El chico de las estrellas ᵗᵃᵉᵏᵒᵒᵏ ¬ᶜᵒᵐᵖˡᵉᵗᵒ¬

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Nota: Es una recomendación, pero si quieren, pueden escuchar "Become the warm jets" de Current Joys en las partes en que son los recuerdos de YoonGi y JungKook, por si quieren llorar a gusto:)

Un 18 de Diciembre de Invierno, JungKook de catorce años esperaba afuera del restaurante dónde había citado a YoonGi para celebrar los cinco meses en los que habían estado juntos. Balanceaba sus piernas y mantenía una sonrisa, había anhelado este día desde hace mucho y nada ni nadie iba arruinarlo.

Pero la espera se estaba alargando, no podía localizar a su novio, no respondía sus llamadas ni mensajes, tal vez aún seguía en la escuela estudiando tan duro como siempre. Eso quería pensar y no el que se la habría podido olvidar.

Y así, pasó una hora y el menor estaba triste y llorando, jamás pensó que su novio habría podido olvidar una fecha tan importante, tomó su teléfono para volverlo a llamar pero a cambio recibió una llamada de su madre. Tal vez tendría que ver con Min.

Cuando contestó, lo primero que oyó fueron chillidos y suspiros. Se estaba preocupando. ¿Algo había pasado? ¿Un accidente?

—Mamá...

—J-JungKook... Deberías venir a despedirte...

—¿Despedirme? ¿Alguien de la familia se va a mudar?

Su madre rompió más en llanto y el castaño estaba aún más asustado porque no sabía nada.

—Mamá...

—Ven a despedirte de YoonGi...

JungKook no podía terminar de entender, pero algo en su pecho dolía y efectivamente era su corazón el que estaba doliendo y roto.

—Mamá... ¿Por qué tengo que ir a despedirme de YoonGi? ¿Se va a mudar?

Y todos esos bellos momentos que había pasado con su novio, llegaron a su mente.

—¡JungKook! ¿Ya viste las estrellas? Son muy hermosas

El mencionado solo sonrío para sentarse a un lado suyo, habían decidido ir al mirador a las doce de la noche, los dos solo sin compañía de nadie.

—Tienes razón hyung, son hermosas...

Min tomó las cálidas manos de Jeon y lo miró a los ojos.

—Te prometo, que en nuestras próximas vidas te iré a buscar aún así estés a miles de kilómetros a distancia... Quiero ser el amor de tu vida en todas tus vidas que pases.

El menor estaba tan sonriente que estaba a nada de llorar, su novio era todo un romántico, como si fuera un poeta.

—YoonGi... ¿Qué pasaría si algún día alguno de los dos... dejara al otro para siempre?

—Eso... Te puedo asegurar que si yo te dejara para siempre... Buscaría la forma para estar de nuevo contigo... Tal vez me pase de un cuerpo a otro hasta encontrarte.

—¿Y cómo sabré si eres tú?

—Mmm... Lo sabrás cuando....

Había llegado al hospital, no podía dejar de llorar, estaba destrozado... Todo esto había pasado tan rápido... ¿Cómo es que el amor de su vida haya decidido dejarlo tan pronto?

Le había prometido que jamás lo dejaría.

La familia de YoonGi y su madre estaban en la sala de espera, todos estaban destrozados y sin dejar de llorar por la pérdida de aquel gran chico.

Su madre vio a su hijo y fue hasta él.

—JungKook...

—¿Q-Qué fue lo que pasó...? ¿P-Por qué YoonGi está muerto?

—Hijo... YoonGi tuvo un accidente... Cuando llegó al hospital fue demasiado tarde...

El menor cayó de rodillas viendo hacia la puerta de urgencias, donde de seguro se encontraba su amado...

¿Cómo pudiste dejarme tan temprano?

—¡Hyung! -abrazó por detrás a YoonGi- ¿Estás dibujando otra vez? ¿No te cansas?

Se sentó a un lado, observando cómo su novio preparaba un nuevo boceto.

—No me canso porque siempre te dibujo a tí...

El castaño se puso rojito y le dio un beso en la mejilla al mayor, amaba mucho a su hyung que no quería perderlo para nada.

—Ah, cierto... En dos días cumplimos cinco meses, ¿Estás feliz?

—¡Por supuesto que sí! ¡Te tengo una sorpresa!

—¿En serio? Ahora estoy más emocionado. -sonrió.

—¿Y tú qué me regalará hyung?

—Mmm... No puedo decirte, es un secreto.

—Hyung... Tú... ¿Siempre me vas amar?

—Por supuesto, te juré que en todas mis otras vidas te amaría. Eres mi único amor JungKook.

El castaño sonrió aún más.

—Hyung... Por favor, nunca me dejes.

—No lo haré y si lo hago... Voy a estar contigo siendo otra persona muy diferente a como yo suelo ser.

—¿Diferente? ¿Entonces serás alguien rebelde y malo?

YoonGi rió.

—Sí, pero no pensemos en eso. Todavía estoy aquí contigo. Todavía no le voy. -sonrió.

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