Entre el Amor y el Odio - Jaeyong (ADAPTACIÓN)

Capítulo 27

YoonOh finalmente estaba cara a cara con Lee Changmin, el hombre que más ha odiado en toda su vida, pero en esa situación todo estaba mal... En la venganza de YoonOh estaba planeado un encuentro con el presidente Lee, pero no ahora, no en ese momento, el encuentro debía darse cuando Lee Changmin lo buscara desesperado y le suplicara piedad, pero el hombre que tenía frente a él mostraba seguridad y arrogancia... en definitiva la situación estaba fuera del control de YoonOh, pero él debía mostrarse seguro y valiente, no dejaría que Lee Changmin lo humillara.

-¿Por qué ingenuamente cree que voy a entregarle a Taeyong? – la voz de YoonOh iba impregnada de arrogancia, pero sobre todo de odio – No sé si lo sepa, pero él me pertenece.

-Lo sé, sé que obligaste a mi hijo a casarse contigo por el odio que sientes por mí y para cumplir una absurda venganza.

-Me doy cuenta que está muy bien informado – y eso le preocupaba.

-YoonOh, YoonOh, YoonOh... – repitió con burla – viviste enfocado en odiarme que no te diste cuenta que tenías a un enemigo viviendo bajo tu mismo techo.

-¿A qué se refiere?

-El peor enemigo que podemos tener los hombres es otro hombre despechado... ¿Qué le hiciste a Kim Jungwoo para que me buscara y me dijera todo lo que tienes planeado?

-¡¿Qué?! – YoonOh no podía creer lo que escuchaba.

-Ese jovencito frívolo y ambicioso fue a mi oficina a decirme donde tenías a mi hijo y las razones que tenías para llevártelo.

-No puede ser – dijo por lo bajo. Jungwoo lo había delatado y esa había sido su venganza por haberlo rechazado.

-Sinceramente me tiene sin cuidado los problemas que tengas con ese hombre, estoy aquí sólo para llevarme a mi hijo. ¿Dónde está?

-No está aquí – YoonOh miró desafiante al padre de su esposo – así que váyase de mi casa... ¡Largo!

-Por supuesto que me iré, pero con mi hijo – Lee Changmin se veía tan tranquilo, que eso desesperaba a YoonOh – A pesar de lo que hiciste voy hacer amable contigo, y más vale que correspondas esa amabilidad.

El elegante hombre caminó hacia el escritorio de donde tomó una fotografía, en ella se encontraba YoonOh y Ten cuando eran niños y los dos estaban junto a sus padres, era de las últimas fotografías que se habían tomado como familia completa.

-No puedo ser amable con el hombre que destruyó a mi familia, ¡usted es el culpable de que mi padre muriera!

-Conozco la versión de la historia que te contaron sobre ese tema – Changmin miró a YoonOh aún con esa extraña tranquilidad – pero creo que debes escuchar mi versión.

-¡No escucharé nada, todo lo que usted dirá seguramente son mentiras!

-Quieras o no me escucharás... Tú piensas que le robé la empresa a tu padre ya que no le di el dinero que me pidió a cambio de ella, pero te equivocas, yo le di íntegramente todo el dinero para que pagara las cuentas del hospital y los tratamientos para salvar la vida de tu madre.

-¡Mentira!... ¡Está mintiendo!

-No tengo por qué mentir, tengo pruebas de lo que estoy diciendo y te las entregaré en cuanto terminemos de hablar... cada centavo del préstamo que tu padre me pidió se lo di, pero él lo perdió en una mala inversión que hizo – al escuchar eso, YoonOh se sorprendió ya que él nunca supo que su padre hubiera hecho inversiones en ese momento en que tanto necesitaban el dinero – Un hombre llamada Choi JinSuk le sugirió invertir y de esa forma triplicar el dinero que yo le había dado – YoonOh escuchaba sin entender, sin poder imaginar todo lo que escuchaba, por tantos años había vivido creyendo lo que le habían dicho y lo que él mismo había escuchado, que ahora esa verdad lo confundía – Por supuesto esa inversión sólo era una estafa, tu padre entregó todo el dinero a ese sujeto el cual desapareció al poco tiempo llevándose todo... De esa manera se quedó sin el dinero y sin la empresa, no pudo pagar el hospital y los tratamientos de tu madre. YoonOh, yo no tuve nada que ver con lo sucedido en tu familia.

-No, no puedo creer en eso... usted está mintiendo – Lee Changmin negó con la cabeza, después se acercó a la puerta donde dos hombres vestidos de negro lo esperaban, pero él sólo extendió la mano y uno de aquellos guardaespaldas le entregó un sobre amarillo.

-Aquí está la prueba de todo lo que te he dicho, los papeles firmados por tu padre que comprueban que le entregué el dinero, los documentos de la supuesta inversión que hizo y donde le quitaron todo, no he mentido, en nada, YoonOh.

-No puede ser – uno a uno fue revisando cada documento y efectivamente eso comprobaba la inocencia de Lee Changmin.

-Me has odiado por tantos años inútilmente – YoonOh cubrió su rostro con las manos, todo lo que había hecho, todo lo que había planeado se había ido en un segundo a la basura, siempre había estado equivocado – trataste de arruinarme, intentaste dañar a mi familia... Utilizaste a mi hijo para tu venganza, y eso es algo que no te voy a perdonar.

YoonOh levantó la mirada y vio como Changmin caminaba hacia la puerta y la abría para que sus dos guardaespaldas entraran.

-YoonOh, has cometido un grave error al querer dañar a mi familia... ¿Dónde está Taeyong?

-No se lo diré – YoonOh se puso de pie y lo enfrentó, pero uno de los guardaespaldas lo sujetó para que no se acercara más al presidente – tendrá que irse sin él, no le voy a entregar a mi esposo – Changmin comenzó a reír.

-¿Para qué quieres mantener a mi hijo a tu lado?... Ya no conseguirás nada utilizándolo, devuélvemelo.

-¡Nunca! – YoonOh forcejeaba para soltarse, pero aquel hombre sólo lo sujetaba con mayor fuerza, internamente rogaba para que Ten y Taeyong tardaran en llegar, de esa manera Lee Changmin no se lo llevaría – Admito que antes lo único para lo que necesitaba a Taeyong era para vengarme, pero ahora...

-¿Te enamoraste? – el CEO Lee volvió a reír – No pienses que voy a creer en eso, no voy a permitir que mi único hijo permanezca al lado de un hombre como tú.

-¡Estoy diciendo la verdad! – la desesperación se apoderó de YoonOh, estaba por perder al amor de su vida – Me enamoré, ¡amo a Taeyong!

-No te creo – dijo Changmin con frialdad, le hizo una seña al hombre que sujetaba a YoonOh, y este con fuerza hizo que se sentara frente al escritorio – Ahora escúchame muy bien, esto de aquí... – sobre el escritorio frente a YoonOh, colocó una carpeta con un documento muy importante – es una sucesión de derechos, aquí dice que te estoy entregando la empresa de tu padre sin pedirte nada a cambio, esa empresa por la que tanto has peleado está a tu alcance.

-¿Por qué está haciendo esto? – preguntó sorprendido, pero todo en esa situación no le gustaba nada.

-Es obvio, YoonOh, si antes me odiabas sin ser yo el culpable, esta vez te voy a dar verdaderas razones para que me odies – Lee Changmin lo miró con severidad, aquella aparente tranquilidad que mostró en un inicio desapareció, y ahora en su mirada se podía distinguir la amenaza y el peligro que representaba ese hombre – Firma y tendrás de regreso la empresa que tanto quieres, además mantendrás lejos de la cárcel a tus amigos y a tu hermano.

-¡¿Qué?! – intentó ponerse de pie, pero el silencioso guardaespaldas lo obligó a seguir sentado.

-Lo que oíste, si te niegas a firma tú y tus cómplices se irán a prisión por secuestro, y te aseguro que me encargaré de que ninguno de ustedes salga de ahí.

-¿Me está amenazando?

-Sí.

YoonOh no había pensado en el riesgo en el que había puesto a sus amigos y a su propio hermano, ahora se encontraba atado de manos, si se negaba a firmar y aceptar las condiciones de Lee Changmin todos irían a prisión por su culpa, pero si aceptaba perdería para siempre a Taeyong.

¿Cuál sería el riesgo que tomaría?

Lo cierto era qué en ambos casos él salía perdiendo, porque cualquiera que fuera su decisión al final, perdería a Taeyong.

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Gerib: ¿Ey, qué onda lectoras? Yo me ausento dos días y ya siento que ha pasado un año y me han abandonado la historia. Dramática modo: ON... ¡¡En compensa les regalaré otro capítulo más, las amo, corazoncitos!!