THYSÍA |KOOKV|

●Capítulo 44●

- Oye... -JungKook subió a la cubierta después de unos minutos en los que esperaba a que el mestizo bajara y lo hiciera picadillo con una espada, pero no, y esa quietud que mostró el ateniense después de verlo besando a YoonGi lo perturbó más de lo que esperaba, se dirigió hacia el timón en donde el azabache ahora bebía de la botella que había dejado Dioniso con anterioridad. Se percató de que el barco tenía ahora arbustos pequeños entre la barandilla y uvas perfectas decoraban casi cada ramita de la popa - Esto... ¿De dónde salieron los arbustos? No... no importa... lo que viste allá, puedo explicarlo.

- ¿Vas a explicar ese beso? -TaeHyung lo miraba con una ceja levantada y un brazo reposando vagamente en el timón - ¿Qué excusa me vas a dar? Sé que no soy la persona correcta para reclamar después de lo que hice, pero lo que tu hiciste no tiene sentido.

- Quería que estuviéramos a mano.

- A mano.

- Si... además que después de todo esto seguramente tendrás a muchos otros que te acompañen por las noches, YoonGi me dijo que cosas así pasarían cuando te conviertas en rey y yo... -el menor escupió el vino de su boca y se volvió hacia JungKook con el ceño fruncido, limpiando la bebida de su barbilla y mostrando la mayor cara de indignación posible.

- ¡¿Y tú le creíste?! ¿Crees que te haría algo así?

- Yo... -acarició su nuca con una mano y se sonrojó más por la pena que por otra cosa - Él dijo que eso hacían todos los reyes y sonaba sincero, recuerdo a Minos teniendo a muchas amantes...

- Oh por todos los dioses del Olimpo... escucha -TaeHyung se armó de paciencia, dejó a un lado la botella semi vacía y mirando a JungKook a los ojos y sosteniendo su mano entre las suyas negó con la cabeza lentamente -No debes creer lo que cualquier persona te diga, ¿entendido? YoonGi dijo esas mentiras solo para separarnos, puede que sea cierto que los reyes acostumbran tener a más de un amante pero yo no seré así jamás, estoy bien contigo, tú eres todo lo que necesito.

- Soy tan estúpido... -JungKook se cubrió el rostro con vergüenza, sintiéndose tan increiblemente ingenuo que hasta daba lástima. TaeHyung lo tomó de las mejillas y desmintió aquellas palabras.

- No eres estúpido, es normal que aún no comprendas algunas cosas. Estuviste encerrado mucho tiempo, pero yo me encargaré de que veas el mundo con otros ojos, tendremos muchas oportunidades de hacerlo... más de la mitad de nuestra vida para eso. Recuerda que YoonGi en el fondo quiere dañar nuestra relación, no escuches sus palabras, ¿Bien?

Se besaron entre el olor a uvas, los labios de TaeHyung sabían a un exquisito vino y a JungKook ese sabor le agradaba, no lo había probado antes y sabía exquisito en la lengua de TaeHyung. Sus labios se movían con tranquilidad, sintiendo la piel del otro con parsimonia y saboreando ese licor dulce que los envolvía.

- Sigo pensando en que soy un verdadero idiota, ¿Por qué no puedo ver la maldad entre las palabras de YoonGi?

- Ya ya... los dos somos unos idiotas sin remedio, debe ser por eso que nos queremos tanto, ¿no? - sonrieron mutuamente, sus manos entrelazadas mientras JungKook asintió mostrando los dientes cuando su sonrisa se expandió.

- Te quiero, TaeHyung.

- Yo también, pero debemos tener más cuidado con este tipo de cosas -suspiraron de alivio cuando la tensión entre ellos desapareció, dándole espacio a la calidez a la que estaban acostumbrados - Tengo un plan, necesito que me ayudes porque es lo único que podemos hacer para alejar a YoonGi -el castaño abrió la boca sorprendido, con las cejas levantadas esperando a oír instrucciones - Debemos ser buenos con él al igual que antes, y mañana, cuando anochezca de nuevo llevaremos a cabo el plan, pero tiene que salir bien de principio a fin, si no él sospechará.