capítulo 15

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Viernes 4 de febrero 2019

El miércoles a primera hora le había contado a Samantha no se enojó y tampoco puso problema alguno, estuvo feliz de que pudiera cerrar ese capítulo de mi vida y pudiera seguir sin atormentarme por eso.

Eran las doce y media e íbamos saliendo de clases, en la puerta principal me esperaba mi amiga, su hermano y dante, iríamos a casa de Sammy y masón para hacer el trabajo de literatura–aunque faltara un mes para entregar el primer borrador–y para pasar un rato juntos.

–ya podemos irnos– dije llegando a el lugar donde se encontraba.

–¡si! Iré en la moto con dante–dijo mientras se ponía en casco y subía sosteniéndose de los hombros de mi amigo.

–suerte –dijo su hermano y ellos arrancaron –andando gatito – paso su brazo por mis hombros.

–Dios tienes que dejar de decirme así –empezamos a caminar mientras trataba de pedir un taxi

–claro que no, es algo original y tierno, es mi apodo de cariño.

–bingo –susurre al ver que un taxi se encontraba en la zona y nos recogería–es algo intenso que lo digas tan seguido

–lo sé, lo hago para molestarte –dijo y lo mire con la boca abierta, él se echó a reír.

El taxi llegó y nos subimos en él saludando al conductor e indicando por cual camino seguir.

–qué pasa con tu hermano? –pregunto masón después de un rato–hace mucho no tiene tiempo para estar conmigo

–está enamorado, tal vez algún día también sepas que es eso.

–quién ha dicho que no me he enamorado?

–nadie –levante los hombros –te has enamorado masón?

–puede que lo esté como puede que no.

–es como esos acertijos donde la respuesta es la más fácil, pero nunca lo pensaste?

–puede como puede que no

–ja, ja, ja, eres tan gracioso masón moriré de risa– el rio ante mi sarcasmo.

–lindo esqueleto, ese color te queda – dijo mirando mi ropa

Llevaba puesto un esqueleto corto color mostaza y un jean azul oscuro que llegaba a mi cintura y se ajustaba en mis piernas.

–lindo saco, el rosa te hace ver tierno

–lo sé – dijo con una sonrisa de superioridad.

–debes dejar de ser tan egocéntrico–le empuje la cabeza hacia atrás

–jamás, pequeña, jamás– se acostó sobre mi hombro y me puse nerviosa.

–tú lo has hecho Ava

–que?

–te has enamorado.

No sabía que responderle se podría decir que estuve enamorada de jayden por el cariño que le tenía, pero no era así, no sabía realmente sobre amar a otro cuando ni siquiera podía amarme a mí misma.

–no lo sé –acosté mi cabeza sobre la suya –creo que no.

El taxi nos dejó en su casa, le pagamos al conductor y en la puerta estaba sammy y dante.

–péinate un poco, loca –dijo mason, moviéndole el cabello a su hermana.

–quieto imbécil –se alejó de él–entremos, mamá llegara más tarde está en la agencia o algo así.

Para poder olvidarDonde viven las historias. Descúbrelo ahora