Para poder olvidar

capitulo 9

Miércoles 24 de enero 2019

El maldito plan de socializar y salir de mi zona de confort estaba fracasando del todo era... ¿miércoles? Creo y había hecho cualquier otra cosa en vez de socializar, tampoco había hablado mucho con Samantha había estado evadiéndome y sé que le pasa algo, pero todavía no logro averiguar que es, me siento un poco mal porque ella no me ha contado que tiene y prefiere guardárselo.

Por otro lado, mi padre volvió a casa el lunes en la tarde, ese día no estaba así que no me lo Cruce y lo he estado evitando todo el tiempo. Mi madre no ha hecho mucho, por un momento pensé que hablaríamos, pero no, ella también me evade, creo que eso se le da muy bien a las personas últimamente. He pasado tiempo con Eloísa ayudándola con trabajos de la universidad, está en su primer año estudiando artes, según me contó el primer año estudia diferentes tipos de artes y el próximo decide cual le gusta o puede cambiarse de carrera.

En este momento yendo a el salón de geografía, esta clase la compartía con Samantha, pero no la había visto en todo el día lo que me hacía pensar que no había venido. Entre al salón y me senté en una de las sillas vacías en la parte de atrás.

–hey dante– llame a uno de mis compañeros que acababan de entrar.

–hola Ava– saludo mientras se acercaba a mi lugar.

–quieres sentarte conmigo? – le pregunte, tenía que hacer amigos, además él era bueno en geografía y probablemente me ayudaría.

–claro–dijo mientras se sentaba a mi lado– y Samantha dónde está? ...Ammm lo pregunto porque siempre te sientas con ella y es raro no verlas juntas.

Dante Clayton, un chico de dieciséis años, con piel morena, unos lindos ojos oscuros, su cabello negro rizado que caía por su frente, era alto y delgado, vestía con el uniforme del colegio que se acoplaba perfectamente a su cuerpo

–no lo sé creo que está enferma o algo así... tal vez le pregunté a masón más tarde.

Me quedé un rato pensando qué le podría estar pasando a mi amiga para que se haya alejado así de mí, eso solo lo hace a veces porque siente que sus problemas son menos importantes, entonces cuando ya los tiene solucionado vuelve todo a la normalidad.

–ay no– dijo dante sacándome de mis pensamientos, voltee a ver hacia donde él lo hacía.

Hacia nosotros venía jayden Miller con sus amigos, él era el capitán de fútbol, sus ojos tenían una mezcla del verde y el azul, su cabello castaño, su nariz perfilada, sus labios rosados y su cuerpo definido lo hacían ver como el chico perfecto, sin embargo, tenía algunas horribles acciones que dañaban su facha de niño lindo.

–vaya, vaya qué tenemos aquí? – dijo apoyándose en la mesa de mi compañero– al parecer no eras tan gay como lo pensábamos– rio un poco al decirlo y sus amigos hicieron lo mismo detrás de él

Liam y Daniel, eran parecidos físicamente, lo único que cambiaba eran algunos rasgos en sus rostros. Liam tenia rasgos que lo hacían ver fuerte y maduro y sus ojos eran negros, mientras que Daniel tenía rasgos que lo hacían ver más tierno e inocente y sus ojos eran verdes,

–y al parecer tu si eres tan imbécil como lo pensé – dije mirándolo a los ojos

–pequeña ava ... como has estado? – preguntó con una sonrisa cínica en su rostro.

–mejor de lo que crees, si no te molesta estábamos bien sin tu presencia y por ahí viene tu hermosa novia– dije lo último con sarcasmo

–claro que no, ella dijo que hoy no ven...

–¡bebé! – dijo la voz chillona de Bianca mientras jayden borraba su sonrisa y se volteaba a verla