El Destino De Conocerte (Sessirin)

El niño malcriado se sonrojo

Rin ya estaba lista y completamente hermosa para presentarse en la escuela, los cuidadores de rin no podían evitar lo orgullosos que estaban por la pequeña, además ella era una niña bastante optimista y cariñosa.

Por otro lado estaba un niño, terco, mañoso y totalmente arrogante que por unas horas estaba que se cagaba dentro del avión y mucho antes de subir al avión, el ya estaba listo y lindo, como su madre siempre le decia que se debia ver guapo en este tipo de ocasiones, ademas no tenia opción Sesshomaru ya es guapo.

—Bien, vamonos niños— Dijo el profesor al ver que ya estaban todos en filita, ellos salen del hotel y toman el bus, no eran los únicos niños que venian de otros paises a visitar las mejores escuelas de japon.

A Sesshomaru esto de estar en Japón no era sorprendente, pues su madre y su padre eran japoneses, ademas el iba a ver a su padre a Japón siempre y cuando el estuviera ahí, Sesshomaru se gano como de costumbre en la ventana y miro ciertos sectores que el ya conocía, algunas cosas no cambiaron por mas que se lo imaginó, esta vez Sesshomaru trataría de descansar, pero le era imposible por el doserden de sus compañeros y los gritos de la castrosa eran peor, aveces el se preguntaba "¿Como es que esa niña lograba buenas
notas?", tampoco se podía quejar mucho ya que el también tenía su carácter arrogante, muchos le decían que era un mimado de clase alta o simplemente un mocoso malcriado, y eso era bastante cierto.

El bus llego a su destino y todos bajan en orden, la escuela era grande y elegante, se notaba a lo lejos lo profesional, todos los niños estaban sorprendidos menos Sesshomaru, el ya sabia como era por dentro, esto le parecía completamente aburrido, el se puso a pensar que no valio la pena el terror en ese maldito avión, sentía que había perdido su tiempo.

Sesshomaru frunce un poco el ceño al entrar, sinceramente el se quería ir, su compañero miraban con completo asombro los pasillo, el director de la escuela era trilingüe así les hablaba en Noruego a todos mientras caminaban por el pasillo.

El profesor Kirinmaru escribía en la pizarra mientras esperaba a que entraran los niños de Noruega, Rin sobretodo prestaba mucha atención a las explicaciones de su profesor.

Rin vio como el director abrió la puerta del salon y se puso en frente de todos, en eso todos los alumnos del salon se pararon de sus asientos en forma de respeto hacia su director y sus invitados, el director dejo entrar a los niños que venian de Noruega y los presento de manera formal, muchos de los niños Noruegos estaban curiosos, excepto uno, Sesshomaru, el tenia su tipica cara de culo, un poco más y ya se ponía a llorar por querer salir de la escuela, mientras todos los niños les hacían preguntas a los de Noruega, Sesshomaru sin querer queriendo miro a una niña completamente hermosa ante sus ojos, ella era callada y aunque se notaba su humildad se notaba que era feliz, para Sesshomaru fue como ver un ángel, y como era un niño pequeño estaba avergonzado de esto, el dejo de mirarla y se puso a mirar un reloj que había colgado en la pared, pero para su mala suerte el reloj estaba malo, entonces Sesshomaru quiso profundamente que la tierra se lo tragara o que el dios Odin hiciera una tormenta para poder retirarse antes.

El director, el profesor Kirinmaru y el profesor de Sesshomaru salieron a conversar fuera del salon, y dejaron que los niños conversaran e hicieran amistad, Sesshomaru con su mega timidez fue hacía la ventana, pues no quería entablar conversación de ningún tipo, pero la niña que Sesshomaru estuvo mirando se le acerca, Sesshomaru la mira.
—¿Que quieres?— Pregunto en un tono pesado y obviamente hablando japonés, la pequeña Rin sin decir nada le ofreció una galleta, pero el muy pesado de Sesshomaru desvio la mirada y volvio a responderle con su tono del trasero
—Largate— La pequeña Rin se puso un poco triste y como le habian enseñado el de no rogarle a nadie, se dio la medía vuelta para socializar con otra persona, pero el muy indeciso de Sesshomaru volteo a verla y le hablo de nuevo
—Espera— Rin se detuvo y volteo a verlo, Sesshomaru miro hacia el piso y entre un puchero acepto la galleta —Si quiero— Rin sonrio y se la entrego amablemente en la mano, lo que provocó que el malcriado de Sesshomaru que nunca sabe lo que quiere se sonrojara hasta las orejas, Sesshumaru volvió a mirar la ventana completamente avergonzado y le pregunto tímidamente —¿Como te llamas?— a lo que Rin con un tono completamente alegré contesto —¿Rin y el tuyo?— Sesshomaru iba a contestar pero su profesor los mando a formarse en fila y tuvo que dejar inmediatamente a Rin, Rin se fue a su puesto, se había quedado sin saber el nombre de aquel niño, Sesshomaru le había agradado a Rin, y el no saber su se convirtió en un gran misterio para ella, ese niño le daba algo de curiosidad y no tuvo oportunidad de preguntarle más cosas.

Sesshomaru y su grupo ya habían vuelto al hotel y los esperaban con una abundante cena, Sesshomaru no era de comer demasiado, y aun guardaba la galleta que aquella niña le regalo y tampoco quiso comérsela, pensaba en guardarla como recuerdo, pues no queria olvidarse de aquella niña, lamentablemente no volverían a esa escuela e internamente Sesshomaru maldecía el momento en el que pensaba en irse de esa escuela que ya conocía y también maldecía el echo de no volver, se quedo con las completas ganas de querer conocer bien a esa niña.

Rin ya había vuelto, tomo sus cuardenos y se puso a estudiar.