para empezar a ver una película. Los dolores regresaron pero esta vez mucho más fuertes, su rostro se puso demasiado rojo pues de pronto sintió la cama mojada, ¿Se había orinado?, no, esos serían litros de orina...

—Dios santo...—uno de esos dolores le sacó el aire, se levantó intentando tomar su celular. Llamó a Yesung empezando a llorar, estaba muy asustado y no sabía si eso era malo, sentía que su cintura empezaba a partirse y la presión de antes se multiplicaba horrible.

Yesung llegó al estacionamiento, empezó a buscar a sus padres pero no vio a nadie. Decidió esperar un poco. La llamada de su menor le extraño, acababa de salir de ahí.

—Hola Wookie...¿Todo bien?...

—Estoy...estoy mojado...—susurró entre sollozos—y me duele mucho...tengo miedo...

—Ay demonios...quedate ahí, ya voy de vuelta...todo va a estar bien...—sus manos empezaron a temblar de los nervios, corrió hacia la salida del estacionamiento pero la camioneta de sus padres se le cerró, junto a otra de aspecto sospechoso, un par de hombres bajaron de ella y lo tomaron por sorpresa al ponerle un paño húmedo en la boca que olía horrible. Se sintió mareado, estaba seguro de que no era nada bueno, justo después cayó inconsciente y lo metieron a la camioneta sospechosa.

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