Diana Prince mejor conocida como Wonder Woman, ha tenido una vida larga protegiendo a los inocentes, ha perdido a su primer amor pero lo que menos se imagina es conocer a su verdadero amor, su alma gemela, su ángel, la que hará que su mundo cambie d...
Escuché un poco de ruido al otro lado de la cama, frunci el ceño para después comenzar abrir mis ojos, sentí el movimiento en la cama, aún estaba un poco desorientada.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Comencé a moverme en la cama para girar, estire mi brazo para poder abrazar a Lena pero gruñi de frustración al ver qué no estaba acostada.
-¿A dónde vas?-. Dije acomodándome mejor para verla en la orilla de la cama.
-Tengo hambre, tú no quieres levantarte y además tenemos muchas cosas que hacer-. Dijo Lena echándome una mirada por encima de su hombro.
-Si, pero es demasiado temprano, vuelve a la cama-. Me queje estirando mi mano pero ella me ignoro.
-No, si vuelvo no vamos a levantarnos, recuerda que debemos salir hacía Metrópolis-. Dijo Lena y yo solo mordí mi labio inferior viendo su espalda desnuda.
-Bien-. Dije simplemente mientras la veía cambiarse. Lena es muy hermosa, demasiado, su piel se había convertido en un delirio para mí.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
-¿No sería mejor darnos un baño?-. Dije quitándome las sábanas de mi cuerpo.
-Si, pero ambas sabemos lo que pasará, haré el desayuno y tú toma un baño, después me lo daré yo, Donna vendrá a desayunar así que apresurarte-. Dijo Lena levantándose para lanzarme un beso.
-Ya voy amor-. Dije haciéndola reír fuertemente.
Miré a Lena irse a la cocina así que rápidamente acomode nuestro desastre en su habitación, tomé mis prendas del suelo para después colocarlas en el cesto para ropa sucia, fuí al cuarto de baño, ahí tomé mi tiempo para hacer mis necesidades, darme un baño extremadamente relajante para luego salir, seque mi cuerpo y comencé a cambiarme, maquillarme y peinarme.
Escuché la voz alegre de Lena, mi novia amaba cantar mientras cocinaba, siempre lo hacía y muchas veces era inconciente, amaba su voz y amaba todo lo que ella hacía, salí de la habitación para después caminar por el pasillo, tomé asiento en el taburete mirándola con una sonrisa en mi rostro, cuando giró para dejar un plato en la mesa, dejo de cantar para verme sorprendida.
