Darwin e yo llegamos al colegio más temprano de lo normal, claro, nadie podía vernos llegar juntos, eso sería un grave problema.
En pocas semanas ya seré mayor de edad y mis amigos quieren hacer una fiesta así como "proyecto x" pero, yo creo que eso sería demasiado.
Aún no tengo pensado nada pero sonaría bien ir todos a un club de piscina e disfrutar todos un rato, claro, Darwin estaría también allí.
El verano casi se acerca, lo que significa que ya en dos meses saldré del colegio y entraré a la universidad, tendré que irme a alguna universidad de otro país, Londres, allí quiero ir.
-Tierra llamando a Alanna.
-reaccione. Nicole me miraba como un bicho raro.
-¿Qué? -dije algo angustiada.
-Nada.
La psicóloga del colegio entró e interrumpió a la profesora de informática. Le susurro algo e me miro a mi.
Oh no.
Estaba sentada en la psicología, aún no sé cual es el delito que cometí ya que no quieren decirme.
Mamá había entrado a aquel lugar. Espera, ¿qué hace ella aquí?
Me miró con disgusto e se sentó en el asiento que está a mi lado.
La psicóloga empezó a hablar. -Bueno, las tengo aquí reunidas por razones que todo mundo anda hablando aquí en el colegio. El asunto es Sra. Reyes, que se dice que su hija tiene una relación con uno de los profesores de está institución.
-Sí, yo sé eso y se lo acepto ya que es mayor de edad y él también, ¿acaso usted tiene algún problema con eso?
-dijo mamá algo enojada.
Yo sé que mamá le tiene un odio a está vieja por ser tan metía y, estoy contenta de que ella le haya hablado así.
-Dilculpe, no sabía... -dijo la vieja algo apenada.
-Pues ahora sí y para la próxima mejor llame porque tengo demasiados negocios que atender, no como usted vieja metiche.
Te amo mamá, me hiciste el día.
La psicóloga puso los ojos como platos, mamá e yo nos paramos e salimos de allí.
-Bueno mi amor me voy, hoy llegaré temprano y así hablamos sobre tu cumpleaños. Te quiero. -me dio un beso e un abrazo e se fue.
Volví de nuevo a clase.
Estaba en las gradas esperando a Darwin, prácticamente él siempre está conmigo y a mamá no le importa mucho ya que siempre estoy sola. Aunque hoy ella llegaría temprano.
-Sube al auto pequeña. -dijo él sin antes plantearme un beso en los labios.
Al ver que Darwin ya había pasado mi casa me dio curiosidad saber hacia donde íbamos.
No pregunté, ya sabía que él no respondería. Nos estacionamos al frente de unos grandes edificios que por cierto aparentan ser muy costosos. Era aproximadamente quince plantas, todo era de gris y, hermoso.
-En este edificio vivo. Vamos. -me tomó de las manos e subimos por el ascensor, me quede observando cada cosa que veía.
La verdad es que si me caso con él, quisiera poder vivir en uno de estos edificios.
Entramos a uno de los apartamentos. Todo adentro era blanco e negro, a un lado estaba un gran ventanal que se podía apreciar la ciudad desde allí. Todo perfecto.
Me tiré en el mueble e me quite la camiseta del uniforme, me levanté e comencé a revisar todas las habitaciones. Él me siguió.
-¿Te gusta?
Pues obvio.
-Claro... -dije mirando una pequeña librería que está en su habitación.
-Aquí viviremos en unos años... -dijo echándose el pelo hacia atrás.
¡Enserio viviremos aquí!
-Será maravilloso.
-Lo sé. -dijo abrazándome por detrás.
Me di un baño e me puse una de sus grandes camisetas lo cual me veía coqueta con ella puesta.
-¿Sabes?, me gusta cuando te pones mis camisetas, te ves hermosa. -se acerco a mi e me cargo, me agarre de su cuello e enrede mis piernas en su cintura.
Lo amo.
Me comenzó a besar e me puso contra la pared, sé adonde se dirige. Antes de que terminemos en la cama lo detuve poniendo una mano en su pecho.
-Tengo hambre. -dije haciendo puchero.
Este suspiró e comenzó a caminar a la cocina sin aún bajarme. Me siento una linda y pequeña niña cuando me carga así. Por eso me gusta tener baja estatura.
Que vivan las pequeñas.
Me bajó e comencé a sacar cosas del refrigerador.
Al terminar de comer fuimos a la sala e pusimos nuestro programa favorito "The Vampires Diaries".
Me acurruqué a su lado. Este entrelazó sus manos con las mías. Tomé mi celular e tiré una foto a nuestras manos así. Siempre quiero estar tomando fotos para siempre recordarlo.
Y se me ocurrió algo mejor.
-¿Podrías acompañarme mañana a ir a comprar una cámara profesional?
-Sí pero, ¿para qué quieres una cámara profesional si no eres fotógrafa?
-Es simple, quiero tirar muchas fotos y, no quiero llenar mi celular.
-De acuerdo. -dijo algo entusiasmado.
Estábamos en una tienda de cámaras profesionales, estaba observando algunas que captaron mas más mi atención.
-Quiero una "Cannon" -le dije a Darwin. Él me miró e sonrió.
Tomamos la cámara e tome accesorios para ello e la fuimos a pagar.
Al salir de la tienda, ya estaba ansiosa por usarla, la abrí y ya que Darwin estaba más adelante que yo, flashee.
-Perfecta foto. -susurré.
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Querido Profesor.
Romance"¿Que pasa cuando crees enamorarte de la persona equivocada?" Esta es mi vida, la que fue cambiando poco a poco mientras fueron pasando los años; que desde que eso paso se volvió en una nueva persona, la persona que no se enamora, la persona que...
