Nella tua bocca porterai

CAPITULO 30

- Leone, que sorpresa- lo abrazaste

- Mi pequeña (T/N) no deje de extrañarte, siempre estaba pensando en ti

- Qué bueno que regresaste.

- Tenía que hacerlo por ti.

Se abrazaron y disfrutaron la serenata, de hecho Abbacchio te canto la de sabes una cosa a su poco español. Fue lindo verlo cantar de esa manera, y vestido de mariachi.

Al terminar entraron a la casa y Minnie se llevó las flores.

Cuando viste bien a Abbacchio notaste que tenía varios golpes y heridas.

- ¿Leone no te fue del todo bien o sí?

- Tranquila mi pequeña (T/N), estoy bien, todo lo que quería era llegar para verte, llegue a medio día pero pase a mi casa a bañarme y conseguir el mariachi, ¿Sabes lo difícil que es conseguir un mariachi en Nápoles?

- Me imagino, y muchas Gracias Leone. Déjame curarte por favor no puedo verte así, Iron Maiden

Le hablaste a tu stand y este tomo un adorno que estaba en la mesa de la sala, y con ese curaste a Abbacchio, le acariciaste la mejilla y en ese momento él se acercó a ti.

- ¿Me extrañaste pequeña?

- Todo el tiempo Leone

Se fueron acercando poco a poco, terminaron besándose, el beso fue tan dulce y sincero que no pudieron evitar notar la presencia de Giorno y Mista en la entrada.

- Emm, creo que interrumpo.

En ese momento se separaron rápido, y Abbacchio se levantó.

- Disculpa Giorno, pensé que ya podía venir a ver a tu hermana, hola Mista ¿Cómo estás?

- Si, podías venir a verla no a besarla- lo dice en un tono celoso.

- Amore mío, tranquilízate por favor ya hizo lo que pedias

- Tienes razón Mista- le dijo Giorno. (T/N) podemos hablar en privado por favor.

- Claro hermanita vamos.

Salieron de la casa.

- (T/N) no quiero que te emociones aun, cumplió lo que le pedí y yo cumpliré mi palabra, pero quiero que te cuides mucho, no quiero verte mal por culpa de Abbacchio.

- No te preocupes hermanito las cosas con calma lo prometo.

- Puedes decirle a Abbacchio que venga por favor.

En ese momento entraste a la casa y le dijiste a Leone que fuera con Giorno.

- Hola Giorno, ¿hice algo mal?

- Si y no, cumpliste tu misión y por lo visto ella ya te curo, pero no te dije que vineras enseguida a verla.

- Lo siento Giorno, es que ya la extrañaba y quería verla.

- Ok te entiendo, y voy a cumplir mi palabra no los voy a molestar solo que no quiero que la lastimes o vuelva a suceder algo así.

- Claro que no Giorno.

- Bueno vamos a Cenar.

Estuvieron con Giorno y Mista, incluso ya bromeaban un poco Giorno y Abbacchio.

Llego la hora de que se fueran y ustedes volvieron a quedarse solos.

- Mi pequeña (T/N) me tengo que ir, ¿Puedo pasar mañana para llevarte a tu trabajo?

- Claro mi Leone, si gustas te espero a las 7 y así podemos estar un rato platicando.

- Perfecto aquí nos vemos