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Cuando las clases habían terminado, el primero en irse fue Jeon.

Salió corriendo del salón para poder llegar a casa, ahora sí estaba completamente solo. Sin la ayuda de nadie.








Narra JungKook*

—Saben, hace unos días discutí con TaeHyung; Había una playera que me había gustado pero ese mismo día tenía que llegar temprano a nuestra cita, le conté sobre la playera y se enojó tanto que me dijo: La playera o yo.

JungKook rió.

—¿No les gusta mi playera? A mí sí.

—Oigan, estaba en oferta.

Termina narración*








Cuando llegó a su casa, abrió la puerta y se encontró a su mamá quitándose el mandil que era para cocinar, sentada en la mesa.

¿Pasó algo? Tus ojos están hinchados y rojos...

Jeon suspiró tratando de contenerse pero no pudo, fue hasta su mamá y la abrazó para luego echarse a llorar.

—¿Por qué todo siempre tiene que terminar mal? -dijo sin dejar de llorar.

Está bien, aquí está mamá... ~

—Perdí a mi mejor amigo, las cosas terminaron mal con TaeHyung... Ya no sé qué hacer.

Sé que va a sonar muy cliché pero, sabes que las heridas se curan con el tiempo. Yo te debo una disculpa por no haberte dicho nada. No lo sabes, pero todas las noches lloraba por mi hijo, porque sé qué es lo que se siente perder a lo que más amas, pero me dolió más porque solo eras un niño de catorce años experimentando el amor. Lo siento JungKook-ah, no volveré a esconderte más secretos.

—M-Mamá...

No digas nada, solo escucha a tu madre: Todas las cosas pasan por algo, si perdiste a tu mejor amigo, fue para bien. Si las cosas terminaron mal con TaeHyung, entonces de una manera u otra se tienen que arreglar, tal vez ahora no es el momento porque la herida está fresca. Pero sabes que siempre vas a contar con el amor de mamá.








[...]









El chico de las estrellas ᵗᵃᵉᵏᵒᵒᵏ ¬ᶜᵒᵐᵖˡᵉᵗᵒ¬ Donde viven las historias. Descúbrelo ahora