Sakura se verá atrapada entre la indecisión de entregar su corazón y aceptar ser la futura reina de la mafia, además de matriarca del Clan Uchiha o denunciar al líder y negociar su libertad absoluta a cambio de entregar a Sasuke en bandeja de oro.
H...
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No estaba segura de cuanto tiempo estuve mirando hacía un punto fijo, sumida entre mis recuerdos, pensando en tantas cosas, buscando lógicas a todo aquello que se me hacía incomprensible. Pequeños fragmentos llegaban a mi, nombres, fechas, personas que jamás había conocido o tal vez sí.
Con sutileza cerré los ojos, dejando fluir todo lo que pensaba hasta encontrarme con la mente en blanco, sintiendo tan solo un vacío total.
- ¿Sabes? Estoy sorprendida, no creí que ustedes terminarían juntos.
- ¿Uh? -fije mi vista.
- Vamos, no finjas. -insistió de nuevo.
- Bueno, en un principio me costó reconocer pero me decidí por aceptarlo. -fije mi cabello detrás de la oreja, mientras ella trenzaba su largo cabello.
- Dices que te costó reconocer cuando es muy obvio que a ti se te notaba pero a él no, por eso no creí que iban a estar juntos, pensé que llegaría a ser solo un enamoramiento y que él sería eternamente soltero; veo que estuve equivocada, ya que detrás de esa gran cara de culo, dentro de ese corazón, había mucho amor. -me quedé pensativa un instante, ladeo su cabeza con suavidad antes de decir algo más. - Estoy segura que serán muy felices, dieron un gran paso en su vida.
- Lo sé, ni me lo digas, no puedo creer que ha pasado tiempo, todo se siente como si hubiese pasado ayer.
- Oye, ¿te puedo preguntar algo?
- Claro, dime. -animé.
- ¿Han pensado en tener hijos? -por un instante casi escupí mi café, ella comenzó a reír. - No sé por qué algo me dice que si y que muy pronto tendremos un nuevo miembro. -dijo lo último soltando una gran risa, apretando mis manos, como si estuviera tan certera de sus palabras.
Cerré los ojos y cuando los abrí, todo a mi alrededor había desaparecido, con ello, la rubia de mis recuerdos.
- Ino... -murmuré. - ¡Ino es...! —mis ojos se abrieron a más no poder ante el recuerdo que tuve, Dios mío, ¿cómo he podido olvidarla?
Un pequeño mareo me hizo recostarme en la cama, luego de la discusión con Sasuke, él creyó que era mejor alejarse para poder calmarse; me prometió que luego hablaríamos, algo que me generaba ansiedad.
Miré el reloj de pared 21:37, volví a cerrar los ojos y sumirme en otros recuerdos pero era imposible, nada más llegaba.
"Déjalo fluir, para que estos lleguen a ti."
O al menos eso me recomendó Orochimaru...
- ¿Orochimaru? -pensé confundida.
Creo que debo de dejar de darle un poco de vueltas al asunto y hablar con Sasuke, pero ¿cómo habría podido ser capaz de olvidar a la persona que marcó un evento tan importante en mi vida?
