Capítulo 7

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Capítulo 7

Después de la muerte del abuelo los días transcurriendo  lentos y su ausencia dolía de la misma forma todos los días desde su partida, aunque el dolor empezaba a ser un poco más llevadero.

Después de su muerte, Luis estuvo un poco más cerca de mi no se porque.

Regrese al instituto después de unos dias y no se porque siempre terminaba regresando al auditorio.

Siempre lo encontraba ahí.

Iba caminando junto a Lauren y tan sumida en mis pensamientos que no estaba prestando atención a lo que iba diciendo.

Así que solo intento concentrarme en lo que dice pero me es imposible hacerlo.

Lauren y yo vamos rumbo al centro comercial, ya que según ella tengo que despejar la mente y relajarme un poco.

Y bueno ya ven como termine haciéndole caso y aunque ya estoy a nada de arrepentirme y regresarme a casa.

- Como te decía la película que veremos es nueva acabo d..

No termino de escuchar lo que dice y me detengo en seco cuando lo veo a la distancia.

Lauren nota que me detuve y deja de hablar de inmediato.

Brazos pálidos, cabello castaño, ojos miel.

No se porque pero mi corazón se detuvo y antes de que el se girará ya lo sabía.

Y si era el.

Luis estaba a unos cuantos metros de mi.

Mierda.... ¡Corre, perra corre!

No se porque pero pensar eso me dio muchas risa.

Intenté fingir que no lo había visto, así que agarre a Lauren por el brazo y la arrastre (literal) y seguí caminando fingiendo que no sentía su mirada clavada en mí nunca.

Y eso amigos míos, me estaba poniendo los nervios de punta, Y no se porqué.

En fin Lauren y yo llegamos a nuestro destino, el cine. Según ella debía despejar la mente y que mejor forma que ver una película de terror que te iba a dejar traumatizada por meses.

- Dos boletos para la monja.

Dijo ella muy sonriente mientras yo solté un chillido.

- ¿Que?, Como que..la..la monja ¿Estas loca?, No podré dormir en días.

Eso último lo dije bajito para que solo ella pudiese escucharme, porque cobarde pero digna.

Lauren me ignoro por completo haciéndome poner los ojos en blancos, me aleje de ella unos cuantos metros y me puse a leer las carteleras de las películas.

- Haber, haber, la monja ¿donde estas estúpida cartelera?, quiero saber por cuánto tiempo voy a estar muerta de miedo.

Seguí caminando distraída con una mano en la barbilla mientras buscada el estúpido nombre de la estúpida película.

Lo admito estaba muerta del miedo y aún no la veía.

Así que tú idea era mirar la cartelera y comprobar que no quedaremos traumatizadas por lo que queda de tiempo.

Mordí mi labio por ese pensamiento.

Estúpida conciencia, aveces pienso que es más lista que yo y eso que está dentro de mi mente.

No se cuánto tiempo seguí caminando buscando el estúpido cartel que no me di cuenta de la persona que venía caminando hacia a mi, curiosamente igual de distraído que yo, hasta que ambos caímos de culo y nos miramos el uno al otro por unos minutos.

Más allá de las estrellas. ( COMPLETA)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora