Capítulo 41

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Por un momento, Taeyong se permitió ser débil, dejarse llevar por la sensación que los labios de YoonOh le provocaban, pero fue hasta que separaron sus labios por falta de aire que Taeyong lo alejó.

-Me amas... Me sigues amando – dijo YoonOh con una sonrisa.

-Por supuesto que no... no te creas tan importante para que después de seis años yo siga sintiendo algo por ti – Taeyong desvió la mirada y llevó sus manos a los labios, aun sintiéndolos palpitar por el intenso beso.

-La forma en que respondiste al beso me dice la verdad que tú no quieres pronunciar... Me sigues amando.

-Por favor, YoonOh, sólo fue un beso, no le des tanta importancia – dijo él fríamente.

-Un beso que respondiste con la misma intensidad.

-Un beso como el que me dio Doyoung hace mucho tiempo – YoonOh frunció el ceño al recordarlo.

-Estás siendo cruel, Taeyong.

-No más de lo que tú fuiste conmigo – se cruzó de brazos y miró a YoonOh con seriedad – Acabemos con esto de una buena vez, di lo que tengas que decir para que pueda irme.

-De acuerdo – respiró profundamente – ...Te fuiste de esta casa herido, molesto, odiándome... – Taeyong no respondió, sólo bajó la mirada. No quería llorar de nuevo, se negaba a llorar de nuevo. Si bien era cierto qué nunca pudo olvidar a YoonOh, no quería volver a ser lastimado por él, debía ser fuerte y mantenerlo alejado – Recuerdo tu mirada llena de dolor cuando te dije que te fueras, que ya no te amaba... Era la misma mirada de dolor que yo tenía cuando te fuiste.

-¿Te das cuenta qué lo que dices no tiene sentido?... ¡Me echaste de tu vida! ¿Por qué sufrirías tú?

-Porque si te dije todo eso fue porque me obligaron – YoonOh caminó hacia la ventana y miró el cielo nocturno lleno de brillantes estrellas – Mi amor es tan grande que nunca te hubiera dejado ir.

-¿Entonces por qué lo hiciste?

-Tu padre me amenazó – giró para mirar la expresión de incredulidad en su delicado rostro.

-¿Qué?... YoonOh, no puedo creerlo – dijo molesto – Después de tantos años sigues igual, sigues siendo un hombre rencoroso que sólo quiere venganza. Ya tienes la empresa, deja a mi padre en paz.

-¡Es él quien no me ha dejado tranquilo durante seis años!... Desde que puso un pie en esta casa, se ha encargado de hacerme la vida imposible.

-Desde que me fui con él me aseguró que no te haría nada, me hizo jurar que si yo no te buscaba todo quedaría olvidado, no haría nada en tu contra por lo que tú hiciste conmigo.

-Es más claro que mintió – YoonOh se acercó a él y lo tomó de las manos – Yo era capaz de defenderte hasta la muerte, voluntariamente no habría dejado que te arrebataran de mi lado, pero tu padre me tenía atado de pies y manos con sus amenazas.

-YoonOh, eso es...

-Me dijo qué si yo no te dejaba ir y hacía que tú te desilusionaras de mí, me enviaría a prisión por secuestro... Yo hubiera ido gustoso a prisión si sabía que tú esperarías por mí, pero mi hermano y mis amigos estaban envueltos en todo esto. Si yo iba a prisión, ellos también irían. No podía permitir eso, fui yo quien los había involucrado, tenía que ser yo quien los salvara.

-Y me sacrificaste a mí – Taeyong se soltó y dio un paso atrás – Sacrificaste a nuestro hijo.

-Taeyong...

-Quiero irme, no quiero seguir aquí – intentó ir hacia la puerta, pero YoonOh lo detuvo – Mientes, estás tratando de ponerme en contra de mi padre.

Entre el Amor y el Odio - Jaeyong (ADAPTACIÓN)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora