Beast {joshler}

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Cada párrafo, cada oración parecía sacada de un un libro de fantasía, mientras más leía más se asombraba. Si no supiera de la existencia de Josh probablemente se hubiera reído de todo lo que leía, pensando en la gran imaginación del autor, pero todo era real, todo lo que estaba escrito en esas hojas arrugadas y viejas era verdad.

Tyler se dio cuenta en ese momento que Josh no fue el único que había sufrido tanto, aquella mujer que lo tenia en brazos siendo solo un bebé, cuanto debió haber sufrido al pensar que su propia vida y la de Josh podían acabar de forma tan cruel y fría.

Continuó leyendo a la mañana siguiente durante el trabajo, perdido en la narración y el desenlace de todo.

Para cuando me di cuenta, sin siquiera pensarlo, ya estaba huyendo de ahí con esa pequeña criatura en mis brazos, no lo escuchaba llorar a pesar de que lo estaba haciendo con mucha fuerza, todo lo que se escuchaba en mi cabeza era la voz que aquella mujer rogando que su hijo estuviera bien, ni siquiera me miro, su vista estaba hacia el cielo, sus ojos perdidos y casi apagados.

Logre llegar a mi cabaña y me escondi en la última habitación, estaba asustada, aterrada, pero en cuando mis oídos lograron captar el llanto del pequeño bebé, supe que alguien se encontraba peor que yo.

  Cuando logre calmarme lo mire mejor, era tan pequeño y se veía tan frágil, pero era tan adorable.

*narrado desde la perspectiva de Laura*

—Hola, pequeño, hey...—Laura sonrió arrullando al bebé en sus brazos, tocando su fría nariz con la punta de su dedo, logrando calmar su llanto—Eres muy bonito.

La mano de Laura subió con la cabeza del bebé, acariciando su cabello y sintiendo escalofríos cuando todo sus peculiares orejitas, no tenia idea de lo que aquel pequeño era pero eso no le haría entregarlo o abandonarlo, sabia que aquella mujer estaba huyendo por algo y no estaba dispuesta a dejar que lastimaran a alguien inocente que ni siquiera sabia el porqué de todo el caos que lo arrastraba.

—Y-Yo voy a cuidarte—Laura sintió un nudo en la garganta cuando la pequeña mano del bebé sujetó su dedo, recordando a la mujer herida y moribunda, imaginando el dolor que debió sentir al abandonar a su hijo en un mundo tan cruel—Creo que aquella mujer era tu madre, y si ella dio todo por salvarte, puedo hacer que lo que hizo no fuera en vano.

Después de eso cambió la sábana ensangrentada por una limpia. Lo cubrió bien e hizo lo más rápido que pudo ropa nueva para el bebé ya que la que tenia puesta estaba sucia y rota, aunque tardó más de lo debido por su nervios lo logró.

Laura lo desvistió, dándose cuenta que se trataba de un hombre, al ponerlo de costado notó una cosa más en su espalda baja, parecía una cola pero muy pequeña. Se mentiría a sí mismo si no dijera que eso le asustaba, pero ignoro sus propios sentimientos para poder seguir.

—Listo—Laura lo cargó de nuevo, escuchando los adorables balbuceos que producía el bebé—Necesito hablar con un par de personas porque no tengo idea de como voy a criarte...supongo que ahora seré tu...

Un largo suspiro salió de su boca al no poder terminar esa oración.

—Como sea, voy a cuidarte, ¿qué tan difícil puedes ser?, digo eres un bebé mitad...no sé que pero aún así eres adorable—Laura hablaba consigo mismo mientras caminaba por la habitación—¿Cómo te llamaré?, ojalá tu mamá me lo hubiera antes de que...bueno, no importa, ahora tengo que pensar en como voy a explicar que tengo un hijo...un hijo...es extraño.