Diana Prince mejor conocida como Wonder Woman, ha tenido una vida larga protegiendo a los inocentes, ha perdido a su primer amor pero lo que menos se imagina es conocer a su verdadero amor, su alma gemela, su ángel, la que hará que su mundo cambie d...
-Nop... Nada de eso-. Dije cuando Diana quiso hacerme cosquillas.
-¡Bien! Tu ganas cariño-. Dijo Diana con una sonrisa de lado.
-Claro que ganó, pero cambiando de tema, ¿Sabes lo que le pasó a mi computadora?-. Dije señalando la computadora que estaba rota en la mesa.
-En realidad yo no fui la culpable, fue Donna y Sam... Lo siento-. Dijo Diana con una pequeña sonrisa, sin arrepentimiento de nada, tomando asiento en el sofá.
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-Realmente te amo Diana, por qué si no lo hiciera, estarías muerta en este momento por destrozar mi computadora-. Dije apuntandole con mi dedo.
-¡Pero yo no fui!-. Gritó con indignación pero todavía con esa sonrisa que me encanta.
-¿A si? ¿Entonces por qué sonríes? Además, no puedo golpear a Donna, me dolerá si lo hago, al igual que Sam al menos que tenga kryptonita, así que no lo haré pero contigo si puedo pero no puedo hacerte nada, te amo-. Dije con una sonrisa coqueta para colocarme entre sus piernas y besar su frente.
-Yo también te amo Lena Luthor-. Dijo Diana abrazándome por la cintura.
-Pero tendrás que comprarme una computadora nueva y mejorada-. Dije con una sonrisa de suficiencia haciendo que Diana se quejara mientas yo me alejaba.
-Bien, ¿Algún color en especial?-. Preguntó Diana levantándose para abrazarme por la espalda.
-Mmmm no lo sé... Cualquiera está bien menos rosa-. Dije haciéndola reír.
-Lo tendrás a más tardar en la tarde, te amo-. Dijo Diana besando mi cuello.
-Si sigues así, no podremos ir con los demás-. Dije haciéndola reír por qué no me separaba de ella.
-Que esperen un poco, de todas maneras a la que necesitan es a ti, yo tengo que dejar terminada la restauración-. Dijo Diana alejandose de mi y yo hice un puchero.
-¿Cuánto tardas en terminarlo? Pensé que hoy no abría el museo-. Dije frunciendo el ceño a lo que Diana solo se encogió de hombros.
-Dos o tres horas como máximo, no importa que no esté abierto, los trabajadores siguen ahí para mantener el lugar bien y los restauradores para terminar sus trabajos, hay fechas límites-. Dijo Diana y yo hice una mueca mientras tomaba mis notas de la mesa.
-Bien, entonces te veré en un rato, no tardes amor, mientras tanto dejaré estos documentos en la empresa y de ahí me reuniré con los chicos-. Dije haciendo que Diana asintiera con la cabeza mientras tomaba su bolso.
-Seré la más rápida para ti cariño-. Dijo Diana haciendo que la mirará para después sonreir.
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