—¡Es hora del desayuno! ¡Angel! ¡Husk! ¡Despierten!
Charlie comenzó a vociferar luego de abrir la puerta de su habitación de un gran y estruendoso portazo. Si, el día había comenzado exageradamente temprano para la princesa y, por suerte, la planta baja del hotel contaba con un buffet de mala muerte para servirse desayuno y llenarse de buenas energías por la mañana. Ella estaba entusiasmada, alegre, optimista, ¡No todos los días experimentaba esa clase de cosas y acercarse a los pecadores corrientes de la zona le regalaría una grata lista de experiencias para entender más a su gente!
El primero en acurrucarse como un animal herido en su lugar de la cama, fue Husk. Por Dios, no debió beber tanto vino en esa estúpida fiesta, la resaca lo estaba matando. Se cubrió con sus alas y observó con los ojos entrecerrados y ceño fruncido a Charlie, quien no se inmutó al verlo.
—Carajo... No puede ser legal despertarse tan temprano.
Murmuró él felino con el peor mal humor del mundo. La princesa lo ignoró, dejó la puerta abierta y toda la luminosidad del pasillo ingresó al interior de la habitación. Husk se cubrió los ojos con completo fastidio y gruñó luego de tapar su cabeza con su almohada. Levantarse temprano no había sido parte del trato en ese viaje. La rubia solo siguió mencionando lo importante que era comenzar un día de forma productiva y se retiró por dónde vino con claras intenciones de que los esperaba en la planta baja para desayunar.
Como una ridícula familia o una mierda así.
Angel, por el contrario, se sentó en su lugar completamente despeinado y observó con su rostro agotado y somnoliento el lugar vacío que había dejado Charlie luego de retirarse por el corredor. Estiró el largo de sus seis brazos para desperezar su cuerpo y se restregó los ojos con sus manos superiores. Bueno, ya no podría dormir de todas formas. Apenas y pudo hacerlo luego del baile de la noche anterior porque no había podido dejar de pensar en todo lo sucedido.
Las preparaciones de la mañana fueron un fastidio para Husk a partir de qué ambos dejaron la cama. Ser compañeros de cuarto era complicado y algo le decía que ese patrón se repetiría en cada hotel porque las chicas jugaban a su conveniencia y Alastor jamás compartía habitación con nadie por mero capricho personal. El felino pensaba que Angel no dejaría de estar arriba de él, pero en realidad fueron otra clase de costumbres las que se volvieron un dolor de cabeza.
—Aw, gatito. Es mi turno para tomar el baño, piérdete.
Husk fue casi arrojado a las patadas de aquel interior y Angel se apropió del cuarto para arreglarse. El mayor solo suspiró demasiado brusco desde el otro lado de la puerta del baño porque apenas y pudo estar allí cinco minutos. Y lo peor de todo era que la araña tenía la pinta de que estaría mínimo dos horas para poner todo en orden.
Fue tan descarado al mostrar su verdadera personalidad fuera del juego de seducción de siempre que no pudo evitar sorprenderse. Husk se resignó a esa clase de convivencia, debía comenzar a acostumbrarse a esa faceta de Angel y tolerarlo. Era intentar encontrar paciencia o romperle la cara. Y no quería causar problemas.
Cuando Angel llegó a la mesa que el resto de su grupo compartía para desayunar, les sonrió radiante y espléndido. Llevaba un sensual top rosa con una falda negra y medias y sujetador de encaje. Recogió su cabello con cintas y maquilló su rostro, el resultado era simplemente hermoso a la vista de todos. Por supuesto, tuvo todo el tiempo del mundo para lucir fantástico. Las chicas no tardaron en halagar y reconocer la frescura de su rostro.
Y Husk caminó a su lado como si estuviera medio muerto, con grandes ojeras en sus ojos y una resaca que le taladraba la cabeza a más no poder. Tal vez pudo arreglarse mejor y no lucir como un borracho decadente, pero Angel ni siquiera le dio el tiempo necesario para hacerlo y lo jaló con él a la planta baja para desayunar.
![](https://img.wattpad.com/cover/235052075-288-k154315.jpg)
ESTÁS LEYENDO
Queen of Disaster ⋆° RadioDust ◌*̥
FanfictionLo que me hiciste es indescriptible, me tienes brillando como una esmeralda. Le prendes fuego a mi alma, me vuelves salvaje. Ningún otro hombre me hizo sentir hermoso, cuando estoy en tus brazos siento que lo tengo todo. ¿Será tu preciosa sonrisa lo...