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—Otra vez, HyukJae...—Donghae se levantaba de la cama cubriéndose el cuerpo con las sabanas—otra vez haces esto conmigo...—talló sus ojos para dejar de llorar, no debía dejarlo ver que lloraba.

—Oye...ya tienes una hija...deberías agradecerme que te hago el favor...¿Quien va a quererte así?, mirate...ya no tienes la misma figura de antes...tu abdomen está marcado por el embarazo y esa fea cicatriz de la cesárea...no, no, no...Eres horrible...—rió poniéndose de vuelta su ropa.

Hae no sabía que responder, era cierto, con esa cicatriz y con las estrías no encontraría alguien que lo aceptara. Ya no era un chico lindo.

—Eso...no te da derecho a tratarme así...no tienes porque aprovecharte de mi...además no fue mi culpa quedar embarazado ¿si?...no es como que lo hice sólo y si no mal recuerdo, justo como ahora... me violaste...—bajó de la cama tomando su ropa y empezando a vestirse.

—Pudiste deshacerte de ella pero no...el muchachito dijo que iba en contra de las creencias de su religión...dejó de ser mi asunto desde ahí...—se dirigió a la puerta—me voy...y piénsalo dos veces antes de desafiarme, estúpido...

Se quedó solo en su habitación, una vez que se hubo bañado y puesto nueva ropa, encendió el televisor y se recostó en la cama sin mirarlo siquiera, quizás estaba ahí solo para no hacerlo sentirse solo. No tenía caso acusar a Hyukjae, nunca le hacían caso. Era una acción inútil. Su familia tenia demasiado dinero metido en la universidad y no podrían hacerle un solo rasguño.

De pronto empezó a recordar como había sido que se conocieron.

Era un chico venido de una escuela católica así que su educación en mayoría trataba sobre la religión y cuando llegó a la preparatoria por instinto se acercó a Eunhyuk, era el famoso chico malo y le fue inevitable.

Salieron por un tiempo y sabía que lo que Eunhyuk sentía por el no era amor, era simple curiosidad o hasta lástima. Pero no le importaba porque Donghae en verdad lo amaba. Quizás pensaba que al pasar tiempo con él, podría llegar a amarlo también.

Estaba muy equivocado. A menudo escuchaba a los demás murmurar que lo engañaba con dos o tres chicos a la vez, prefería hacerse el de oídos sordos y hacer como que todo en su relación iba súper bien aunque en realidad el ya lo había visto con sus propios ojos.

Intentó confrontarlo pero siempre le salía con lo mismo, le decía que si él no podía darle sexo lo conseguiría en otro lado. Hae no podía hacerlo y no porque no quisiera, su educación se lo impedía, era una contradicción total a sus modales y a su moral. Quizás después de casarse, aunque no fuera con Eunhyuk, pero sólo así lo haría.

En una de sus tantas discusiones, supuso que Eunhyuk se hartó de su forma de ser tan recatada y simplemente tomó lo que deseaba de él. Hae no fue capaz de hacerle frente pues en el interior pensaba que quizás lo merecía, siguieron saliendo y aunque pareciera estúpido, no dejó de amarlo, ni siquiera después de las violaciones lo dejó de hacer. Ni cuando le gritaba frente a todos en el patio, ni cuando pasaba frente a él con otras personas, ni cuando lo golpeó en el centro comercial por comprar ropa demasiado infantil.

Ni cuando le confesó que estaba esperando un bebé suyo y sucedió lo que ya esperaba, inmediatamente le pidió que se deshiciera de él, le ofreció demasiado dinero para que abortara y ambos pudieran seguir con sus vidas pero Donghae se negó rotundamente y una vez más Hyuk creyó que fue debido a su religión y pues en parte era cierto. Pero la realidad era otra, si la persona a la que amaba no iba a estar con él, entonces podría compensarlo tendiendo un hijo suyo ¿no?. Una pequeña parte suya, de ambos, una pequeña parte a la cual amar y dedicarle su vida entera. Era cierto que Dios condenaba los embarazos antes del matrimonio pero también condenaba los abortos, y al mismo tiempo decía que un hijo era una bendición. Tanta cosa siempre confundió a Donghae. Pero al final se quedó a con su sola decisión de conservarlo.

Desde ese día las cosas se pusieron más feas entre ellos, Hyuk intentaba a toda costa hacerle daño para hacer que perdiera al bebé, hasta que Donghae se hartó y lo confesó todo a sus padres, imaginó que como ellos lo habían criado y amado, también lo apoyarían en esto y lo único que recibió fue rechazo, continuo sus estudios fuera de la escuela y trabajó para mantenerse durante el embarazo. Cuando tuvo a la niña simplemente se aparecieron sus padres y se la quitaron con la excusa de que él no podría cuidarla, entonces llegaron al acuerdo en el que permanecían. No podría verla, acercarse a ella o siquiera saludarla hasta que les asegurara que era apto ante Dios y ante la sociedad para conservarla. Era una total tontería, pero no le quedaba de otra, sus padres pagaban su escuela porque no le permitían trabajar para no desconcentrarse. No quería defraudarlos más y por supuesto no quería dejar a su hija con ellos más tiempo, seguro la educarían como el fue educado y eso no le traería nada bueno, no le gustaría verla sufrir con él.

Quizás su amor por Hyuk nunca se había ido, hasta la fecha en el interior le dolía la manera en la que se comportaba con las demás personas, sentía algo especial y el mismo sabía que era una sensación enfermiza enamorarse de alguien así. Le avergonzaba pero no podía evitarlo. ¿Porqué?...por la sencilla razón de que muy a su manera, Eunhyuk lo había hecho poner los pies en la tierra, fue su primer amor, la primera persona a la que le entregó su corazón, el padre de su hija y su primera y única pareja hasta ahora, creó una conexión que sólo el entendía.

Una conexión que por su bien sería bueno dejar ir lo más pronto posible..

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•Lilium• ✿YeWook✿⁝⁞⁝⁞TERMINADA⁝⁞⁝⁝Donde viven las historias. Descúbrelo ahora