Sakura se verá atrapada entre la indecisión de entregar su corazón y aceptar ser la futura reina de la mafia, además de matriarca del Clan Uchiha o denunciar al líder y negociar su libertad absoluta a cambio de entregar a Sasuke en bandeja de oro.
H...
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Habían pasado unos pocos minutos desde que Sasuke nos había encontrado, digo nos por que me acababa de informar que ya tenían a Karin y venía en un coche aparte con uno de sus subordinados. Apreté mis labios en una fina línea, no quería empezar a llorar como si fuera una niña, trataba de ahogar esas lágrimas, no quería mostrarme débil frente a él, no ahora y menos cuando mi amiga probablemente me estuviera necesitando más que nunca.
— ¿Por cuánto tiempo más creías que ibas a estar lejos de mi? —Preguntó aún enojado. — Fuiste una imprudente, eres realmente tonta, muy tonta. Y encima tengo que venir a sacarte exactamente de la casa de un agente de la DEA.
Apreté los puños con fuerza, estaba cansada de él.
— ¿Y tú quién mierda crees que eres para hablarme así, eh? Me dices imprudente y tonta a mi, ¡tú, un jodido narcotraficante de mierda! Solo te dedicas a arruinar vidas ajenas con todas tus malditas porquerías, tienes las manos manchadas con sangre de gente corrupta e inocente también. Eres un grandísimo desquiciado. —escupí todo el veneno que tenía atravesado, tenía tanta amargura atravesada en el pecho y pensar que en algún momento me sentí culpable.
— Te haré una recomendación, retira toda tu mierda dicha antes de que..
— ¿De que qué? ¿Ah? ¿De que me metas un puto balazo? Estas dolido estúpido, date cuenta, tengo razón. —Su mirada de volvió oscura, sus ojos echaban furia a quien los mirase.
— Sí, tienes razón, me he manchado las manos de sangre desde que tengo memoria, fabrico esas "porquerías" como dices tu y ¿sabes qué? Me importa una mierda cuantas vidas se arruinan, o ¿crees que tu que yo los olvido a consumir? ¿Acaso les meto un arma en la cabeza? No, cada quien elige como termina, no es mi culpa que la droga los vuelva adictos, ese no es mi problema ni mi puta incumbencia. De una vez te digo que cierres el hocico antes de que pierda la paciencia contigo, no me conoces y no sabes de lo que soy capaz. —amenazó Sasuke.
— ¡Vete al infierno! A mi nadie me viene a amenzar. —me saqué el cinturón de seguridad e intenté abrir la puerta del coche.
— ¡Ven aquí, estas loca! —Gritó él mientras me jalaba del brazo y volvía a cerrar la puerta.
— Loco serás tú. —acusé y me abalancé sobre el volante, desequilibrando el coche.
— ¡Estás cavando tu tumba, idiota! —volvió a gritar, no le tomé importancia, Sasuke estiró de mi cabello causando que yo terminara por arañar su perfecto rostro. — Sakura, no quiero terminar lastimándote. — ignore su advertencia e intenté volver a abalanzarme sobre el volante pero esta vez sentí un fuerte codazo sobre mi nariz y labios.
"Estas me las vas a pagar".
Sentí la sangre espesa y caliente caer rápido en mi rostro, el dolor y el ardor eran horribles.
