Salí de los vestuarios nuevamente con la ropa con la que había venido a la escuela, afuera me estaban esperando Samantha y Dante. Le contaría a Samantha lo que paso con jayden cuando estuviéramos en camino para mi casa.
–podemos irnos–les dije
–por fin, muero de hambre–dijo mi amiga pasando su brazo por mi hombro.
Pasamos el descanso en la cafetería hablando un poco, luego cada uno fue a sus últimas clases. No vi a mi hermano, masón o jayden el resto del día eso me aliviaba un poco.
En la salida nos despedimos de dante molestándolo con lo de comprarse una chaqueta de cuero, luego empezamos a caminar a mi casa.
–deberíamos regalarle nosotras la chaqueta–dijo Samantha.
–si –dije
–qué te pasa? Has estado distraída desde que te fuimos a buscar
–Umm si, te voy a contar porque... tengo que hacerlo.
–claro o si no te mato maldita–dijo poniendo sus manos alrededor de mi cuello y me sacudía ligeramente
–no tienes que hacerlo –suspire antes de continuar–volví a hablar con jayden.
–pero que mierda Ava?
–déjame explicarte, ayer estuvo molestándome, pero no le tome importancia– jugué con mis manos nerviosa
–entonces...
–por Dios no me interrumpas, lo hace todo más difícil.
–está bien continua.
Le conté lo que había pasado antes de que entrara a clase de teatro y como ahora tendría que compartir esa materia con el
–Ava sabes que no es bueno para ti
–lo se
–acaso olvidas lo de hace dos años? –negué–entonces que pasa.
Mientras mi amiga empezaba a regañarme como a una niña, mi mente producía todos los recuerdos
Flashback dos años atrás
algún día del mes de febrero.
Estaba con un grupo de personas que no conocía además de jayden, llevábamos saliendo aproximadamente tres meses y todavía no me acostumbrada a eso de estar saliendo tan seguido y socializar con otras personas, el me hacía salir de mi circulo de amistad donde solo estaba Samantha, su hermano masón, y mi hermano era algo triste, pero me sentía bien así.
Estaba sobre sus piernas mientras él tenía su mano en mi espalda mientras la movía, estaban contando algunos chistes de mal gusto un poco racistas y machistas, me sentía incómoda. El grupo estaba conformado por cinco chicos y otras dos niñas, sabia el nombre de las dos niñas que estaban ahí, me lo habían dicho apenas llegue
Madison tenía unos quince años, su hermoso cabello largo rubio suelto detrás de las orejas, tenía un perfecto delineado negro que resaltaba el color azul de sus ojos, llevaba puesto un vestido corto de color rojo que se pegaba perfectamente a su voluptuoso cuerpo, estaba sentada en las piernas del que creía que era su novio.
Chloe tenía la misma edad de su amiga, una morena con un hermoso cabello negro con crespos, sus ojos del mismo color que su cabello, es su cara no había rastro de maquillaje, pero era igual de hermosa que su amiga, llevaba un vestido blanco que dejaba sus hombros al descubierto sus clavículas se marcaban, ella estaba sentada frente a mí así que la podía detallar mejor.
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Para poder olvidar
Teen Fictionno solo te rompes por amores. sin embargo, Ava no lo supo hasta que fue muy tarde y todo alrededor de su mundo se destruyó, arrasando con su mundo y dándose cuenta de que nunca le prestó la atención suficiente a las personas que le importaban. Esta...