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P.O.V   SAMUEL

Los siguientes tres meses estaba trabajando con mucha fuerza y paciencia para terminar el trabajo para Teo, en cuanto termino me piro de aquí con Carla. Ella también quiere irse y empezar de cero, aun tengo casa en Estados Unidos, podríamos vivir tranquilamente sin tener miedo a nadie...

Estaba tratando poner mi corbata cuando Carla apareció, dándome en beso en la mejilla y deseándome buenos días.

-¿Vas al trabajo tan guapo? – cuestiona

Carla se dedica en ponerme la corbata, con muchas ansias espero el momento cuando por fin nos largamos de aquí.

-Unos meses mas y ya, mi amor... ya podemos irnos de aquí – dije entusiasmado

Carla sonríe.

-Lo espero con ansias – responde

Rodea manos sobre mi cuello, dándome un beso en los labios, ya parecemos a marido y mujer.

-Voy al almuerzo con mi mama, hace meses que no la veo y necesito contarle muchas cosas acerca de nosotros. ¿Y tú, que vas a hacer todo el día?

-Yo tengo que asistir a una reunión con mi padre y David.

Me tenso al oír nombre de ese, siempre me daban celos saber que ella este cerca de tipos que vuelve locos, el no duda ni un solo segundo en mostrarle como se siente y eso me molesta. De inmediato cambie mi reacción, me aparte de ella un poco.

-¿David?

-Samuel, creo que hasta ahora te demostré cuanto te amo, lo que siento por ti es tan fuerte que nadie ni nada podría destruirlo, ni siquiera un tipo que solamente anda detrás de mi desde hace años.

-Nunca podre confiar en él, no me gusta que andas cerca de él.

Carla acaricia mi mejilla pero no hay nada que podrá ayudarme controlar mis celos.

-Eres un loco celoso, ¿no entiendes cuanto te amo?

-No puedo respirar sin ti, Carla – dije sincero y desesperado

Mi desesperación por Carla se ha vuelto como mi única razón de vivir, antes todo fue juego y ahora es más real que nunca, jamás podre drogarme lo suficiente con ella para poder decir que no la necesito más, siempre busco más y más dosis... y nunca es suficiente.

-Saber que hay otros tipos en el mundo me hace sentir que podría perderte y eso me desespera – me sincero

Ella me mira incrédula, junta su frente con la mía.

-Para mí no hay nadie más que tú, eso lo sabes y me hace daño pensar que tienes esas cosas metidas en tu mente.

-Lo siento.

-¿Saludaras a tu mama de mi parte?

-Si.

Nunca antes le hable a mi mama sobre mi relación con Carla pero tengo que contarle todo, aunque existe posibilidad de que ella no reacciona de buena manera.

-Te tengo una sorpresa preparada para la noche.

-¿Una sorpresa?

Uy... esto parece interesante.

-Primero me juntare con Lu y luego nos vemos, hace mucho tiempo que no la veo y ni siquiera le dijo sobre todo lo que pasa en mi vida.

Tome su cara entre mis manos, le sonrió con dulcera y le doy un beso largo en los labios, despidiéndome de ella.

Cuando me encontré con mi mama ella no paraba de hablar de Nano y su nuevo trabajo, no encontré ningún momento adecuado para contarle lo de mi relación con Carla, tengo que esperar hasta que termine diciéndome esas novedades.

Mala fama |CARMUEL|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora