Nella tua bocca porterai

CAPITULO 2

Abbacchio estaba en su departamento de siempre, había una botella de vino blanco en su mesa y al lado un florero con unos tulipanes.

Se encontraba ya un poco ebrio y mirando una foto ya maltratada y de años. Mientras tomaba otra copa de vino y miraba a los tulipanes con cierta nostalgia y tristeza.

De la nada aventó la copa y se recargo sobre la mesa, soltando la foto y llorando desconsoladamente.

En ese momento llego Bruno Bucciarati y corrió donde se encontraba su amigo al escucharlo llorar pensó que había cometido alguna tontería. Este solo lo encontró recargado llorando en la mesa. Levanto los vidrios rotos de la copa y la foto.

- Abbacchio amigo ¿Qué te sucede? ¿Hace días que no se de ti? No has ido a trabajar, es más ni en el bar de costumbre te han visto, ¿Qué sucede?

- No lo sé Bruno, es solo que a pesar de tanto tiempo no puedo dejar de pensar en ella.

- ¿La chica con la que estas en la foto?

- Si ella, después de todo sigo pensando en (T/N). sabes tenía todo con ella y como un estúpido lo deje solo por una aventura, una mujer que me dejo en la calle, si pudiera volver el tiempo, correría detrás de (T/N). Moody Blues.

En ese momento Abbacchio llamo a su stand y este se transformó en ti con ese vestido blanco y los tulipanes de aquel día tan gris para ambos. Y recreo la escena donde él te dijo que no te quería y tu salías de la casa corriendo.

Bruno pudo ver todo y por fin entender la tristeza e inquietud de Abbacchio. Te reconoció pero no le dijo nada a su amigo que ya estaba bastante mal hablándole a su stand y tratando de detenerlo pidiéndole que no se fuera.

- Abbacchio contrólate por favor, ya trata de volver en ti, necesitas recuperarte. Recuerda que Giorno ya no te va a permitir que no asistas a las reuniones y dijo que ya no te quiere ver ebrio.

Abbacchio entendió lo que su amigo decía y si volvía a discutir con Giorno este podía quitarle su cargo de Capo y adiós a la única vida y amigos que conocía.

- Tienes razón Bruno, solo es que a veces me ganan los recuerdos y no puedo, estoy pagando lo que le hice a (T/N) es mi cruz, mi karma.

- Abbacchio ya déjate de tonterías y mejor te ayudo a limpiar tu departamento que con tantas botellas ya ni el piso de la cocina y sala se ve. Además tenemos que estar presentables para reunión con Giorno y su hermana.

- A mí me vale Giorno y su hermana además no es obligatoria solo me presentare cuando de verdad se a trabajo.

Ambos se pusieron a limpiar aunque Abbacchio se sentía triste y vacío, trataba de estar bien, una corazonada le decía que todo iba a cambiar para bien.