El chico de las estrellas ᵗᵃᵉᵏᵒᵒᵏ ¬ᶜᵒᵐᵖˡᵉᵗᵒ¬

23

—Mi mamá se fracturó el pie por bajar mal las escaleras, es eso... Por eso pedía que las clases terminaran antes, para poder ir a verla y cuidarla. Afortunadamente la van a dar de alta en unos días.

—Entiendo...

—¿Quieres pasar?

JungKook había abierto la puerta de su casa, invitándolo a pasar.

Bueno, podía ser una buena oportunidad para que su vínculo creciera más. El peligris asintió y entró a la acogedora casa del castaño.

Antes de entrar a su casa miró hacia su derecha, donde quedaba el patio. Kook lo notó.

—¿Pasa algo?

el peligris volteó y lo miró a los ojos.

—¿Quieres ver las estrellas conmigo?

Los ojos de Jeon se llenaron de lágrimas pero se contuvo.

¿En realidad estaba aquí con él?

[...]

—Hyung, ¿Quiere ver las estrellas conmigo?

—¿No se te hace aburrido? No tienen nada de especial...

—¡No diga tonterías hyung! Ver las estrellas recostados en el patio es lo mejor del mundo.

Los dos se encontraban en el patio, recostados sin hablar, solo observando.

JungKook estaba concentrado mientras su novio se aburría mirando al cielo, no encontraba nada entretenido en él.

—No entiendo qué le ves de especial a esto...

—Agh hyung, no arruine el momento...

—¿Sabes qué es mejor que ver las estrellas?

El menor se quedó confundido y solo sintió cuando unos cálidos brazos rodearon su cuerpo.

—Esto es mejor que ver las estrellas. -susurró.

Kook sonrió y acarició la mano de su amor. Miró hacia el cielo y notó que las estrellas más resplandecientes habían formado un árbol.

—Mire hyung. -Señaló con su dedo- Es un árbol.

Hizo caso y miró, cuando vio el árbol sonrió y beso la cabellera del menor. Con el paso del tiempo YoonGi también encontró figuras que las estrellas hacían.

Y así, ver las estrellas se hizo el pasatiempo favorito de los dos.

[...]

Los dos se encontraban recostados no tan lejos del otro, mirando las estrellas, ninguno de los dos hablaba, todo estaba en completo silencio.

Pero JungKook se encontraba perplejo, aún no podía analizar la situación...

—¿Desde cuándo se volvió un pasatiempo tuyo ver las estrellas?

El peligris volteó a verlo, viendo como sus ojos estaban llenos de lágrimas, era obvio que esto le traería recuerdos.

—Desde que era pequeño...

—Y-Ya veo...

Su voz se estaba debilitando, su mente proyectaba todas las veces en las que había visto las estrellas con YoonGi,

—JungKook... ¿Quién es YoonGi?

El castaño miró al peligris. Tal vez era hora de contarle ¿No? De todos modos se llevaban bastante bien y le tenía confianza.

—Fue mi primer amor...Yo tenía catorce y él dieciséis, nos conocimos en la escuela por un accidente... Nos hicimos amigos muy rápido y nuestros sentimientos comenzaron a crecer a tal punto que para poder hablarnos nos daba pena. Le confesé mis sentimientos y él también lo hizo, así comenzó nuestra relación... Bien dicen que los primeros amores nunca duran y tiene razón, el mío no duró para siempre como lo prometimos...

Jeon tenía ganas de llorar, pero se contenía. En ningún momento el peligris lo dejó de mirar.

—Mi primer amor me dejó primero y ver las estrellas contigo me hace recordar a él... Él me había dedicado el universo entero. -se detuvo- Ah lo siento, dame un minuto...

El castaño se volteó y trató de limpiar sus lágrimas. En ese momento sintió la respiración de Kim en su cuello y un brazo rodeando su cintura.

Y no pudo contener su llanto de nuevo.

—No llores...

Esto es mejor que ver las estrellas.

¿Por qué estaba haciendo lo mismo que YoonGi? ¿De qué se trataba esto?

—Lo siento, no quise hacerte recordar a YoonGi... No me gusta verte llorar.

¿Ese era el lado oculto de TaeHyung? ¿Un lado protector y débil?

Entonces fue ahí cuando JungKook entendió todo.

Voy a estar contigo siendo otra persona.

YoonGi estaba con él.

¿No?

Su corazón empezó a latir fuertemente. La mano de Jeon viajó hasta encontrar la del peligris y la tomó.

—Jamás pensé que fueras así...

—Porque este es mi verdadero yo...

Kook se volteó para quedar cara a cara, el peligris tenía una mirada tan sincera.

Poco a poco los dos fueron acercándose hasta que sus respiraciones chocaran y Tae lo besó.

JungKook siguió el beso, tomando con una mano su rostro.

Esto era... ¿Felicidad? ¿Tristeza? JungKook no lo podía describir en este momento, pero lo único que estaba haciendo era seguir sus instintos. No sabría qué pasaría después, pero ahora, solo ahora, le importaba el presente.

—r4Em