El chico de las estrellas ᵗᵃᵉᵏᵒᵒᵏ ¬ᶜᵒᵐᵖˡᵉᵗᵒ¬

26

Narra JungKook*

—Cuando nos enteramos de todo, fue como una bomba. Todo explotó en un momento y pensábamos que ya nada podía arreglarse, ¿Qué podíamos hacer? Los dos estábamos bastante lastimados y un "lo siento" no arreglaría todo.

—Los dos tuvimos la culpa de todo. Y al final, nos convertimos como en el principio... Como completos extraños.

—También en ese tiempo nuestro tutor nos había dicho que Tae ya no necesitaba más clases, que sus notas ya habían subido bastante.

—Tal vez si eso nunca habría pasado, no estaríamos como ahora.

Termina narración*

JungKook había llegado al salón, lo primero que sus ojos captaron fueron a TaeHyung jugando con una pelota pequeña sin dejar de mirar hacia abajo

Yo no soy Min YoonGi, soy Kim TaeHyung

Y adivina qué: él y yo somos diferentes.

Soltó un suspiro y fue a sentarse, JiMin lo había dejado para estar con HoSeok, ya no tenía con quién desahogarse. Literalmente estaba solo ahora, sin un hombro en dónde recostarse.

¿En realidad se había estado enamorando por el hecho de pensar que era YoonGi?

No, no pensó que era YoonGi cuando se atrevió a besarle.

¿Por qué fue tan estúpido al pensar que era YoonGi?

Más bien, ¿Por qué le tuvo que creer a Min semejante estupidez?

Tal vez aún no podía superar su muerte y por eso... siempre lo dibujaba y tenía la ilusión de que vendría por él... Pero para ser sinceros, aunque él viniera por JungKook, el amor no sería el mismo que de hace cuatro años, no iba a ser la continuación de la misma historia. No iba a ser Min YoonGi, iba a ser otra persona.

¿Entonces cómo podría superar a YoonGi? ¿Cuándo dejaría de dibujarlo y de pensar que vendría por él?

Abrió su mochila y sacó una de sus libretas al igual que su...

¿Dónde estaba su lápiz?

Buscó minuciosamente en su mochila pero no había rastro alguno de aquél lápiz, comenzó a preocuparse más y más. Miró hacia el rubio y le habló.

—JiMin-ah...

El mencionado volteó a verlo.

—¿Si?

—¿No has visto mi lápiz?

Park negó con la cabeza y volvió hablar con su pareja. El castaño estaba a nada de llorar, por lo que acostó su cabeza y se cubrió con sus brazos.

—¿Ves? es lo que te digo, solo me habla cuando necesito algo...

—Aish, Jeon JungKook no tiene vergüenza... -soltó el pelirrojo.

—Lo pensé bien y es mejor dejar nuestra amista-

Pero Kim no iba a dejar esto así.

—¿Qué estupideces estás diciendo?

La pareja volteó a verlo, esa mirada asesina del peligris se fijó en el rubio.

—¿Estupideces?

—Es tu amigo, deberías de ayudarlo. -soltó enojado.

—Oye, ¿No te has dado cuenta cómo me trata?

—JungKook no te ha hecho nada.

El rubio bufó.

—No sabes nada..

—Es lo mismo que digo, ¿¡Por qué no ayudas a tu amigo que no te ha hecho nada?! -alzó la voz.

—Oye viejo, ¿Quieres tranquilizarte? -Habló HoSeok.

Tae fulminó con la mirada a su amigo.

—Por dios HoSeok, abre los ojos.

Y fue lo último que dijo, puesto que se levantó de su asiento y se fue del salón. Todo mundo se había quedado en silencio y murmurándose cosas.

Jeon lo había escuchado todo, pero nunca levantó la cabeza. Le importaba más encontrar su lápiz.

Tal vez aún no podía superarlo.

Lo admitía, extrañaba a TaeHyung aunque solo hubiera pasado un día después de lo ocurrido.

¿Cuándo fue que se volvió tan especial para él?

—r4Em