𝗖𝗥𝗘𝗔𝗖𝗜𝗢𝗡𝗘𝗦|| ᴊ.ᴊᴋ EDITANDO

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Lee Soo Rim

-Yo?-Soltó una carcajada y eso me puso más nerviosa-La pregunta aquí es... Qué eres tú?

-Y-Yo?-Pronuncié aún sin entender.

-Sabes que son ellas?-Dió unos pasos hasta donde se encontraban las muñecas y acarició el rostro de la que estuvo más cerca.

-Son... Muñecas-Dije ingenua.

-No-Besó la mejilla de la antes nombrada y volvió su vista a mi-Son mis creaciones. Cada una mejor que la otra... Ellas son tus hermanas.

-Q-Qué dices...?

-Sabes a causa de quien naciste? Sabes quién te creó? -Iba a hablar pero me interrumpió-Ellos no eran tus padres, ellos solo cuidaron de ti un tiempo, necesitaba que tomaras confianza en mí, necesita que tú fueras la que me pudiera venir... No sabes cuánto deseé el día en que me pediste irte conmigo... Yo hice tu vida una mierda-Mis ojos se abrieron como platos al escuchar sus palabras, estaba en shock, no sabía que decir, no sabía cómo sentirme-Yo hice que tus amigos te dejaran de hablar... Yo hice que te quedaras sola... Yo te mandé a ese horrible Orfanato... Sabes por qué?-Me quedé callada y se acercó a mi rostro-Porque tu, Lee Soo Rim, eres mi más grande creación-Se alejó y volvió su vista a las muñecas-Las creé a todas ellas, hice de sus vidas una basura, logré que se fueran conmigo, pero contigo... No... Tu eres diferente, porque eres la mejor.

-E-Estás... Estás loco!! Suéltame!! Quiero irme a mi casa!!-Comencé a gritar de la nada, removiendome en aquella incómoda silla, haciendo que la cadena en mi cuello hiciera más presión, cosa que me dolió, por lo que dejé de moverme.

-Estás en casa, mi amor... En una casa donde nunca podrás salir...-Una risa macabra se apoderó de su rostro, y sus ojos cafés se convirtieron en un rojo intenso, tan brillantes que parecía que con solo una mirada te comerían vivo, y eso me enloqueció.

Estaba aterrada...

-Qué me vas a hacer...-Susurré-Qué me vas a hacer maldito hijo de...-Comencé a gritar y cuando estaba a punto de decir una grosería, su voz me interrumpió.

-Sabes? Mi amor-Caminó hasta mi haciendo eco con sus pasos en la oscura habitación-Soy de todo menos un ángel guardián-Tomó asiento en su silla y me vió burlón. Entonces una de las muñecas abrió los ojos, esto me asustó de sobremanera, puesto que di un brinco en mi lugar y me quedé atenta a lo que la misma haría-Han Hye Sun, mi última creación después de ti. Ella era casi perfecta-La muñeca puso su vista en mi y volví a asustarme, esto era realmente aterrador-Pero tenía una extraña obsesión con los objetos filosos y la sangre...