Cuando tu corazón sea MIO ♥︎[국민 - Fanfic]♥︎

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Park Jimin se encontraba en la cafetería del centro, platicando y bebiendo una pequeña taza de capuchino caliente, junto a su querido amado Min Yoongi. Su mirada se posaba en la pequeña taza, observándola como si fuese lo más curioso en el mundo, después de esto, emboscó una pequeña sonrisa, casi nada notable y apretó ligeramente la taza entre sus manos, envolviéndose en el cálido toque que transmitía, suspiró y la persona frente a él sonrió tiernamente al ver al rubio tan lleno de paz y tranquilidad.

—Cariño —le llamó. Jimin alzó la mirada ante el llamado de su novio quien ahora tenía una amplia sonrisa mientras le miraba con dulzura.

Yoongi era el tipo de hombre que Jimin amaba y le volvía completamente loco. Aquél pelinegro con ojos como los de un felino, labios delgados y piel pálida casi similar a la suya, un poco más alto que él —por unos pocos centímetros—, le encantaba. Así fuera el más mínimo detalle de él, Jimin le amaba, amaba la forma en que el contrario lo miraba; sus ojos reflejaban amor puro y sincero, a decir verdad, jamás imaginó enamorarse tanto.

—¿Sí? —finalmente logró contestar y dio un trago a su café para dejarlo nuevamente sobre la mesa y se acomodarse el cabello.

La intensa mirada de Yoongi se posó en los ojos de su amado, sonrió y acarició su mejilla con suavidad.
Era un ángel, su hermoso ángel.

—Quiero que te cases conmigo... —habló y sacó un anillo de una pequeña cajita roja, era simple, pero eso no le importaba en lo más mínimo a Jimin, él lo amaba con toda su alma—. Se que no es un anillo muy caro como los que traes en tus manos, pero…

El dedo de Jimin se posó en la comisura del labio del contrario, para que callara en ese instante y negó suavemente.

—No quiero que vuelvas a decir eso, sabes que te amo y no me importa que no tengas dinero, no me importa, el dinero no compraría mi felicidad, jamás —acarició su mano suavemente y Yoongi la tomó para besarla—. Yo te amo por ser Min Yoongi y sólo por eso.

—Está bien, pero tu madre…

La mirada de Jimin se tornó triste y llena de esperanzas, falsas esperanzas… que tal vez jamás llegarían a cumplirse.
Sabía perfectamente que su madre jamás aceptaría a un chico de clase inferior a ellos.
Por nada del mundo, ni en su próxima vida.

—Mi madre no importa, con la aprobación de mi padre bastará, se que ella tendrá que aceptarlo —le respondió sonriendo e ignorando su tristeza interior.

—¿Entonces, aceptas? —sonrió dejando ver sus perfectos dientes y rosadas encías como las de un bebé y el corazón de Jimin se aceleró, estaba feliz de tan solo verlo sonreír de esa manera.

Jimin sabía que el compromiso era algo muy serio y tenía que pensar las cosas detenidamente, pero estaba seguro de que Yoongi era el hombre de su vida y que nada lo cambiaría.

—¡Acepto casarme contigo y solo contigo! —se levantó emocionado de la silla y ambos se abrazaron para unir sus labios en un suave beso.

Yoongi era la persona que lo amaba tal y como era, soportaba todo de él, sus celos y sus enojos repentinos. Sabía que él siempre estaría a su lado y por más difícil que fuera la situación lo consolaría y nunca lo dejaría solo. Él, era todo lo que necesitaba para ser feliz y para sentirse bien el día a día.

La gente de su alrededor comenzó a aplaudir felizmente y se acercaron para felicitarlos, la pareja se avergonzó por ser tan ruidosa y volvieron a sentarse para seguir conversando entre ellos.