Las 3 noches [Fred Weasley]

Capítulo 22

Fuimos bajo la capa hasta llegar a la sección prohibida de la biblioteca. Ya allí nos quitamos la capa. Mientras Fred miraba si se acercaba alguien por el mapa, yo buscaba un libro en particular.

—¿Que estás buscando?—preguntó Fred

—Cuando lo encuentré te lo diré

Estaba dando vueltas por toda la sección prohibida hasta que me paré en frente de un libro. Le cogí y apunté con el mi varita

—¡Geminio!—toqué el libro y salió un ejemplar identico—¡Finite!

—¿Podemos irnos ya? Se está acercando el profesor Snape

—Si vamonos

Dejé la copia donde debería ir el original y me le guardé. Fred y yo nos metimos debajo de la capa.

Caminabamos siguilosamente por el castillo hasta que nos encontramos a Umbridge. Fred tiró de mi y nos juntamos para no tropezar con ella. Cuando se fué seguimos nuestro camino hasta llegar a la habitación de Fred y lanzamos otra vez el hechizo 'Muffliato'.

—Eso ha estado cerca—suspiró Fred

No contesté y saqué el libro que me lleve.

—¿Me podrías decir ahora de que es el libro?

—Es sobre mi abuelo

Empecé a leer las páginas y me paré justo en una.

—Escucha esto

Empecé a leer.

"Las tres noches es el nombre como se conocían a las hijas de Gellert Grindelwald. A estás tres niñas se les coincidieron grandes poderes al haber conseguido las Reliquias de la muerte, pero sus poderes no podrían se utilizados hasta su mayoría de edad. Cada hermana guarda un libro con el que se pueden descubrir secretos de sus poderes y solo se puede abrir con una llave mágica. Quien consiga los tres libros y domine sus poderes conseguirá un poder total. Cada libro tiene poderes diferentes que se pueden diferenciar por las joyas que los protegen. Una esmeralda, un rubí y un zafiro. Se desconocen sus paraderos. Se dice que también existe una marca para diferenciar a las hermanas y a sus descendientes."

Al terminar de leer miré a Fred nerviosa.

—Esto es malo, muy malo

—¿Por qué?

—¿Y si el señor tenebroso lo sabe?

—Tranquila, tendría que encontrar los otros libros y arrevatarte el tuyo

—Ese el problema

—¿Que problema hay?

—Que yo tengo dos

—¡¿QUE?! ¿Y... y donde está el otro que tienes?

Rebusqué en mi bolso y saque un libro con una esmeralda.

—Entonces...—dijo Fred—si tienes el libro de la esmeralda y el libro del záfiro solo te falta el del rubí.

—Si...—suspiré—tengo un mal presentimiento

—Si lo prefieres podemos hablar de los libros mañana con todos, seguro que alguno tendrá alguna idea

—Suena perfecto. Ahora vamos a seguir revisando todo

Estuvimos revisando todo hasta quedarnos dormidos.

—¡Buenos días parejita!—entró gritando George

—Vete a la mierda Weasley—respondí

—¡EY!—me gritaron los dos hermanos haciendose los indignados

Puse los ojos en blanco y me volví a acostar.

—Siento desilusionarte Becca pero a no ser de que quieras verme desnudo te sugiero que salgas de aquí—dijo George

Me levanté rapido, recogí mis cosas y salí corriendo.

—Nos vemos luego chicos, quedamos después sobre las siete para hablar y avisar a todos—me despedí desde lejos y pude oir las risas de los gemelos

Después de comer tenía un rato libre antes de tener que hablar con los chicos. Me senté en uno de los pasillos y empecé a leer mi libro favorito. Orgullo y prejuicio. Estaba tan tranquila leyendo mi libro cuando se acerca Pansy Parkinson.

—No se pueden leer libros muggles—dijo ella

—¿Perdona?—contesté quitando la mirada de mi libro—¿Quien eres tu para decirme que puedo o no hacer?

—Soy parte de la Brigada Inquisitorial—me enseñó su chapa

—Muy bonito, aunque no entiendo porque eso debería importarme

—Me estás haciendo perder mi paciencia

—Pues pierdete de mi vista

—¡Pansy!—gritó Draco acercandose—¿Te está molestando la traidora a la sangre?

—¿Traidora a la sangre?—pregunté burlandome—Pense que era sangre sucia

—No, la sangre sucia es la asquerosa de Granger—dijo Draco

En ese momento me hirvió la sangre, saqué mi varita y apunté a Draco

—¿Que has dicho sobre Hermione? Repitelo,—le amenacé causandole terror—Ahora no eres tan valiente rubito platinado

Aparté de él mi varita y empecé a recoger mis cosas. Sentí como me agarraban de la túnica impidiendome moverme.

—Muy bien Crabbe y Goyle, ahora vamos a la oficina de Umbridge—ordenó Draco acercandose a mi—Por está nos darán muchos puntos para el TIMO

En ese momento lo unico que hice fué escupirle en la cara. Se limpió la cara y me miró con asco.

—Tengo entendido que Greyback te torturó—dijo sonriendo—Te lo tenías bien merecido zorra de mierda.

Me llevaron arrastras hasta la oficina de Umbridge, lo que no sabían es que Dennis Creevey (el hermano pequeño de Colin) lo había visto y escuchado todo.

Draco llamó a la puerta del despacho. La puerta se abrió y entraron las cuatro serpientes conmigo agarrada. Cuando Umbridge me vió sonrió.

—¿Que ha hecho la señorita Black, señor Malfoy?—preguntó sin quitar la sonrisa

—Todo lo que hizo fué contra la Brigada profesora—empezó a hacer Draco—Escupió, amenazó, insultó y estaba leyendo un libro muggle

—Bueno señorita Black, eso se merece la pluma especial—dijo sacando la pluma que me dió para las muñeca—Quiero que escriba 'No volveré a faltarle el respeto a ningún miembro de la Brigada Inquisitorial'.

Los Slytherin salieron del despacho satisfechos. Umbridge me pasó la pluma y empecé a escribir en el papel. Las palabras se me quedaban impresas en la piel y mis gritos llamaban la atención de varios alumnos y profesores.