MAFIA (SasuSaku)

III

Sasuke estaba furioso y yo rogaba por todos los cielos que por favor no me hiciera algo, aún así no era hora de acobardarme.

Quien sabe que cosa podría hacerme éste loco.

- Patrón. -Saludo el hombre, Sasuke solo lo miró como si hubiera cometido el peor error de su vida.

- Te dije que hicieras solo una cosa, maldita sea.. -El tipo solo apretó su mandíbula, estaba nervioso. - al menos pudiste impedir que escapara.

- ¡Ya dije que solo quería salir! No quería estar encerrada.

- Disculpe patrón, pero la señora se echó a correr y pues la agarre bien a tiempo.

"Te deseo la peor plaga maldito sapo."

Sasuke le dedicó una seña y su sapo me soltó, en cuanto este desapareció, él posó su penetrante mirada en mí.

- Creo que tenemos que hablar, querida mía. -Su voz sonaba dura.

- Quería salir, es todo. -Dije mirándolo a los ojos. - Estaba cansada del encierro.

- ¿Y para eso te largas a correr? Vamos Saku, no puede engañarme -rió. - te estoy dando la oportunidad para decirme la verdad a no ser que quieras empeorar las cosas.

- Tu estúpido sapo me estaba molestando, por eso quise correr, creí que quería hacerme algo. -Mentí, Sasuke tensó su mandíbula a su vez que frunció el entrecejo.

- Lo voy a matar. Sabía que no podía confiar en él. -Dijo mirando en otra dirección. - ¿Qué te hizo?

"¡Mierda, mierda, mierda Sakura! ¿Qué hiciste?"

- C-cuando quise salir a caminar me miraba obsceno y luego se acercó a decirme cosas, ya sabes. -estaba que moría de nervios, yo solo rezaba para que no me trajera al sapo para confrontarlo, estaba temblando. - Pero por favor no le digas nada, Sasuke.
-Lo tomé del brazo y me miró dubitativo. - Sé que va a dejarme como una mentirosa y tengo miedo que quiera volver a hacerme algo, ayúdame por favor. No quiero que se acerque a mi. Por favor...

Supliqué, ante el miedo a ser descubierta y que no me creyera no tuve otra opción que abrazarlo, debía comprarlo y así cualquier cosa que dijera no fuera válido ante mi palabra.

- Tranquila, te creo. Sé que no me mentirías ¿o si? -Acuno sus manos en mis mejillas para observarme por varios segundos.

- Jamás.

- Haré algo para que no vuelva a molestarte, vamos a comer algo, debes estar hambrienta.

Yo solo trague duro, no estaba bien mentir pero tenía que salvar mi pellejo, así implique la vida de otra persona. Ahora yo soy prioridad.

Nos adentramos a la casa para así poder comer tranquilamente, estaba todo preparado, quizás ellos ya sabían sus horarios.

Por un momento se me heló la sangre y puedo decir que el cuerpo ante el pensamiento que tuve.