Un choque de amor [NIALL HORAN]

Capitulo 22

Te despertarte y te preparaste rápido, te habías quedado dormida. Llegaste a la oficina justo a tiempo. En cuanto entraste te enseñaron tu mesa donde trabajarías, te sentaste y sacaste de tu bandolera el portátil y lo encendiste. Empezaste a escribir nuevas preguntas para los chicos, pero no podías concentrarte, el recuerdo de Niall se te venía a la cabeza. Decidiste tomar un descanso para despejarte un poco.

-¿Catalina Lagos? –preguntó alguien a tu espalda.

Te diste la vuelta y viste a un chico.

-Sí, ¿qué pasa?

-Te mandan esto

El chico sacó un ramo con 6 rosas rojas y te las dio. Lo observaste y viste que llevaba una nota, luego la leerías.

-Gracias, -dijiste- ¿tengo que firmar algo?

Él rio

-No soy el repartidor, trabajo aquí, lo que pasa que como no estabas cuando lo trajeron pues lo cogí yo.

-Entonces, gracias de nuevo –dijiste sonriendo- Puedes llamarme Lina, ¿y tú eres?

-Andy.

-Encantada, soy nueva aquí, y la verdad que no conozco a casi nadie… Bueno a nadie

-El gusto es mío. Si alguna vez necesitas algo, me avisas, ¿vale?

-Claro.

-Bueno, me tengo que ir a hacer cosas, adiós.

Te despediste y te volviste a sentar en tu mesa. Miraste el ramo, era muy bonito, cogiste la nota y la leíste

-“Una rosa por cada mes que hemos estado separados.”

No ponía de quien era, pero no te hacía falta saberlo, Niall. Te costaba quitártelo de la cabeza, si encima te hacía estas cosas, ¿cómo lo harías?

No podías concentrarte así que dejaste las cosas allí y bajaste a tomarte algo. Paraste en un puesto de cafés, y fuiste a comprar uno. El señor que estaba allí te lo puso y fuiste a buscar el dinero para pagarle. Rebuscaste en tus bolsillos, se te había olvidado la cartera en la mesa.

-Esto… -comenzaste a decirle al hombre

-Tome –dijo alguien al lado tuya, pagando el café

No podía ser verdad

-Hola, ¿está bueno? –preguntó Niall como si nada

-¿Qué haces aquí? –le preguntaste directamente

-Ya te lo he dicho, reconquistarte –dijo tranquilo

-¿Por qué?

-Porque te quiero.

-¿Quieres que quedemos esta noche? -siguió

Eso te pilló por sorpresa.

-¿Cómo?

-Pues eso, quedar esta noche.

-No puedo…

-¿Por qué no?

-Pues porque no

-¿Y por qué no quieres quedar conmigo esta noche?

-Porque no…

Él se acercó a ti.

-¿Y no hay ninguna forma de que te pueda hacer cambiar de opinión?

Lo dijo de una forma en la que estaba irresistible.

-No… -empezaba a tenerte bajo control.

-¿Ninguna, seguro? –volvió a decir de la misma forma que antes

-Seguro –conseguiste volver en ti y lo aprovechaste- Bueno, gracias por el café, pero me tengo que ir.

Empezaste a alejarte.

-Te lo dije una vez y te lo vuelvo a decir, haré de todo para recuperarte –gritó

Te volviste a sonrojar y subiste a la oficina de la revista. Volviste a intentar hacer cosas sobre la entrevista de los chicos. Finalmente lo dejaste, no podías concentrarte con todo el asunto de Niall.