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📌Me veo en la necesidad de advertirles que este cap tiene un poco-mucho MewMild. Esto fue esencial para la historia.

Dos días pasaron desde aquel vergonzoso suceso. Resultaron ser días demasiado tediosos. La relación de ambos hombres cambió drásticamente para mal y ahora Kanawut no está ni en lo más mínimo interesado en ver a Suppasit luego de descubrir una faceta tan desagradable de él.

Para el alfa, es un tanto lo contrario. Esas cuarenta y ocho horas han sido demasiado tediosas para su salud mental, inicialmente por el hecho de que nunca imaginó ver a Kanawut tan enfadado con él.

La forma en que le observó con cierto desprecio y le habló de forma tan firme, le hizo darse cuenta de que el omega no siempre sería sensible, amable y sumiso ante él. Después de todo Gulf sigue guardando un poco de su antigua personalidad, aquella que conoció y le hizo la vida difícil en secundaria.

Ahora intenta prestarle atención a los documentos sobre su escritorio, aunque claramente es un intento vano, su mente no puede alejarse del pensamiento insistente de haber arruinado todo y eso realmente le hace sentir abrumado. Lo peor es que no entiende del todo porque le toma tanta importancia a su relación con Kanawut.

Unos leves golpes en la puerta de su oficina hicieron que se sobresaltara. Kaownah, su secretario, abrió un poco la puerta y asomó una parte de su cuerpo.

-Señor Suppasit, el señor Suttinut desea hablar con usted -la voz del beta se escuchó un tanto nerviosa.

Suppasit frunció el ceño cuando escuchó el nombre de su prometido. -Dile que estoy ocupado. No puedo atenderlo en este momento.

-Si, uhm. Lo haría, pero... -titubeó Kaownah.

-¿Pero qué? -musitó molesto.

-Estoy aquí, Suppasit -la puerta terminó de abrirse, haciendo que la figura de Suttinut se mostrase ante él.

Mew de inmediato cambió su expresión y tuvo ganas de golpearse a sí mismo.

-¡Oh, Mi-...

Fue interrumpido por el omega. -No intentes justificarte Mew.Ya me ha quedado claro que no deseas verme hoy, igual que todos los días pasados y probablemente los que siguen.

El alfa se quedó pasmado ante tales palabras, ahora también está viendo una faceta extraña en su prometido.

Kaownah, quien seguía presente, retrocedió con lentitud y escapó de aquel desalentador escenario. No hay que ser muy inteligente como para saber que su presencia está de más en esa futura discusión.

-¿Cómo puedes decir algo así Mild? -reclamó Suppasit.

-¿Y no es cierto? -Suttinut se dirigió hacia donde Mew guarda sus botellas de licor, dándole la espalda al mismo, y buscó un vaso en donde servirse un poco del primer vino que encontró.

-No, claro que no -Suppasit finalmente se levantó de su lugar, teniendo un muy mal presentimiento de a dónde se dirige la conversación.

-Oh, por favor Mew -se quejó en respuesta, ante lo está seguro son solamente palabras superficiales
-. Sé sincero por una vez. ¿Crees que no me he dado cuenta?

-¿Darte cuenta? -el alfa no puede estar más confundido. No entiende qué pasa ni que trata de decir su contrario.

Mild se dio vuelta y tras darle un sorbo a su bebida se acercó a Mew. -Estos dos días no has ido a ver a Kanawut, tal vez se debe a la discusión que tuvieron hace poco.

-¿Cómo sabes-...

-Sé más listo, Suppasit. Le alzaste la voz frente a un montón de empleados. Ahora hay un gran rumor sobre ti y ese omega en todo el edificio -frunció el ceño y suspiró -. Dime,¿cómo se supone que debería sentirme al respecto?

El Juego Del Destino | MewGulfDonde viven las historias. Descúbrelo ahora