Benedict continuaba caminando en lo que parecía en cámara lenta y no podía dejar de pensar en cómo demonios iba a hacer para evitarlo. Enseguida mi padre fue a saludarlo con un enorme abrazo y todos procedieron a hacer lo mismo menos yo. Benedict se me quedo mirando extrañado mientras yo trataba de ignorarlo, y muy fríamente lo salude.
-Hola. -dije mientras le aproximaba un beso muy seco en la mejilla.
-Buenos días. -dijo mientras continuaba mirándome sorprendido. No conseguía entender mi frialdad y yo no conseguía entender su caradurez al venir al viaje.
-Bueno, ¿tienen todo listo? ¿Pasaporte y pasaje en mano? -pregunta mi padre entusiasmado.
-Sii. -respondemos todos al unísono. Y proseguimos a embarcar. Era el crucero más grande y elegante que había visto. Una recepción enorme con una cascada arriba del piano hacían lucir hermoso el lugar, la gente no paraba de tomarse fotos y la euforia se podía sentir en el aire. De alguna manera, por unos segundos me olvide de Benedict, hasta que me acordé que estaba ahí.
-Bien, como ya saben tenemos tres camarotes y somos cinco personas, así que ¿Quiénes quieren convivir? -pregunta mi padre mientras todos nos quedamos estupefactos al verlo. De solo pensar en compartir camarote con Benedict estas dos semanas se me revolvió el estomago y un extraño sentimiento de dolor se apodero de mi pecho. -Es broma... -dijo mi padre. -Benedict y yo compartiremos una. Mercedes con Benjamín en otra y tu hija, estarás sola ¿Te parece bien o prefieres quedarte con Mercedes? -dice mi padre y enseguida respondí.
-No! Me parece perfecto. Ya sabes que no me molesta estar sola, me parece bien así. -dije y al instante nos dirigimos a nuestras habitaciones. Tenia una enorme cama matrimonial en la que se encontraba el diario con la cronología de las actividades del día, la tarjeta del crucero con mi identificación y un balcón para mi. "Esto no podría ser mejor". Trate de ordenar la ropa de mi valija adentro del placard lo más pronto posible ya que a las 12pm nos reuniríamos todos a almorzar al buffet y al ver mi traje de baño colgando decidí ponérmelo, quizás me meta a la piscina pensé.
(...)
-Wow! Cuantas actividades! -dice Mercedes observando el diario. Sin duda era muy raro tenernos a los cinco sentados compartiendo el almuerzo y vacaciones cuando casi ninguno se conocía. Interactúe con Benjamín y Mercedes dos veces en mi vida como mucho, y con Benedict, bueno... las cosas no estaban bien.
-Entonces... -dice mi padre para cortar el silencio. ¿Qué les parece el crucero?
-Es hermoso pa! -contesto sinceramente.
-Sin duda esta excelente, necesitare un mapa para no perderme aquí. -agrega Benedict y yo ni siquiera lo miro.
-Yo igual, me tomo al menos cinco minutos encontrar el buffet, ¿Sabían que hay dos restaurantes? -dice Mercedes y Benedict continuaba callado casi juzgándome con su mirada.
-Si eso te sorprende, aquí adentro hay hasta un teatro y casino. Y ni hablar del boliche! Me muero por ir. -dice Benjamín y me mira buscando complicidad.
-Yo también, ¿podríamos ir a dar una vuelta no? -le dije a Benjamín y yo aun continuaba ignorando a Benedict, quién se encontraba hablando con mi padre y enseguida volteo a vernos con una mirada especial.
-Vamos! -dijo Benjamín emocionado.
-Podríamos meternos a la piscina también de paso ¿no? -dije y enseguida pensé de donde había salido eso, pero de alguna forma ver como Benedict ponía atención a cómo me relacionaba con Benjamín me reconfortaba. Nos paramos juntos y nos fuimos a conocer el lugar. Estuvimos varias horas charlando y conociéndonos ya que nunca habíamos hablado de una manera informal. Benjamín se encontraba en la carrera de Arquitectura, se notaba que era un chico con buen sentido de la estética y era hasta algo formal para hablar. Me comentó sobre sus habilidades para tocar el piano y me encantó, siempre fue un instrumento que quise aprender a tocar.
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Mi Profesor (Benedict Cumberbatch y tú)
RomansaEva es una estudiante de 17 años aburrida de vivir en la monotonía de su adolescencia, hasta que un encuentro poco académico con su profesor de literatura la hace debatirse entre lo que esta bien y esta mal. *Contenido explícito