Capítulo 15

11.2K 1.1K 1.4K
                                    

—¿Qué te dije sobre fumar en mi presencia?

Eren se encogió de hombros, regalándome una sonrisa algo avergonzada antes de darle (que esperaba fuese la última) calada a su cigarrillo. Botando el humo en forma de pequeños anillos que terminaron chocando en mi cara de forma intencional, a lo cual él comenzó a carcajearse mientras yo sólo tosía y movía mi mano en el aire, en un intento de disipar aquello.

—Perdón, es que se vienen los exámenes y estoy algo nervioso.—Confesó, metiendo una mano en su abrigo y pasando el otro brazo por mis hombros, haciendo que por inercia prácticamente terminara un poco recostado en su pecho.

Ambos nos encontrábamos sentados en una banca ubicada en un parque medianamente cercano a la Universidad. El cual habíamos encontrado de pura casualidad ya que ninguno de los dos había tenido conocimiento del mismo antes; pero que lo cierto era que nos había venido como anillo al dedo, por eso de que concordabamos con la idea de que no podríamos estar todo el tiempo metiéndonos en salones vacíos o encerradonos en los baños en donde prácticamente estábamos tentando a la suerte.

Por lo que en simples palabras: ese lugar era perfecto. Sobretodo porque había poca gente, lo que me daba una idea de no era tan concurrido o quizás sólo era debido al frío y a la imperiosa necesidad de algunos padres por mantener a sus hijos resguardados en casa para evitar un posible resfriado. Cosa que para ser sincero, siempre me pasaba durante éstas fechas, en donde mi sistema inmune parecía estar sosegado con la idea de entablar una relación con cualquier virus que pasara.

Como justo ahora.

Saqué otro pañuelo del pequeño paquete que había guardado en mi mochila para poder limpiarme la nariz, aún a costas de que me avergonzara saber que el gigante me estaba viendo.

Dios, malditos mocos. ¿Acaso podría haber algo más asqueroso?

—Creo que todos estamos igual de nerviosos—Le contesté, tirando el pañuelo descartable en el bote de basura a un lado.—De todas maneras no sé de qué te preocupas. Tienes uno de los mejores promedios a pesar de que aparentas ser todo un idiota, y creo que seguirás de esa forma.

Él me sonrió de lado—Vaya que se siente bien cuando me adulas a tu manera—Instantáneamente le di una de mis miradas asesinas, a lo que sólo atinó a abrazarme con más fuerza.—¡No te enojes, bonito! Y volviendo a lo otro... puedo decir lo mismo de ti. Eres el mejor estudiante de toda la Universidad. Incluso a veces pienso que serás el único que se gradúe con honores.

—Eso ya lo sé. No hace falta que me lo digas.—Dije en tono prepotente, sin cambiar mi expresión neutral aún cuando Eren volvió a reírse.

—Es bueno que lo sepas—Al instante pegó su nariz en mis cabellos—
También sabes que me encantas, ¿Verdad?

—De eso tengo muchas dudas—Le dije, resoplando divertido cuando me miró con fingida ofensa.

—Y... ¿Hay algo que pueda hacerte cambiar de parecer?

Lo miré durante unos segundos, aparentando estar pensándolo muy detenidamente, aunque lo cierto es que sólo estaba divirtiéndome con su expresión de nerviosismo e impaciencia al no obtener una respuesta rápida de mi parte.

Al final sólo negué, aclarandole algo antes de que le diera una especie de infarto:

—Por el momento estoy bien con que te quedes así—Inconscientemente me apegué un poco más a él.—Y mejor sí estás callado.

—Creo que eso es suficiente para mí.—Comentó de forma cantarina, dejando un beso sobre mis cabellos—Oh, por cierto, quería darte algo...

Automáticamente me alejé un poco de él al verlo removerse para sacar algo de su mochila. Cosa que me hizo abrir un poco los ojos al notar que era una pequeña bolsita de color vino, que incluso llevaba un fino listón dorado que la mantenía cerrada.

¿Escuchaste El Rumor? #1Donde viven las historias. Descúbrelo ahora