Contrato.

2.2K 127 1
                                    

Sus ojos seguían bien abiertos mientras le miraba incrédula ¿estaba bromeando, no? Tenía que ser broma, ella no encontraba como esconder su sorpresa… ¿casarse? con Jason… ¿definitivamente se le había achicharrado lo que le quedaba de cerebro, no? Se sentía enojada, histérica y usada pero más que todo sorprendida, aunque no entendía porque… de Jason se podía esperar cualquier cosa, pero una locura como esa… ¿Qué le pasaba? Movió su cabeza de un lado para otro y lo miro otra vez.


-¿Estás loco? ¿Casarnos?

Jason la miro. Su rostro no mostraba más que seriedad, el en verdad ¿No estaba jugando?

-¿Por qué me casaría contigo? ¡Estás loco! – Aclaro su garganta – Parece que no has entendido pero a mi no me gustas ¡No te soporto!

-¡A mí tampoco me gustas! – renegó molesto y la miro ¿Qué no lo soporta? Y a él que le importa – Eres tan molesta, gritona y sucia. ¿Cómo podrías gustarme?

¿Gritona? Pensó Jane – Yo no soy gritona. Lo miro fijamente. 

-Entonces... ¿Cómo pueden casarse dos personas que no se gustan? ¿Estás drogado?

-Después será más fácil divorciarnos si no nos gustamos ¿No lo crees? – su indiferencia al hablar era demasiado para ella… se termino de poner la camiseta blanca y paso sus manos por la cabeza.

Esto sobrepasaba el límite de todo. De sorpresa e incluso de cinismo, Ni en sus mas ocultas locuras, Jane pensó encontrarse algún día como un sujeto como Jason, tan arrogante, engreído y creído dueño del mundo... Ahora encima de todo ¿Quería convertirla en una mujer divorciada? ¡Por Dios, tan solo tenía 23 Años!

-¿Divorcio? – Mascullo. Su tono bajo no se debió a la calma. Jane se encontraba sorprendida. Jason la miro sereno. Esa bendita serenidad que el mostraba, la descomponía mas rapido. ¿Cómo es que podía hablar de matrimonio y divorcio así de fácil? ¿era un lunático o qué?

-Sí, divorcio o ¿Qué? – Jason alzo la mirada hacia ella - ¿Quieres casarte conmigo para toda la vida?

¿Quién carrizo le dijo que ella había aceptado casarse? Lo miro. Esos ojos le darían muerte. Si fueran un arma mortal, claro.

-Es solo que estoy arto de los escándalos – se excuso serio. La mirada de Jane cambio. Era más calma ahora – Y que las chicas estén detrás de mi - *Rey Narcisista* - por eso decidí contratarte como mi esposa. Te pagaré por supuesto y te daré una pensión alimenticia cuando llegue el momento del divorcio. No deberás preocuparte…

Jane soltó una sonrisa al oírlo. No podía creer lo que escuchaba. Estaba completamente loco y grandemente equivocado si él creía que ella se casaría con él. ¿ No estaría ella más loca si lo hacía?

-Estas completamente chiflado ¿Lo sabías? – Le interrumpió - Mi respuesta es No, por supuesto… Consíguete una loca para esta locura. Yo paso. – le sonrió cínicamente una vez mas y dio un paso hacia la puerta. 

- Mmm pensión… - Mascullo al ver su firme negativa – Y si mejor Te doy esta casa en lugar de la pensión ¿No Seria esta una mejor idea? – Jane se detuvo en seco y dio media vuelta hacia el ¿Había dicho lo que ella escuchó? Jason sonrió - ¿Qué te parece? piénsalo bien y decídete Jane. Por ahora Ese “no” que me diste lo olvidare. ¿Bien? – se quedo mirándolo seriamente. No era tan cabeza hueca después de todo. Esa propuesta logro hacerla dudar de lo que ya había dicho. No, el no era ningún bruto.

Salió de la habitación a paso lento. Pensaba en su extraña propuesta. Si, Era una locura pero… ¿no era una forma fácil de recuperar su casa? ¡Estúpido! ¿Cómo es que por lo menos la hizo reconsiderar su propuesta? 
Se sentó en el columpio de madera, ubicado en el jardín trasero de la casa y su mente camino lejanamente por ella misma. Empezó a mecerse suavemente empujándose con la planta de sus pies. No estaba muy feliz. Era de noche y las estrellas adornaban con su brillo matutino el cielo azul oscuro. ¿Podía ella hacerlo? ¿Casarse? ¿Ella podría? Cerro sus ojos mientras el viento frio de la media noche acariciaba su rostro y entonces lo decidió. Quizá era la mayor locura que cualquier persona con sus 5 sentidos podría cometer, pero… ¿Qué tenía ella que perder para no hacerlo? Nada… Y Además ¿Tenia ella bien puestos sus cinco sentidos? Obviamente no. Dio un pequeño suspiro y miro al cielo. Esa casa era lo único que tenia. No podía perderla.

“Al Día Siguiente”

Estaba sentada en la mesa del comedor. Su mirada estaba fríamente sobre Jason, quien se encontraba sentado frente a ella. La mirada de él era exactamente igual a la de Jane. Fría y determinante. En ese momento no se podría decir que pensaba el uno del otro exactamente. ¿Cuál de los dos estaba más demente? 
Jason bajo la vista hacia el papel blanco que Jane le había dado y lo Leía atentamente.

-Esto es un contrato de matrimonio – Dijo seriamente ella – Después de todo necesitamos uno, ¿No?

Jason siguió mirándola fijamente. Sin ninguna expresión. A cualquier otro le daría miedo esa mirada asesina, pero en Jane ya no hacia efecto. Ella Tomo el papel y empezó a leer.

Contrato matrimonial:
-Primero: Respetaremos la privacidad de cada uno.
-Segundo: No exigiremos Intimidad física.
-Tercero: la duración del matrimonio no excederá los 6 meses
-cuarto: Una vez divorciados, La casa en la cual nos encontramos “Full Dreams” Regresara a Manos de Jane, su dueña.

Jane colocó la hoja del contrato sobre la mesa y entonces lo miro. Jason lucia exactamente igual ¿Cómo podía conseguirlo? Estar tan inexpresivo.

-¿Alguna objeción? – le preguntó. Jason carraspeó

-Anexo – Dijo mirándola sin espabilar – Si este acuerdo es revelado a un tercero se anulara inmediatamente quedando sin efecto y el responsable por esto expedirá la pensión adecuada. ¿Está bien?

Jane con su firme seriedad no le apartó la mirada.

-¡Esta bien!

Ambos tomaron la hoja del escrito y lo firmaron sin miedo o indecisión.
De este modo quedo en un total acuerdo lo que era la más grande locura que se pudiera cometer… un Matrimonio… sin amor.
Jane miro a Jason y dio un suspiro…. Le parecía aun increíble que después de todo él sería ahora su futuro esposo…
Jason la miro a ella… esa chica…. Esa chica se casaría con él.
¿Quién estaba más demente? Se repitió la pregunta en el ambiente mientras se miraron… Quizás los dos. 

Amor por Accidente [TERMINADA]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora