Apariencias

Muy tarde

Toda la Academia se estaba poniendo de acuerdo en lo que se haría en el festival. Generalmente celebrado por tener aprendizaje rápido en los alumnos y también para que los nuevos sepan como integrarse con otros grupos.

Varios alumnos de cada clase bajaron a ver e imaginar cómo quedarían los adornos y esas cosas.

Otros estaban en el gimnasio, viendo lo mismo.

- ¿Y cuando será todo esto? -  preguntó Midoriya a su compañera

- En una semana -  contestó Ochaco

A la distancia, la azabache estaba molesta, tenían mucha cercanía.

- Hola, Momo 🎶 -  se acercó a ella, tomándola por los hombros

- ¿Qué quieres? -  preguntó sin darle importancia

- Ay, estás muy enojada, pero supongo que lo estarás más ahora -  la sonrisa de Toga mostraba esa satisfacción de hacerla reaccionar mientras que Momo comenzaba a prestar atención.

- ¿Por qué lo dices? - 

- Pues porque tu querido Izuku está dudando, Mashirao y Katsuki ya hablaron con él y con lo que le hiciste al gritón -  dijo a susurros  - Eso si contamos la vez que Todoroki habló con él en el gimnasio - 

Algo dentro de ella comenzó a arder por el coraje, realmente lo intentaban alejar de ella y peor aún, Izuku comenzaba a tomarlo en serio.

- ¿Vas a permitir eso? -  preguntó con incitación a que hiciera lo que ya sabe - En lo que quieras, te puedo ayudar -

- No, este es mi propio asunto -  se soltó de su agarre y fue directo con él. Tomando su mano para aprovechar la distracción de la mayoría, llevándolo con ella.

Pocos que ya lo saben comenzaron a lamentarse.

Entraron en un salón lejano, donde Momo aprovechó todo para tenerlo consigo.

- Dime Izuku, ¿Confías en mi? -  preguntó, acorralando su persona contra la pared

- ¿Por qué preguntas? -  comenzó a asustarse

- Sólo contesta, ¿Confías en mi? ¿Realmente me amas? -  preguntó

Para estas alturas, debía contestar por impulso y no por pensar.

- Pues, tendría que conocerte mejor, no sé mucho sobre ti -  su respuesta, lamentablemente fue la errónea

- ¿Te dijeron algo de mi, verdad? - 

Las pupilas del chico se contrajeron, mostrando su miedo.

- Ya veo, no tienes porqué hacerles caso, son solo rumores -  lo abrazó con cariño, pero al sentir su cuerpo bastante tenso lo supo.

Esa confianza que le costó trabajo conseguir, se había perdido. Con un dolor en su pecho pero una gran satisfacción en su mente, comenzó a presionar un costado del cuello del chico con fuerza.

- Espera, ¿¡qué haces!? -  preguntó asustado  - Eso duele -  trataba de separarla pero tenía una gran fuerza

- Momo, por favor! -  insistía

- Lo siento, Izuku, por favor perdóname -

- Eh? -  sus lágrimas llamaron su atención, lo que hizo bajar la guardia.

- Pero es que..., yo en verdad te amo y te necesito conmigo -  comenzó a sollozar

- Momo... -  comenzó a perder fuerza en su cuerpo

- Perdóname -  y logró dejarlo inconciente.

Su cuerpo resbaló por la pared hasta llegar al suelo mientras ella lloraba y se lamentaba. Se agachó y tomó su rostro entre sus manos.

- Eres tan buen chico -  dijo para luego besar su boca inmóvil.

- ¿Te lo llevarás? -  Himico entró al aula

- Supongo que tú sí sabes guardar secretos -  respondió levantándose, limpiando sus lágrimas

- Claro! ¿Por quien me tomas? ¿Por Todoroki? Jaja, que ingenua, veo que te afectó mucho su traición -  Se acercó a ella, mirando al chico inconciente.

Se acercó al pequeño escritorio de ahí y presionó el botón que abría la puerta tras la pared.

- Solo un poco, no lo esperaba de él -  rodeó su cuello con el brazo de Midoriya y se levantó.

- Bueno, conmigo cada secreto está a salvo, ahora ve y cuida de él -  dijo

Momo entró al pasillo mientras detrás de ella la puerta se cerraba, su corazón le pedía detenerse pero su mente amenazaba con torturarla con malos recuerdos si es que no lo llevaba consigo.

- No te preocupes, cuidaré bien de ti, mi querido Izu -  lloró por última vez para salir por detrás de la escuela e ir directamente a su casa para resguardarlo.