El chico de las estrellas ᵗᵃᵉᵏᵒᵒᵏ ¬ᶜᵒᵐᵖˡᵉᵗᵒ¬

17

—¿JungKook...?

—¡Oh vamos! La respuesta es muy fácil. Solo tienes que leer...

JungKook se daba por vencido, no podía más con el grisáceo, se estaba estresando.

—¡Es que no la encuentro!

—¡Por una mierda Tae!

Soltó el libro y el lápiz sobre la mesa, ya no podía más. Iba a explotar si seguía así.

Aunque admitía que durante estos dos primeros meses, las revisiones con su tutor habían salido bien, pero había un pequeño detalle...

Al final de todo, la Historia no era lo suyo y terminó dejando la materia.

JungKook tomó una libreta y un lápiz para comenzar a dibujar.

Si algo tenía que agradecerle a YoonGi, era el que le enseñó a dibujar.

—¡Hyung, mire! ¿Estoy mejorando?

El menor le entregó su dibujo, YoonGi sonrió, de verdad su pequeño le había puesto mucho esfuerzo y se veía.

—Es hermoso, ¿Qué pensabas cuando estabas haciendo el boceto?

—Hmmm... Pensé en nosotros, en un juntos por siempre.

El mayor sonrió para luego abrazar a su pequeño y recostarse con él en el césped.

—Entonces... ¿Qué te parece dibujar?

—Si puedo dibujarte todos los días, definitivamente le daría una oportunidad...~

—No te puedo negar nada, es tú decisión si quieres dibujarme o no. - sonrió.

—Entonces le daré una oportunidad y me esforzaré para poder hacerte un retrato.

—¿Qué es lo que haces?

—No te incumbe TaeHyung.- dijo muy concentrado.

—¿Por qué siempre dibujas, no te cansas?

¡Hyung! ¿Estás dibujando otra vez? ¿No te cansas?

No me canso porque siempre te dibujo a tí...

JungKook sonrió.

—Jamás me voy a cansar de dibujar a lo que más amo.

TaeHyung notó en aquella mirada lo que nunca pensó en llegar a ver, una mirada llena de esperanza y amor puro. Parecía que más que un pasatiempo, el dibujo era lo que más amaba.

O amaba algo que no era el dibujo.

Y se sentía raro por alguna extraña razón.

— ¿Amas dibujar o amas dibujar a alguien?

Jeon miró al grisáceo, quién no tenía expresión alguna.

—¿De qué hablas? Estamos en clase.

Y de un momento a otro, todo se volvió incómodo.

—Tú fuiste el que empezó a dibujar.

—Lo hago porque es una forma de liberar mi estrés.

—Terminemos aquí.

Tomó su mochila y se levantó de su asiento.

—Tae... ¿Por qué terminas esto así como así? Así no vas aprender nad-

Se volteó hacia el castaño quién tenía un rostro de preocupación.

—Es mi problema si quiero aprender o no, no estás obligado a seguir con esto si ya no quieres, puedo estudiar por mi cuenta.

—Nunca dije que me disgustó estudiar contigo.

Kim detuvo sus pasos.

—Si sigo aquí es porque logré conocerte bien y me di cuenta que no eres tan malo como pensaba... Ahora que lo pienso, ¿No deberías disculparte por todo lo que me hiciste? -Cruzó de brazos.

—¿Quieres que te traiga chocolates y te pida disculpas hasta rogarte?

—Con un simple "Lo siento" me conformo, pero lo quiero escuchar cuando salga de tu corazón. No quiero una disculpa forzada.

Tae suspiró.

—Te lo preguntaré una sola vez más... ¿Amas dibujar o amas dibujar a alguien?

—¿Por qué tanta curiosidad? ¿Quieres saber si estoy enamorado o algo así?

—Solo pido un Sí o No...

JungKook miró hacia otro lado.

—Lo sabía... No sabes qué responder porque ni siquiera lo sabes.

—¿A caso sabes algo de mi vida? No sabes ni una mierda Tae, no cruces la línea.

—Créeme que si supiera todo de ti, ni siquiera me hubiera acercado a ti.

Dejó a Kook pensativo, ¿A qué se había referido?

—Lo siento mucho MinGye... Eres una persona muy fuerte, vas a poder superar esto.

Aquella mujer consolaba a la familia de Min...

El pequeño caminaba hasta que sus pies se detuvieron al ver a un chico de su misma edad, sentado en el suelo del cuarto de rezos, se limpiaba sus lágrimas pero seguía llorando. Entonces el pequeño supuso quién era.

Tal vez debió haberse acercado antes...

Y así las cosas hubieran tomado un camino diferente.

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