Escenas anteriores a este capítulo:
Marian fue secuestrada por ladrones y Robin debe luchar para conseguir la recompensa, ya que el Principe Juan se niega a pagarla.
En la actualidad:
Scarlett: ¿Sabes? Sería genial que los chicos vinieran, ahora que tú mandas podrías hacer que vengan - le sugirió mientras tomaba un poco de la comida de la bandeja.
Marian: Pero creo que todos sospecharían que algo extraño sucede, no quiero que se enteren de que los hemos ayudado todo este tiempo. Además, piénsalo de este modo: por fin podemos pasar un rato juntas libres de todo este trabajo.
Scarlett: Tienes razón Marian.
Así se pasaron la tarde, mandó al príncipe y al Sheriff a tareas exahustivas como enviar a este último a escondidas del principe a darle dinero a las personas de la aldea, otras más entretenidas como enviar a Ralph y Rolph a clases con Lady Rohesia en lugar de Marian, la maestra no se molestó por el canje, en cambio se enfrascó en tratar de enseñarle a los gemelos que no debían responder de forma altanera cuando Lady Rohesia los regañaba.
Para el final del día todos estaban cansados, sobre todo el Príncipe Juan, a quien habían enviado por comida a la cocina, devolviéndolo varias veces con la excusa de haberle pedido algo diferente u olvidar algo.
Marian: Muy bien principe, fue divertido jugar a ser tú por este día - se burló, los cuatro la miraban enojados pero nadie se movió de su sitio, excepto la joven, que se levantó del trono - Ojalá podamos volver a hacer esto otro día.
Príncipe Juan: Ni lo sueñes - murmuró apretando los dientes y los puños, todos la miraron detenidamente mientras atravesaba el salón.
Marian: Buenas noches - se despidió y cerró la enorme puerta que dió un gran estruendo que no permitió que quienes seguían adentro escucharan los acelerados pasos de quien acababa de salir.
Entró a la habitación vacía y oscura, hacía frío, pero no se molestó en cerrar la puerta que conducía hacía afuera, de todas formas tendría que abrirla cuando la visita que esperaba llegara.
Encendió las lámparas, que de inmediato iluminaron la habitación por completo. En el escritorio reposaban los pergaminos y plumas que se había dispuesto a usar la noche anterior. Una helada corriente le atravesó la espalda cuando su secuestro le volvió a pasar por la mente.
Sacudió la cabeza varias veces, dejando el recuerdo del espantoso día que Robin no estuvo con ella.
Se sentó, de espaldas a la entrada abierta, no había tenido una charla a solas con Robin y no sabía para cuales preguntas debía estar preparada.
"Querido Ricardo" empezó unos milímetros más abajo del borde "Ya ha pasado un tiempo desde que partiste, como ignoro si te encuentras en el puesto de comando o en Londres, envío esta carta por duplicado a ambos lugares" su escritura se vio interrumpida por el chirrido de las bisagras de la puerta. Dió un suspiro y dejó la pluma a un lado.
Robin: ¿Interrumpo? - preguntó en tono suave acercándose.
Marian: Para nada - dijo tratando de sonar amable, aunque era evidente que había parado por su llegada - ¿Qué haces aquí?
Robin: No vine anoche. ¿Sabes? Planeaba esperar a que los chicos se quedaran dormidos como siempre, pero cerré los ojos, desperté en la mañana.
Marian: No importa - le disculpó antes de siquiera escuchar "Perdón" - De cualquier manera no me habrías encontrado aquí.
Robin: De haber llegado y no haberte encontrado podría deducir que algo sucedió y quizá si yo hubiera salido a buscarte, tal vez... - bajó la mirada.
Marian: No podías haberlo sabido - le miró desde abajo divertida y aún sentada - E igual todo eso ya pasó.
Tratando de evitar más pensamientos cargados de nostalgia siguieron escribiendo la carta.
Marian: Hay que preguntarle si vendrá para el cumpleaños de su hermanito - "El principal motivo de esta carta es saber si estarás presente en la fiesta de cumpleaños del Principe Juan, si tu respuesta es sí por favor quiero saberla lo más pronto posible para poder preparar todo para tu llegada" - Qué tal está - le preguntó tras mostrarle el papel.
Robin: Excelente - sonrió.
Marian: Muy bien - continuó, "Mi siguiente motivo es mantenerte informado sobre lo que ha pasado estos días, para empezar mi querido primo al mando relevó al Sheriff de su cargo por un día y en su lugar puso a tres bandidos en su puesto, por suerte Robin estuvo ahí para ayudar. También intentó robar todas las reservas de comida en la aldea para su banquete de cumpleaños, como la anterior vez, Robin resolvió todo junto a sus amigos"
Robin: ¿Mencionarás lo que sucedió estos dos días? - hubo total silencio, ambos discutían en su cabeza con la idea de contarle al rey sobre el secuestro y narrarle como el príncipe se cruzó de brazos sin interesarle la suerte de su prima.
Marian: Lo haré, quiero al menos una compensación por haber pasado una noche en una situación como esa - se estremeció, recobró la compostura casi de inmediato. "Hace dos días exactamente" empezó en un nuevo párrafo, "me decidí a pasar una noche en el bosque con los chicos, tú más que nadie sabe que el contacto con la naturaleza ayuda muchísimo cuando se está agobiado. En el camino aparecieron tres ladrones que me secuestraron y pidieron al príncipe una recompensa para devolverme sana y salva, aunque suene increíble se negó a pagar por mi rescate" - ¿Exagero? - Robin releyó las últimas líneas y negó con la cabeza. Marian siguió escribiendo "Pasé toda la noche de ayer con esos tres hombres en situaciones que no quiero volver a desenterrar de mis recuerdos. Espero que te encuentres bien y tu respuesta lo más pronto posible"
Robin: Al fin - rió suavemente, tomó una de las hojas y comenzó a transcribir lo anteriormente escrito para el duplicado, no demoró mucho en esto - ¿Qué tal?
Marian: Fantástico.
Ella lo miró directa y detenidamente a los ojos, él no pudo mantener la vista fija como su compañera, y cuando bajó la mirada intensa y feroz, sus ojos revelaron una nueva ternura, y sus pestañas largas proyectaron sombras delgadas en los pómulos altos y angulares. Sus labios eran perfectos, su forma tan perfecta como su sabor, sabor que no probaría esa noche, la decepción de no haber sido protegida aún estaba presente.
Robin: Debería irme - sugirió.
Marian: Tal vez sea lo mejor.
Lo miró levantarse pero no volteó cuando se fue, solo sintió los fantasmas de un beso en su mejilla que no la inmutó y el susurro de un Te Amo.
1120 palabras 💚💙
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Juntos en Sherwood - Terminada
RomanceEstaban enamorados... Se notaba por la forma que se miraban entre si... Como si tuvieran el secreto más maravilloso entre ellos.