Para poder olvidar

capitulo 5

–mierda, mierda, mierda– repetí mientras cerraba los ojos con fuerza y mi amiga trataba de no esbozar una sonrisa burlona.

¿Qué había alcanzado a escuchar masón? ¿En qué momento había llegado? ¿Escucho la estúpida historia que contó su hermana? Todas estas preguntas estaban en mi cabeza.

¡qué demonios!

cuál es la probabilidad de que el chico que te ha gustado toda la vida escuché fantasías locas de su hermana, porque si masón me ha gustado siempre-tal vez no toda la vida, pero si hace mucho tiempo- fue la primera figura masculina -además de mi hermano- que vi mientras crecía.

–petit frère–dijo mi amiga levantándose a saludarlo yo todavía no quería moverme, había tanta vergüenza en mí.

Mason sabia hace mucho tiempo que él me gustaba, un día estábamos todos juntos y a mi amiga se le salió "accidentalmente", nunca había pasado algo entre nosotros y no creo que fuera a pasar algo.

–si te sirve de consuelo no escuchamos nada de lo que fuera que hablaran– susurro mi hermano llegando a mi lado – así que levántate y deja de ser tonta

–no soy tonta, tú lo eres–si realmente yo no era alguien muy madura, por esa razón Samantha era la más "cuerda" de nosotros.

–calma gatito, no escuchamos tu vergonzosa charla- dijo masón, Dios... que alguien lo calle pone mis nervios de punta.

O tal vez tus hormonas

Maldita conciencia, tienes que estar de mi lado.

–bueno lo que sea masón, nos vamos – dijo mi amiga empezando a jalar mi brazo para salir del jardín

Subimos directamente a el cuarto de mi mejor amiga, su cuarto era realmente lindo tenia algunos posters de distintas bandas y artistas que nos gustaban, fotos randoms, fotos de su familia y fotos conmigo, en una de sus paredes había un hermoso dibujo que habíamos hecho allí. Su cama estaba pegada a la ventana- la cual siempre observaba por las noches-, un escritorio con su laptop y algunas cosas del colegio. Ella era la persona más ordenada que alguna vez había conocido –muy diferente a mí – era perfeccionista y algunas veces teníamos discusiones por eso, nada del otro mundo.

–cuidare lo que digo la próxima vez- dijo mi amiga sentándose en su cama– Ava podíamos sentir la incomodidad en el aire– soltó una carcajada

–Dios, nunca había estado en un lugar tan incómodo– le dije sentándome a su lado– ¿Qué haremos ahora?

– podemos ver películas con un final súper trágico o podemos leer un libro con un final súper trágico

–o simplemente – dije lentamente mientras me levantaba de la cama, conectaba mi celular a un parlante que en el escritorio–escuchamos música.

–me gusta tu plan–dijo sonriendo.

Coloque la lista de canciones que teníamos juntas, la primera que sonó fue easer de 5 seconds of summer probablemente esta era nuestra banda favorita. Empezamos a bailar en su cama y cantar, se escuchaban más como gritos, pero realmente no importaba.

La música – al igual de los libros – era nuestro método de escape de la realidad o al menos a mi parecer, puedes oír una canción y gustarte mucho, pero va a haber un momento en el que verdaderamente la escuchas va a ser todo muy diferente, la música era supremamente especial para mí en el momento que me di cuenta de eso.

Mi conexión con la música empezó cuando tenía alrededor de nueve años. Mis abuelos amaban la música en su época obviamente no había las herramientas tecnológicas que tenemos ahora. ellos me enseñaron diferentes bandas y cantantes que ellos escuchaban.

Cuando mi abuelo murió, mi abuela me regaló el tocadiscos que tenían como recuerdo de lo que él me había enseñado. Ella me enseñó a usarla y a manejarla correctamente, desde entonces cada que mis padres discutían yo me perdía en la música, luego el tocadiscos se dañó y me regalaron mi primer celular. Cuando cumplí quince mi abuela me regaló otro más pequeño de color negro, no lo uso mucho por miedo a dañarlo.

–Switching into airplane mode again We're not alright but I'll pretend Press my cheek against the glass Just be good 'til I get back- empiezo a cantar una de nuestras canciones preferidas

The ground disappears I hold back the tears I check my phone to see your face Staring back as if to say Don't worry, you won't be lonely- continue

Can you tell me why, my love? Can you tell me why? I hold on to you and you hold on to me

Can you tell me why, my love? Can you tell me why? I hold on to you and you hold on- cantamos juntas.

–no las aman por esta gritando como locas–dijo una voz y nosotras gritamos y caímos de culo al piso, yo amortigüe toda la caída.

–¡que mierdas les pasa! –exclamó delicadamente mi amiga mientras les daba una mirada furiosa– podrían haber golpeado

Yo me ponía de pie y me sacudía

–¿Cuánto tiempo llevan ahí? – pregunte mientras ayudaba a parar a mi amiga

–desde que empezó why won't you love me, excelente canción de hecho– dijo mi hermano.

Mason mientras tanto trataba de no burlarse de la caída de mi amiga

–solo veníamos a decirte que ya nos vamos– continuo Sebastián– te espero abajo–sin decir más salió del cuarto

–la próxima golpeare, aunque me gustaría volverlas a ver en el piso– dijo masón riendo y mi amiga le lanzo una almohada

– creo que me voy – le dije recogiendo mis cosas

–te veo mañana ma chère- dijo mientras me lanzaba un beso y yo bajaba para subir al carro con mi hermano

El camino a casa fue tranquilo Sebastián puso la radio por lo tanto no hablamos mucho. Cuando llegamos vimos a Eloísa fuera de la casa fumándose un cigarrillo, no era raro en ella lo hacía cuando estaba estresada no era muy saludable, pero fue un vicio que cogió muy joven.

–¿Qué pasó? – pregunto Sebastián– hace mucho no haces eso.

Él tenía razón llevaba un tiempo sin hacerlo era un tanto extraño verla haciéndolo otra vez.

–ustedes que creen? – la rabia y la decepción en su voz eran claras.

Y en ese momento supimos que había pasado.