Capítulo 16

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Darwin Pov

Ha pasado cuatro días y aún no hay rastros de ella, no hay algo que me diga donde pueda estar; cada segundo, minuto y horas que pasan me vuelvo más loco.

Estar sin ella es como estar sin oxígeno.

Tomé el teléfono e decidí llamar a su madre. Hoy ella ya debe estar con nosotros.

-Hola Sra. Reyes, ¿qué hay con sus detectives?

-No han encontrado nada, la policía ha estado buscando y pues... Nada, ellos dicen que se la llevaron fuera de la ciudad.

-Está bien, ¿trataron de rastrear su teléfono?

-Están en eso... Cualquier cosa yo te llamo Darwin, gracias por preocuparte.

-No hay de qué, ella vale mucho para mi. Si sé algo le aviso, hablamos luego. -cerré el teléfono e fui a trabajar al colegio.

Al yo estar dando clases en tercero de media, veo a Arianna y a Carlos riéndose mientras me miran, ¿será que ellos saben algo? No, claro que no, eso sería muy absurdo.

Tendré que tenerlos en la mira, ellos después de clases se van juntos y pues creo que no están juntos como pareja.

Cuando terminaron las clases me quede un rato en el estacionamiento esperando a que ellos avanzaran para seguirlos, al ellos salir me miraron raro. Ellos tomaron una ruta desconocida, al momento prendí mi auto e fui tras ellos sin que se diesen cuenta.

Treinta minutos después me encontraba estacionado fuera un gran bosque, ellos ya han salido, esperé unos momentos e llame a la mamá de Alanna.

-Creo que sé donde está. -al decir eso cerré rápido.

Baje del auto e comencé a caminar por el lugar, cuidandome de alguna persona inesperada. En medio del bosque hay una pequeña cabaña abandonada, ¿por qué ellos vendrían allí?

En el lugar se comenzó a escuchar una voz que ya yo conocía.

Ella.

Llame rápido a la policía e di la dirección de donde me encontraba. Cuidadosamente fui acercándome e viendo por las ventanas, en uno de los cuartos estaban ellos, ella amarra a una silla y ellos dos frente a ella hablándole mal, ¿por qué lo hacen?

De inmediato escuché unos pasos, me escondí en un arbusto e esperé a que esa tal persona saliera. La policía.

Les hice seña de donde se encontraban de inmediato, ellos rodearon el lugar por si escapan. Al entrar yo fui tras ellos.

-Entréguense, ya sabemos todo.

-Mentira. -grito Arianna.

Ellos forzaron la puerta e la tomaron de las manos, a Carlos lo esposaron. A pesar de que ellos son menores de edad esto lleva un juicio por secuestro sin motivo, por ello tendrán que declarar el por qué lo hicieron.

Al ver a Alanna toda pálida y sin fuerza, me dieron ganas de llorar, de matarlos por haber hecho esto. Creo no poder perdonar esto.

-¡Oh mi amor!, te llevaremos al hospital enseguida. -dijo su madre tomándola por los hombros para llevarla al auto.

Yo fui tras ella en mi auto. Los policías se los llevaron, los detectives hablaron con la Sra. Reyes e se fueron.

Al llegar al hospital llevaron a urgencias a Alanna, su madre y yo nos quedamos en la sala de espera.

El doctor llego e nos llamo, de inmediato nos levantamos muy preocupados.

-Les tengo buenas y malas noticias.     -dijo el doctor. Nosotros hicimos alguna seña para que procediera- Bueno la buena noticia es que no fue violada y, no tiene ningún golpe grave. La mala es que tendremos que dejarla internada para hacerle unos pequeños análisis y, al estar muy pálida tendrá una dieta diferente, tendrá que comer más sano hasta que se mejore.

Querido Profesor.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora