Walter y Lance ya siendo los mejores como parejas en la empresa de espías, poco a poco atravez del tiempo se unen llegando a obtener el sentimiento llamado amor, el gusto que sentía el alfa (Lance) siempre trataba de marcar al beta (Walter) dejando...
Al entrar, Walter comenzó a ver todo el lugar, ya que era muy lujoso y elegante, así pudo notar todos los contactos y la influencia de su pareja tenía
-¿Y qué tal?, ¿te gusta el restaurant?- dijo un nervioso Lance.
- Me encanto- menciono Walter muy alegre por la sorpresa.
-Me alegro que te gustara - dando un respiro leve, porque se sentía aliviado.
Lance camino junto a él dirigiéndolo hacia una mesa redonda, con un mantel blanco, sus servilletas eran de color vino que hacían resaltar, en el centro de la mesa se encontraba un candelabro dorado con unas cuatro velas encendidas, ahí mismo estaba una botella de vino tinto para darle un toque perfecto en la cena. Walter le encanto la mesa haciéndolo avanzar hacia ella, el moreno como todo un caballero que era aparto la silla donde se iba sentar su amor, el oji-azul se sentó en ella, así posteriormente el agente acerco la silla hacia la mesa.
Acto seguido Lance se sentó en su lugar con una sonrisa muy bonita, así llamo al mesero que los iba a atender, para luego acercarse un chico muy guapo de tez blanca; color miel sus ojos, cabello rizado, que parecía de 22 años.
-Buenas noche caballeros, le doy la bienvenida al restaurant.... - muy amable el muchacho.
-Espero que les guste la hospitalidad aquí, le dejo la carta para que puedan ordenar.
-Muchas gracias - respondió Walter agarrando la carta.
El muchacho se retiró del lugar para que ellos puedan escoger sus platos de la cena.
-Pues..... - respondió el castaño
-Tengo pensado ordenar tofu asado con verduras, me gusta mucho verduras - dijo el chico.
-Okey, pues unas costillas de res, entonces voy a llamar al mesero para ordenar.
Llamo el macero, así tomo sus órdenes para luego retirarse de nuevo, después de unos 20 minutos volvió para acomodar los pedidos, y así posteriormente abrió la botella de vino y sirvió en las copas, así finalmente se retiró.
- ¿Esto es como una primera cita verdad? - el castaño hablo sonriendo.
- Sí -respondió Lance son una sonrisa.
Así ellos siguieron hablando de sus anécdotas que pasaron juntos durante el tiempo que se conocieron así riéndose. Sin querer terminaron la cena y siguieron con el vino, sirviéndose hasta la última gota, así continuaron una, dos, tres botellas que terminaron un poco mareados. Lance comenzó a mirar a Walter fijamente desde su cara hasta su cintura con lujuria.
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Queriendo comerlo completo, Walter se dio cuenta así que comenzó a seducirlo correspondiendo con su sonrisa sensual mostrando parte de hombro delgado descubierto así prendió en su totalidad al moreno, sacando su instinto que se levantó de su sitio, se acercó a él y le susurro.
- Hay que irnos a un lugar mejor para divertirnos - a lo que el castaño respondió.
- Espero durar toda la noche a tu lado mi chocolate - con voz excitada.
Al terminar la conversación, se dirigieron rápido a la caja para pagar la cuenta, velozmente se fueron al auto, así que Lance no dudo más y se llevó al hotel que reservo anteriormente. No pudieron contenerse más y comenzaron a besarse desde el ascensor, y llegar a la habitación, así parecían unos amantes primerizos por la pasión que sentían ellos, por rozar sus labios y sus lenguas que se tocaban en sus bocas, así ellos cayeron a la cama para separar sus labios y mirarse unos segundos tomando aire y respirando excitados los dos.
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