Drabbles RayAnna [pausado]

Oh Rapunzel

Auspiciado por: ChocoLel3

En una gran torre lejana en medio de todo el bosque se encontraba viviendo una joven muchacha de largas cabelleras rubias como el trigo, ojos celeste como el cielo, mirando desde su lugar la vista que el bosque le brindaba.

Suspiro y se volvió a su habitación.

-¡¡Rapunzel, Rapunzel, lanza tu cabellera!!- escucho un grito viniendo desde abajo de la torre y de la única ventana que había de un gancho puso su trenzado cabello y cayó hasta la mujer.

-tía Gothel, ya volviste- la hermosa muchacha sonrió.

Hace mucho tiempo por caprichos de los antojos de una mujer hacia unas verduras en un huerto ajeno, su esposo le fue a conseguir a ella, su embarazada y amada esposa. Pero no contó que la bruja temida y dueña del huerto lo pillara una noche. Luego de explicarle la situación la bruja se ablando diciendo que podían coger lo que quieran de su huerto pero a cambio le dieran a la hija que esperaban, así pues al nacer se la entregaron con la promesa de una buena vida.

Aunque la bruja no contó con la belleza de la niña, así que para protegerla la oculto de toda persona en una alta torre en el bosque.

Ya al cabo de varios años el hijo del rey se encontraba caminando por aquel bosque justo cerca de la Gran torre.

-¿hmm?- el azabache escuchaba una melodiosa voz cantando y curioso se acercó más hasta vislumbrar la torre y en lo alto una joven rubia.

Tenía curiosidad sobre la muchacha así que busco alguna entrada al lugar, más no la encontró y se volvió a su palacio. Pero el joven no podía sacarse de la cabeza la voz de la chica, así que cada tarde iba a escucharla, hasta que un día...

-¡¡Rapunzel, Rapunzel, lanza tu cabellera!!- oyó a una mujer gritar y de la ventana una larga trenza cayó subiendo la señora así.

-¿está es la escalera hacia la cima?- visualizo y luego sonrió de lado- entonces probare fortuna.

Y al día siguiente en la noche, fue que hizo su acto.

-¡¡Rapunzel, Rapunzel lanza tu cabellera!!- grito y paso un tiempo hasta que el trenzado y rubio cabello cayó.

La chica dudo un poco al principio por la gravedad de la voz, más no le tomó importancia. Y cuando el príncipe llegó se asustó.

-¿q-quién eres?- se sorprendió de el extraño pues en toda su vida nunca conoció de un chico.

-soy Ray, el primer hijo del rey de la capital, siento aparecer así, pero escuché tu canto y me llamó la atención- se presentó tratando de transmitirle más confianza a la joven- supongo eres Rapunzel.

-no... Mi tía solo me llama así como apodo, dice que le recuerdo a la planta, en realidad mi nombre es Anna- le dio la mano y este la tomó, empezando así lo que sería una amistad.

Los días pasaban y el chico cada noche visitaba a Anna.

-dime Anna ¿no te aburre estar acá?- preguntó intrigado de su confinación.

-hmm, pues no, mi tía dice que es para protegerme así que supongo que está bien- sonrió.

-¿quieres salir? Yo te puedo proteger y hacer que veas el mundo- propuso pero la rubia dudaba de si aceptar a lo que Ray trataba de persuadirla- hay varias cosas para ver, tantas personas que conocer, el mundo es tan vasto y tu aquí tan encerrada.

-...e-esta bien- al final aceptó.

-bien, tengo listo un plan, escucha- la acercó hasta el escritorio que ella tenía- traeré tela cada día que venga mientras tu los trenzas y así podrás bajar mientras yo te espero abajo.

-entiendo- luego el muchacho empezó a calcular cada trozo para cada día, cuanto se necesitaría, dejando un tanto confundida a la chica.

La bruja no sospechaba nada de los encuentros de los dos jóvenes, hasta que un día ocurrió.

-dígame tía Gothel ¿cómo es que me cuesta más subirte a ti que al príncipe Ray?- preguntó inocentemente, a lo que la enfurecida señora la encaró.

-¡ah, malvada!- exclamó- pensé que te había aislado de todo el mundo ¿¡y que oigo!? Que te estuviste encontrando con un hombre- furiosa agarro el cabello de Anna y con unas tijeras las corto en un santiamén dejando la hermosa cabellera en el suelo.

Tan despiadada fue que dejó a Anna en un desierto condenandola a la miseria y desolación.

Ese mismo día el príncipe se presentó a su encuentro de cada noche y como siempre la cabellera caía, entonces el subió hasta la cima, llevándose la sorpresa de que en vez de Anna este la bruja.

-¡aja! Querías llevarte a la niña bonita, pero el pajarillo ya no está en el nido ni volverá a cantar, el gato lo ha cazado y te cazara a ti también. Anna esta perdida pero oh, ya no volverás a verla- la mujer se burló de el joven pero este enfurecido respondió.

-eso ya lo veremos, estúpida bruja- seguido de eso se tiro de lo alto y en un movimiento rápido antes de caer se agarro de la rama de un árbol, siendo su figura bloqueada por las copas de los frondosos árboles.

Se regreso corriendo a su reino, mientras la idea de la bruja era que el joven murió por la caída, ya que gracias a los árboles no lo vio. Sacando armadas fue en búsqueda de aquella mujercita.

Dando espacio a varios años, por fin la encontró en el desierto donde fue dejada mientras escuchaba su dulce canto como antes lo hacía.

-¡¡Anna!!- la llamó y está reaccionó volteando a encontrarlo y yendo a abrazarlo.

-me buscaste- susurro en medio del abrazo, estaba contenta, pues tanto tiempo sola la tenía atemorizada.

-claro que sí, está vez haremos lo que te prometí ¿quieres ver el mundo? Ven conmigo- mostró su mano y ella rápidamente accedió.

-si, muéstrame el mundo- así los dos volvieron a el reino, siendo recibidos con alegría y aplausos, viviendo varios años contentos y felices.

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999 palabras B) xdxd.

Bueno, agradezcanle a ChocoLel3 por la idea, espero les haya gustado, nos vemos.