Can
Despertar con mi familia en los brazos fue una sensación estimulante, había dormido de maravilla como no lo había hecho en años.
La miré encantada, durante la noche Nihat se había despertado y Sanem lo había llevado a su cama para amamantarlo y luego había dormido entre nosotros hasta la mañana.
Mi brazo hacía de almohada mientras el otro sostenía los dos tesoros de mi vida, el pequeño abrazado entre nuestros corazones.Sanem se despertó lentamente dándose cuenta en un momento de dónde y sobre todo con quién estaba, me dedicó una sonrisa dulce y somnolienta, para mí era una obra de arte.
Nos miramos conmovidos por la belleza de aquella nueva situación, nos sentimos felices.Empecé el día con renovados bríos, preparé el desayuno para mi mujer, qué placer me dio este pensamiento, pensando en todo lo que tenía que hacer para empezar nuestra vida juntos.
Besé a Sanem y Nihat antes de ir a cambiarme y salir para la agencia, tenía una sesión de fotos para la campaña de la nueva empresa de moda, tenía que ir a preparar el set.
Mientras conducía pensaba en todo lo que tenía que hacer y en lo que nos esperaba esa noche, no podía esperar.
Volví a última hora de la tarde cansado pero entusiasmado, se lo dije a mi padre, me di una ducha rápida en el barco y luego fui en busca de los amores de mi vida.
Los encontré bajo el sauce de siempre jugando en la cubierta, me tumbé con ellos, cogí a la pequeña Nihat en brazos sin olvidarme de dar un beso apasionado a mi Sanem, parecía estar más radiante que nunca ese día y la quería a muerte.En un momento dado le dije que tenía que ir a buscar algo al barco y me fui, había oído el ruido del coche, me dirigí hacia la carretera para recibirlos.
Ya estaban fuera del coche y de la mano se dirigían hacia mí, en cuanto me vio Layla se quedó helada.
Pude entender cómo se sentía, me acerqué a ella con firmeza y tomé su mano.- Entiendo que estés enfadada conmigo Layla, no puedo culparte, por mi culpa durante más de un año ya no tienes a tu hermana a tu lado, solo puedo pedirte disculpas, mi orgullo fue la causa de tanto dolor para todos.
Espero que con el tiempo puedas perdonarme, pero ahora tengo que pedirte que confíes en mí y en Emre, ven conmigo, Lütfen, por favor.
Sentí que se resistía a mi agarre, le costaba confiar, cómo podía culparle.
- Lütfen, es por el bien de todos, confía si no en mí entonces confía en Emre, te lo ruego -Miró a su marido por un momento y él la instó a seguirme, suspirando ella también asintió y aceptó venir conmigo a la pequeña casa de campo.
Layla
Nos dirigíamos a un bonito edificio con vistas al Bósforo, pero en lugar de entrar lo rodeamos y ..... volví a detenerme sobre mis pasos nada más doblar la esquina.
Me quedé literalmente atónita, con los ojos muy abiertos por la sorpresa, me llevé la mano a la boca permaneciendo unos instantes interdicta y luego ....- ¿Abla? ¿Hermana, Saneeem? -
Sanem levantó la vista y se quedó petrificada, nunca hubiera imaginado encontrar a su hermana allí de pie frente a ella, en su escondite.
- ¿Abla? -
Corrí hacia ella y Sanem hizo exactamente lo mismo al mismo tiempo, chocamos a medias abrazándonos como si nuestra supervivencia dependiera de ese abrazo. Nos quedamos abrazados llorando durante un tiempo interminable.
Entre las lágrimas y los sollozos, en un momento dado me centré en el pequeño niño que Sanem tenía justo antes en la manta donde estaba sentada. Aflojé el abrazo para mirarla a los ojos.
- ¿Sanem? ¿Qué estás haciendo aquí? ¿Quién es ese niño? -- No me digas .... ¡No puedo creerlo! -
Mis ojos se abrieron de nuevo, jadeé al darme cuenta, al darme cuenta de que era una tía, de que tenía un nieto. No podía creerlo. Mi hermana, mi hermana pequeña fue mamá, tuvo un bebé.
Volví a abrazarla con fuerza, me di cuenta en una fracción de segundo de lo que había pasado en ese año de ausencia, me di cuenta de que sola, completamente sola, había afrontado un embarazo y un parto.
Me sentía tan culpable, ¿qué había hecho para no merecer su confianza? ¿Por qué no me lo había dicho? Mil preguntas se agolpaban en mi cabeza pero no era el momento, ahora sólo tenía que abrazar fuerte a mi hermanita y sobre todo era el momento de conocer a mi sobrino.Evidentemente, Sanem pensó lo mismo porque me tomó de la mano y me llevó bajo el gran sauce, tomó al bebé en brazos y sonriendo me dijo:
- Conoce a mi hijo, tu nieto, conoce a Nihat-
Cuando escuché ese nombre no pude contenerme, instintivamente me acerqué a ellos y los abracé juntos, llorando, al pequeño evidentemente le hizo gracia porque empezó a reírse y a balbucear, agitando sus manitas en nuestro pelo.
Nos alejamos para mirarnos a los ojos y admirar al pequeño Nihat, que esbozaba una de sus más bellas sonrisas en honor a su tía.
Can y Emre se acercaron lentamente.
- Aquí hay otro tío al que le encantaría que le presentaran a su sobrino", dijo Emre.
Emre
Todavía no podía entender que Can y Sanem tuvieran un bebé, que me hubiera convertido en tío.
Había tenido varios días para hacerme a la idea, pero ver a ese pequeño y perfecto ser en los brazos de Sanem hizo que ese pensamiento abstracto se convirtiera en una presencia de carne y hueso, y era una presencia maravillosa.
Al vernos acercarnos, el pequeño Nihat corrió hacia su padre, indicando claramente que quería ser abrazado, Can estaba obviamente conmovido, probablemente él también estaba todavía digiriendo esta nueva realidad. Lo levantó y lo giró hacia mí.
- Nihat, te presento a tu tío Emre, aún no hemos averiguado si tus grandes ojos azules son del tío Emre o de la tía Layla-.
Sonriendo extasiada, alargué la mano para cogerla, el pequeño apretó firmemente uno de mis dedos, conquistando un trozo de mi corazón para siempre, tenía lágrimas en los ojos y no podía dejar de sonreír.
Al principio de su historia había herido a Can y a Sanem, habría lamentado mis acciones para siempre, pero por suerte ellos habían conseguido perdonarme a ambos.
Ahora nos habían dado este maravilloso regalo, ella había estado en una situación muy difícil, podría haber tomado diferentes decisiones y hoy esta maravillosa criatura no podría estar aquí con nosotros para darnos una inmensa alegría. Sólo podemos dar las gracias a Alá por el gran corazón de Sanem, que le hizo tomar la decisión más difícil, pero también la correcta.
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Un amor que renace de las cenizas
Fanfiction¿Qué han vivido Can y Sanem en el año que llevan separados sus corazones? ¿Y ahora que el destino ha permitido que sus ojos se vuelvan a encontrar y que sus almas vuelvan a sentir el poder de ese amor incondicional?