Extraño.

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—Vamos hermana... Ya no hay guerra entre nosotros...

Setsuna analizó al hombre, no veía intención de ataque. Asi que dejó la guardia. Fueron hacia el pueblo,como bien había dicho Moroha,a comer algo.
Mientras estaban sentados allí,comían tranquilos,Moroha era la única que parecía gozar la comida como si no hubiese mañana.

—¿No vas a comer nada? —preguntó Aiko a su compañero.

—No tengo apetito.

Ella lo miró algo apenada,y él pareció notarlo,a lo que miró el plato de arroz,pero no quiso tocarlo. Buscó algún otro tipo de alimento,pero nada había llamado su atención.

Acabando de comer,se retiraron del lugar luego de algunos minutos de charlas. Aiko y Kirinmaru caminaban por el bosque,él iba serio como siempre,y ella tomando el brazo del pelirrojo.

—No suelo consumir mayor alimento,deberías saberlo querida. —Rompió el silencio el rey.

—No,descuida. Quizá es que me preocupo por ti. —Respondió ella avergonzada.

****

—¿Y bien?

—Todo quedó justo como lo pidió.

—Será iluso si no ve lo que no sirve todo lo que consiguió. —respondió con fastidio.

—Seguiré si desea.

Una delgada sonrisa asintió a ello.

****

Algunos días después de todo aquello,Kirinmaru seguía pensativo en algo,aun sentía si pecho agitado cuando estaba con ella. No podría describir cual grande era el sentimiento que lo invadía,sin embargo,estaba seguro que aquello era muy honesto.

—¿Todo está bien en el reino verdad? —Inquirió.

—Todo en orden señor. —Respondió su sirviente,Kyuki. Y luego se marchó sin decir mas.

Kirinmaru entonces luego de algún tiempo,rondó una idea en si cabeza,algo que quizá no había pensado antes,pero era que se estaba enamorando cada vez mas de ella,ella había despertado aquel dulce sentimiento en su pecho,y tal parecía que a ella también le daba ese sentimiento.

El Corazón Del Rey BestiaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora