PURO VENENO

Parte 18

- ¿Estas llorando?

- No, ya no.

- Ah.- Contesta.

- ¿Para eso has venido?- Me giro y le miro cara a cara.- ¿Para verme llorar? Pues mira, aquí lo tienes. - Le grito.- ¿Algo más? Ni siquiera puedes estar aquí, es el baño de chicas.

Me mira de arriba a abajo lentamente, entonces se gira y cierra la puerta del baño con pestillo.

- ¿Que coño estás haciendo?

- Disculparme.

- ¿Cerrando la puerta?

Agacha la cabeza y se moja los labios sonriente.

-No, claro que no.

Se acerca a mi y pone su rostro frente al mío.

Me quita el bolso del hombro y lo deja en el lavabo. Miro sus movimientos detenidamente y rápidamente vuelvo a mirarle a él. Me pone el pelo tras los hombros y posa su mano en mi cintura.

- Hugo, ¿que haces?- Le susurro, aunque casi ni se me escucha.

Mi respiración se acelera cuando baja su mano hasta mi culo, y continúa bajándola hasta llegar a la parte de atrás de mi rodilla. Con un rápido movimiento la levanta para poner mi pierna rodeando su cuerpo, y se acerca salvajemente contra mi haciendo así que note todo su cuerpo contra el mío.

Con un pequeño empujón me levanta sentándome así levemente en el lavabo aunque sin separar nuestros cuerpos.

Le miro a los labios y vuelvo a mirarle a los ojos.

- ¿Quieres que siga?- Sonríe.

- Sii...- Le pido.- Osea no.

- Decídete.- Me responde riendose.

- Con esto no vas a arreglar nada.- Le susurro al oído, y él se muerde el labio.

- ¿Estas segura de eso?

Desliza su otra mano por el interior del muslo de mi pierna derecha. Cierro los ojos y levanto la cabeza mirando al techo.

- Segurísima.- Intento responder lo más convincente posible.

Sigue subiendo su mano por mi muslo hasta llegar a la entrepierna. Mi espalda se arquea ligeramente y giro la cabeza mordiéndome el labio, para que así no me vea.

- ¿Estas segura?- Me pregunta nuevamente sonriente mientras mastica un chicle.

- Ajam.- Casi prefiero no tener que hablar.

Aparta a un lado mi ropa interior con la mano y comienza a pasar dos dedos por encima, haciendo círculos suavemente.

- Entonces esto no funciona ¿no?

Le miro, con la respiración acelerada. Él mira mi pecho subir y bajar repetidas veces y se muerde el labio otra vez.

Niego con la cabeza.

-Una pena entonces.

Sonriente, retira la mano y se aparta de mi. Le miro fijamente mientras se dirige a la puerta.

Comienzo a reírme y pongo los ojos en blanco.

- Eres un cabrón.- Le digo sonriente.

- Has sido tú la que me ha dicho que no servia de nada.- Me gira y vuelve a acercarse a mí hasta ponerse nuevamente como estábamos antes. Levanta mi pierna y me acerca aún más a él.

- No sé cuándo y no se como, pero esta pienso devolvértela Huguito.- Susurro contra sus labios.

Me aparto de él y cojo el bolso. Abro el pestillo de la puerta y cuando estoy a punto de salir, me grita:

- Bueno, al menos ya no estás cabreada conmigo.

- Te va a tocar aguantar mucho más para que te perdone por esto.- Le grito yo también mientras me giro brevemente para mirarle.

Ambos nos reímos y corre para ponerse a mi altura.

- Enserio, lo siento, me he comportado como un imbécil antes en las sábanas.

Asiento sonriente y le doy un pequeño codazo.

Ambos vamos andando hacia nuestros grupos. Cuando estamos a pocos metros, se pone tras de mi y apartando el pelo de mi espalda, me susurra al oído:

- Estoy deseando que me la devuelvas.

Sonriendo, pero sin mirarle, me voy hacia mi grupo y me siento en la sabana junto a David.

Hugo pasa a nuestro lado y tras saludar a David con la cabeza, continúa con su camino hasta sentarse en una sabana a unos metros tras nosotros, con sus amigos.

- ¿De donde vienes tan contenta tú con Hugo, pedazo perra?- Me susurra David.

- Discutimos, me fui al baño y me siguió.- Cojo unas cuantas palomitas de la bolsa que sostiene.

- ¿Y la sonrisa es de recién follada o es que habéis arreglado las cosas?

Me atraganto con la palomita y le miro con los ojos como platos.

- Eres un bruto.- Le doy un pequeño golpe en el brazo y él hace una mueca de dolor.- Perdon, se me había olvidado los moratones.

Ambos nos reímos.

- Bueno, no me has contestado.

- Digamos que mitad y mitad de cada cosa.- Antes de que me diga nada, continúo.- No hemos hecho nada, solamente...

- ¿Preliminares? - Me pregunta emocionado.

- Casi.

- Entonces no has hecho una mierda hija mía.

- No es tan facil.

- Claro que es fácil. La coges con la mano y haces movimientos arriba y abajo o bien te la metes en la...- Comienza a hacer gestos con las manos.

- DAVID.- Le grito.

Nos mira todo el grupo, incluido el de Àlex.

- Para por favor. - Le digo avergonzada.

- Vale vale, que tiquismiquis eres hija.- Dice poniendo los ojos en blanco.

- Eres lo peor.

- Sisi pero que cuando quieras yo te doy clases chata.

- ¿Tú quieres que me muera no?

- No, quiero que empieces a vivir un poco.

Cojo otro puñado de palomitas y me tumbo en la sabana. Él pone su cabeza sobre mi tripa tumbándose también.

- Ya empieza la peli.

- Por fin sabré qué película ponen.- Susurro.

Tras un par de anuncios, comienzan a proyectar la película. Cuando veo el título abro mis ojos como platos, y me incorporo corriendo.

- No puede ser.- Susurra David tapándose la cara con la mano.

- Oleeeee.- Le grito.

- ¿Que pasa?- Nos pregunta Mario.

- Es su película preferida, me hace verla cada mes mínimo, incluso la tuve que regalar la película por su cumpleaños. Yo la odio.

- Es la mejor película del mundo, no mientas.

- El protagonista es imbécil.

- Hey, no te metas con Darcy, es mi protegido. - le amenazo con el dedo.

- ¿Que peli es? - Pregunta Helena.

- Orgullo y prejuicio.- Contesto entusiasmada.

- Tranquilos, si no la escucháis bien, ella os va a decir todos los diálogos.- Grita David a los de nuestro grupo y todos se ríen.

Me giro para mirar a Hugo, que me mira sonriente ya que está escuchando la conversación. El resto de su grupo también se ríen.

- Hey Dani y ¿cuanto dura? - Me pregunta Jaime desde lejos.

- Mejor que no te lo diga que os vais.- Contesta David por mi.