-¿James? ¿Que haces aqui? -pregunté con firmeza.
-Me dijeron que habías vuelto -respondió segundos después.
-Y a mi me dijeron que vivías muy lejos de aqui.
-Si, lo se...pero tenía que venir a hablar contigo
-Claro, pasa -dije y abrí la puerta de par en par para que entrara.
Le envíe un mensaje a Ale para que se fuera, ya le mandaría yo algo si la necesitaba, ella accedió de inmediato
Dirigí a James al estudio y se veía claramente sorprendido porque acepte hablar con el con tanta facilidad.
Al entrar al lugar cerré la puerta tras de mi y señalé la silla que estaba frente al escritorio invitando a James a sentarse.
-¿De que quieres hablar, James? -pregunté una vez que me sitúe detrás del escritorio, sentada en mi silla.
-Sobre...lo que ocurrió entre Kathina y yo -susurró.
-Mira, eso la verdad a mi no me importa, como tu has dicho...fueron cosas que ocurrieron con Kathina, no conmigo. Asi que ahórratelo -sonreí con arrogancia y el suspiró.
-Isa...enserio siento mucho lo que pasó, fui un idiota...
-Y un infiel -dije terminando la frase por el. Al ver que el no decía nada, aclaré mi garganta para comenzar a decirle todo lo que tenía guardado.
-Escucha James, acepté hablar contigo por que en realidad quería decirte muchas cosas...y pensaba tentarme el corazón pero la verdad es que no te lo mereces. Me das...asco -dije haciendo énfasis en la palabra "asco" -¿Qué creías? ¿qué después de cuatro años yo iba a seguir siendo la misma niña ingenua? ¿que iba a correr a tus brazos con mis sentimientos intactos?...Que estupidez. Porque desde el momento en que me enteré de tu bajeza, lo único que me provocaste fue asco. Mira que acostarte con mi "mejor amiga" y luego reclamarme por abrazar a mi ex novio, es causa de pena.
Pero te confesaré algo...los cuatro años que estuve en Italia pensé mucho en esta desagradable situación y pensé que si tuviste el valor para acostarte con mi "mejor amiga" y hubieras tenido ese mismo valor para confesarmelo habría habido una remota posibilidad de que te perdonara, porque creía que lo nuestro de verdad valía la pena. Pero ahora tu no representas mas que un error para mi. Así que no pierdas más el tiempo, porque yo no pienso perder de nuevo el mio contigo. -dije firme y sin inmutarme, por fin había conseguido que James dejara de intimidarme.Y claro que lo hiso, dejó de intimidarme en el momento en que le bajó las bragas a Kathina. En ese momento, alguien tocó la puerta.
-Isa, ¿estás ahí dentro? -era Jake. Yo suspiré
-Si, pasa Jake -dije y el entró en el estudio con una gran sonrisa, que desapareció en el momento en que vio a James sentado frente a mi escritorio con la mirada en un punto fijo de la pared, los ojos aguados y la mandíbula apretada.
-¿Qué hace el aquí? -preguntó
-Solo vino a aclarar unas cosas, pero no te preocupes que ya terminamos -le sonreí y el se acercó a mi.
Dirigí mi mirada a James y suspiré.
-Lamento mucho si creías que ibas a encontrarme tan estupida como antes, ahora...vete James, vete y no regreses nunca, no me interesa tener ningún tipo de contacto contigo asi que no vuelvas a buscarme...-dije. El salió del estudio sin decir una palabra y segundos después la puerta principal azotó.
Solté el aire que sin querer estaba reteniendo y abracé a Jake. El me rodeó con sus brazos y me besó el cabello.
-¿Estás bien? -preguntó en voz baja. Yo asentí y levanté mi cabeza para darle un beso casto en los labios.
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Al fin...¡Libre!
RomanceCuatro años han pasado desde que huí de Malibú. Simplemente no pude mas. Italia ha sido un buen lugar para vivir, he llevado una vida tranquila, feliz -dentro de lo que cabe- y he madurado mucho. Tengo un buen trabajo en la policía de Verona, vivo e...