Tan pronto pude escapar de la multitud y de Benjamín quien trataba de acecharme, corrí en busca de Benedict para chequear que este todo bien y saber si no había mal interpretado lo que vió. Nos arreglamos hace unas horas no aguantaría volverme a pelear, así que me encamine a su camarote.
-¿Benedict? Estás ahí? –golpee la puerta de su camarote repetidas veces, escuche unos pasos acercarse hasta que la puerta se abrió.
-¿Eva? –dice mi padre extrañado. -¿Qué haces aquí? ¿Y por qué preguntas por Benedict? –su ceño se frunció levemente con sospecha y confusión. Creo que lo desperté.
-Ay.. eh.. –comencé a tartamudear, nunca fui muy buena para mentir y menos tengo tanta imaginación para inventar una buena excusa en el momento. –Quería preguntarle algo de la escuela. –dije y enseguida me quise matar ahí mismo. "estúpida" me dije.
-¿De la escuela? ¿A esta hora? –dice mi padre todavía más confundido. –Eva es tarde ¿Por qué no te vas a dormir? Deja al señor Cumberbatch tranquilo que esta de vacaciones, y por cierto no esta aquí. Y tu tampoco deberías, ahora ve a dormir que mañana tenemos planes. –dice mi padre enfadado y me cierra la puerta. Si Benedict no está en su camarote, entonces ¿Dónde? ¿Y qué esta haciendo? No es momento de jugar a las escondidas.
Lo busque por todas partes con cierta desesperación, odio la incertidumbre y no saber si estábamos bien o mal era definitivamente peor que estar peleados, por lo menos en ese momento tenia las cosas claras. Ambos habíamos abierto una puerta ahora imposible de cerrar, ya nos habíamos dicho "Te amo" numerosas veces y no quedaba lugar para la especulación, esta relación va en serio. Pero primero tengo que encontrarlo.
Después de un largo rato de caminata me dio sueño y me fui a mi camarote "Mañana aparecerá" pensé. Caminando por el pasillo desganada comencé a sentir la esencia de un perfume familiar, no tarde en reconocer que era el de Benedict, quién efectivamente se encontraba en la puerta de mi camarote, esperándome.
-Al fin te encuentro. –digo suspirando y alzando mis brazos para abrazarlo. A lo que el corresponde dulcemente.
-Siempre mi vida. –dice mientras me estampa un beso en el cachete.
-Ayy no, no lo puedo creer. –contesto mientras me cuelgo de él.
-¿Qué cosa? –pregunta Benedict.
-Que estemos así, después de tanto tiempo sin tener certeza de nada, que ahora vengas y me correspondas de esta manera, no sé, se siente muy liberador. Me encanta poder decirte lo mucho que te quiero sin tener miedo. –le contesto.
-Para mí también lo es, admitirlo no solamente con vos sino conmigo mismo el estar así de enamorado, me parece una locura. Pero una muy linda. –dice Benedict tomándome las manos. Todavía no puedo creer que elijas a este viejo. ¿Vos estás segura? –agrega.
-¿Cómo no voy a estar segura? Más allá de la edad que me parece irrelevante, a nosotros nos unen muchas cosas, y todo lo que estoy sintiendo por vos, no me pasó nunca con nadie. –le digo y esta vez soy yo quien lo estampa de un beso y nos fundimos en un abrazo contra la pared. Benedict es quien le agrega mas sazón al beso recorriendo todo mi cuerpo con sus manos, ambos sabíamos lo arriesgado que era pero aun así seguíamos en el pasillo siendo cómplices de un encuentro furtivo que nos tenia inmersos en la misma fantasía secreta. Pero no tanto como hubiésemos querido ya que los pasos que escuchamos avanzar finalmente nos encontró.
-¿Eva? –pregunta Mercedes exaltada, quién se arrebato más al ver que mi acompañante amoroso era Benedict. -¿y Benedict?! ¿Qué es esto? ¿Qué están haciendo y en el medio del pasillo?
Rápidamente Benedict y yo nos despegamos, no sabíamos qué responder ninguno de los dos y no podíamos si quiera mirarnos, aunque por dentro ambos vivíamos la misma pesadilla: nos descubrieron. Seguida de las mismas preguntas que nunca nos atrevimos a preguntar: ¿Y ahora qué va a pasar?
-Mercedes.. Eh.. No sé como explicártelo, no estábamos haciendo nada. Fue.. una tontearía yo sinceramente estoy muy borracha! –atine a decir entre cortada. –El señor Cumberbatch no es más que una pobre victima de mi persona alcoholizada, vi la oportunidad y la tome. Yo lo bese forzadamente porque estoy enamorada de él desde que es mi profesor! –dije tratando de restarle toda la culpabilidad a Benedict quien me miraba desconcertado sin saber si asentir o escaparse ahí mismo. –Si! Esa es la verdad! Me da mucha vergüenza admitirlo, pero en realidad lo besé por una apuesta de Máximo quien también esta enamorado de él y la persona que le robaba un beso primero al señor Cumberbatch ganaba. –dije y por dentro no podía creer lo que había inventado, apele a lo más básico que existe para generar complicidad con Mercedes, un enamoramiento platónico adolescente, aunque la realidad era todo lo contrario.
-¿Qué? Eva no puedo creer que hicieras eso, ya eres una chica grande para esas tonterias. Y encima comprometer al señor Cumberbatch con un escandalo así. –responde Mercedes en tono de regaño. -¿Y usted? ¿No piensa decir nada Señor Cumberbatch? ¿Me va a decir que no vió de antemano las intenciones de su alumna o usted también esta muy borracho? –agrega Mercedes sin escatimar en su tono acusador.
-No, no lo voy a negar. –contesta Benedict y enseguida me mira. –Perdón Eva, pero no puedo dejar que mientas por mi, soy un adulto y soy el que se tiene que hacer cargo. Mercedes tiene razón, esto es un escandalo. Eva no hizo ninguna apuesta señora, la realidad es que yo también la amo. –agrega Benedict y los tres nos quedamos pasmados.
-¡¿Qué?! –pregunta Mercedes casi gritando. –No, no puedo con esto, yo no soy la persona con la que tienen que hablarlo ya mismo voy a buscar a tu padre Eva. –manifiesta Mercedes quien camina por el pasillo casi corriendo.
-No! No mercedes por favor! No le digas nada a mi padre te lo ruego! Te lo rogamos! En serio. –exclamó mientras la agarro rápidamente del brazo. –Por favor, los dos sabemos que esto es imposible y que probablemente este mal pero...
-¿Mal? a penas se acerca esa palabra. Esto es una transgresión impresionante, se llevan mínimo quince años, perdón pero no puedo ser cómplice de esto y mucho menos ocultarle algo así de grande a tu padre. Si alguna vez se enterara de esto, y que yo sabia, me mata. No Eva, suéltame. –exclama Mercedes mientras trata de zafarse de mi mano.
-Por favor te lo pido, tienes toda la razón. Esto esta mal o cualquier palabra que quieras ponerle, pero es una relacion con sentimientos genuinos y si vas ahora mismo a contarle a mi padre vas a destruir muchas cosas. Primero que romperías completamente mi relación con él, segundo la relacion de Benedict con él, y por ultimo la mía con vos. No quiero perderlo todo, solo déjame pensar. Es mi relacion, y voy a hablarlo yo con mi padre. Que tu seas su pareja no te da derecho de meterte en mi vida porque no eres mi madre. Déjame que sea yo quien se lo cuente. –planteo mientras la suelto. Mercedes me mira aturdida y finalmente asiente.
-Bien, tienes razón, no soy tu madre no voy a meterme. Pero solo te voy a dar este consejo, por más amor que creas que haya, si sigues por este camino esta relacion no te va a traer nada bueno. -susurra Mercedes. –No le voy a contar, por ahora, porque quiero que tu lo hagas. Pero si veo que todavía no lo has hecho y continuas tu relación, no tendré mas remedio que hacerlo. Tenes 48 horas para pensar como le vas a contar a tu padre. Que descansen. -declara Mercedes y mira fatalmente a Benedict quien se encontraba pálido.
Ninguno de los dos quería hablar, no nos salían palabras de la boca. Ni siquiera podía hilar un pensamiento sin tener un fuerte dolor en el pecho que se apoderaba de mi. La angustia, el miedo, el terror, todas las pesadillas se habían apoderado de nuestros cuerpos, era hora de responder ciertas preguntas y enfrentar la realidad. ¿Qué pasaría con nosotros? ¿Y como se lo vamos a decir a mi padre?
Buenassss, despues de tanto tiempo. *pls no me maten* Ya se que deje re tirada esta historia pero me habia quedado este capitulo pendiente, tuve un bloqueo escritor grandisimo pero eventualmente lo pude resolver con esto, ¿como esperan que termine esta historia? yo tengo una idea pero me gustaria leerlos a ustedes. Si es que todavia siguen ahí <3
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Mi Profesor (Benedict Cumberbatch y tú)
RomanceEva es una estudiante de 17 años aburrida de vivir en la monotonía de su adolescencia, hasta que un encuentro poco académico con su profesor de literatura la hace debatirse entre lo que esta bien y esta mal. *Contenido explícito