Cuando tu corazón sea MIO ♥︎[국민 - Fanfic]♥︎

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Unos días antes...

El abogado Kim Namjoon, uno de los más famosos y solicitados del país había vuelto a ganar uno de los juicios más difíciles; anotando un punto más a su carrera.
Y aunque siempre mantenía una sonrisa muy grande, su vida poco a poco se desmoronaba.

Habían pasado exactamente dos meses desde que había estado aplazando la fecha para la boda.
Ya no podía seguir escapando de ese pensamiento.
No podía seguir mintiéndole a una mujer tan maravillosa como Yuna.

Tenía que enfrentarlo y decir la verdad.

No podía dejar de pensar en aquel pelirosa tan hermoso...

No podía avanzar.

Acabaría con la mentira.

—¡Namjonnie! —escuchó el tierno grito de su pareja. El peligris alzó la mirada; encontrándose con su figura al otro lado de la calle.

La pelirroja sonrió felizmente, agitando su mano emocionada.
El mayor esperó el turno de poder cruzar la calle y cuando llegó al otro lado, sonrió triste.

—¿Qué sucedió? —preguntó Yuna al instante—. ¿Perdiste el juicio? —su sonrisa se borró.

Namjoon negó.

—No es eso.

La pelirroja le miró angustiada y tomó su mano.

—Vamos a casa —dijo Namjoon mirándola.

—Pero, creí que iríamos a...

—Necesito decirte algo.

La sangre de la mujer se congeló por completo, su corazón sufrió un martilleó de angustia y miedo.
Jamás vio a Namjoon tan serio, tan misterioso.

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Namjoon cerró la puerta de la casa y dejó sus cosas sobre el sofá.
Yuna avanzó lentamente hasta el sofá y se sentó.

Presentía algo malo...

El mayor le miró y también tomó asiento a su lado, no sabía por donde o cómo empezar a hablar.

—Voy a ser directo, espero que puedas perdonarme y quiero que sepas que eres maravillosa...

Yuna alzó la mirada para verlo fijamente, no tenía expresión, no sabía de que hablaba, tenía miedo, su corazón estaba latiendo tan rápido que sentía que moriría en cualquier momento.

—Nam...

—Quiero romper el compromiso y romper la relación...

Ocho palabras que fueron como baldes de agua fría para la mujer. Yuna entró en un estado de shock.

—Mereces a alguien mejor...

—Pero tu eres lo mejor, Namu, yo te amo. Yo se que me amas, ¿Qué fue lo que pasó? —preguntó a punto de romperse en llanto.

—Yo no te merezco, no debí llegar hasta este punto... Tú fuiste lo mejor de mi vida, pero es momento de que sepas... que soy gay —dijo en voz baja, bajando la cabeza mientras lloraba.

—¿Q-qué estás diciendo?...

Yuna se levantó del sofá y lo miró con lágrimas en sus ojos.

—¡Deja de mentir! —le gritó—. Sólo dilo directo, di que me engañas con alguien más, no tienes que mentir...

—¡No estoy mintiendo! —le respondió Namjoon mirándola—. Soy gay, jamás me gustaron las mujeres. Sólo que jamás tuve una relación homosexual por qué mi familia era capaz de internarme en una clínica.