¿Escuchaste El Rumor? #1

Capítulo 8 [part 2]

Al parecer los fuertes nervios no me iban a dejar en toda esa noche.

¿Qué como lo sé? Pues fácil, prácticamente estoy actuando como un delincuente que se está escondiendo cada instante, y digamos que mi acompañante no estaba mejorando la situación.

Ya desde un principio, cuando tuvimos que pagar la entrada, la chica que se encontraba recolectando el dinero se nos quedó mirando un buen rato, sobretodo al maldito titán. Algo que hizo que por un momento se me bajara el azúcar al pensar que nos había reconocido; más sin embargo, está después simplemente nos sonrió, nos entregó nuestras entradas y nos dejó pasar soltandonos un "¡qué la pasen bien!" Que obviamente no respondimos con palabras, pero si con un movimiento de mano por parte de Jaeger.

Después de eso, todo fue una constante carrera de aquí para allá.

Y es que cuando Eren decidió que quería jugar al tiro al blanco, estuvimos sólo como cinco minutos en el puesto cuando vimos como Hanji, Armin y Annie, siendo está última la que iba con su típica cara de pocos amigos mientras los otros dos charlaban animadamente, venían caminando en dirección hacia nosotros. Por lo que tuvimos que prácticamente salir corriendo de allí.

Luego paramos en un puesto en donde la actividad se basaba en responder preguntas según una ruleta que las seleccionaba dependiendo de la fuerza con la que la hacías girar. Obviamente, Jaeger se encargó de moverla mientras yo hacía el resto; pero de nueva cuenta, sólo alcancé a responder un par de ellas cuando Eren tuvo que prácticamente arrastrarme lejos cuando divisó a Jean que iba acompañado de Mikasa, caminando demasiado cerca de donde nos encontrábamos.

De ahí le siguió otro en donde sólo tenías que asestar una pelota de básquet en el aro al menos cuatro veces de cinco oportunidades para poder ganarte algo. En ese sí pudimos estar un poco más de tiempo, incluso Eren parecía bastante entretenido lanzando la pelota y embocandola al instante sin ningún inconveniente; pero al final tuvo que retirar su premio casi de un jalón cuando vimos a Sasha, Connie, Isabel y Farlan acercarse al mismo puesto para intentarlo también.

Y eso sólo nos dejaba parados en ese estúpido sitio en donde tenías que jugar a las vencidas con un brazo electrónico que, según tu rendimiento con él, te mostraba en una pantalla la cantidad de puntos que habías ganado. Y creo que no hace falta especificar que el titán lo intentó más de tres veces seguidas, ya que además de molesto parecía querer sacarse la frustración del cuerpo a como diese lugar usando su fuerza física, mientras yo sólo me mantenía parado a un costado observando el erizo de peluche que se ganó en el anterior juego pero que me terminó regalando.

Suspiré cansado. Al parecer las cosas no iban a salir como ambos lo habíamos esperado; aunque eso tendría que haberlo previsto desde un comienzo...

—Ya, tranquilízate Hulk—Le dije al verlo querer volver a apresar la mano metálica para otra ronda.—El pobre y estúpido juego no tiene la culpa de nada.

Él resopló, alejándose un poco para poder mirarme.—Es que... ¡Aish, mierda! Parece que nadie nos permitirá estar un momento a solas y tranquilos.—Se quejó, cerrando los ojos con fuerza por unos segundos.

—Eso es lo que pasa cuando quieres recrear la historia de Romeo y Julieta—Dije a modo de broma para aligerar un poco el ambiente, pero al parecer no funcionó por el hecho de que usé mi voz neutral de siempre y porque Eren no pareció cambiar de expresión ante ello.

Vaya, me quejo pero yo también soy un completo fiasco para hacer chistes y más en los momentos en donde se los requieren con mayor intensidad.

Fije mi vista nuevamente en él, notando como incluso las venas de su cuello se habían comenzado a marcar notablemente y su ceño aún continuaba fruncido. Cosa que no me gustó para nada presenciar, porque por alguna extraña razón me hacía sentir culpable.